KANCOLLE: 14 DIV de destructores.

CAPITULO 40

POV TERCERA PERSONA

Izumo forzó la vista.

Las olas estaban tranquilas pero el clima estaba parcialmente nublado. Es lo contrario de "El clima está despejado con marea alta". Aunque no es algo tan serio como la pelea.

¿Hay alguna señal del enemigo justo en frente? La Flota Abisal puede aparecer repentinamente, por lo que la precaución es una necesidad. Es por eso que a las chicas se les ha inculcado la importancia de la observación, incluso si parece que no es nada. Durante el tiempo que no estaban preparados, solo tenía que aparecer una clase de acorazado, durante el tiempo que no se dieron cuenta, los proyectiles de 16 pulgadas solo tenían que caer sobre ellos. Los ejemplos de aquellos que fueron negligentes al acechar y luego desaparecieron en una tumba de agua son demasiados para mencionarlos.

Su nombre es la Flota Abisal. Surgieron de la nada para causar estragos en los mares, el mayor enemigo de la humanidad.

Nadie sabe cuándo aparecieron. En realidad, es mejor decir que se descubrió que existían incidentalmente. La Flota Abisal destruyó cualquier barco que se interpusiera en su camino, destrozando las rutas marítimas en pedazos. Innumerables barcos fueron hundidos y destruidos, desapareciendo en las profundidades del mar.

No había nada que pudiera luchar contra ellos. No, aparte de las chicas, no había nada que pudiera.

Son las chicas de la flota. Aquellos que fueron lanzados al mar para oponerse a la Flota Abisal equipada con armamentos, los guardianes que alcanzarían la victoria para la humanidad. Las chicas de la flota son doncellas escogidas, un título digno de orgullo.

Incluso dentro de esas chicas de la flota, Izumo es una chica de la flota destructora notablemente pequeña, muy ágil y resuelta.

Ella agarró sus binoculares recién equipados, una vez más fijando su mirada al frente.

No había nada más que un mar azul que brillaba en silencio. No hay nada. Quizás nada.

Como Destroyer Fleet Girl, no debe ser descuidada. Los acorazados o cruceros pesados que permanecían bien después de ser alcanzados por dos o tres proyectiles. Su única forma de explorar son sus dos ojos y si, por casualidad, la golpearan a quemarropa, sería historia. Es imprescindible actuar con extrema precaución.

Sus dos pies plantados en la superficie del mar, temblaron ligeramente.

Su ansiedad también afecta a sus pies. Por lo general, nunca estaría tan ansiosa, solo que hoy las circunstancias eran diferentes. Las dos máquinas principales que llevaba en los pies como zapatos le quedaban bien, pero una y otra vez dejaban escapar un sonido de tos. El encargado del mantenimiento estaba siendo tacaño al engrasarlo. Gracias a eso, sus sentimientos se convirtieron en una creciente inquietud en su corazón. Si solo lo preparara ella misma, este tipo de cosas no habrían sucedido, pero debido a su propia estupidez, se quedó dormida. Cuando recordó haber dormido con el sabor de la dulce sopa de frijoles rojos que comió anoche, estaba en este lío.

Yo: Por favor, sé un poco más silencioso, ¿de acuerdo?

Ella silenció la máquina principal con un susurro.

Yo: Ambos lados avanzan, a media velocidad.

Como patinando, podía sentir su cuerpo moviéndose hacia adelante.

El viento lavó sobre su cabeza. Sabía cómo revoloteaba la cinta en su cabeza. Tan refrescante, se sentía bien. Incluso por un momento, la preocupación en su corazón fue olvidada.

Al darse cuenta, Izumo negó con la cabeza. No hay tiempo para estar a gusto. Incluso si se viera así, es el nombre de la nave de la Clase Izumo. Su brillante característica calculadora y progresista es su punto a favor. No podía perder de vista el objetivo principal.