Doce

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Me despertó la tenue luz de otro día nublado, puse el brazo sobre mi rostro mientras abría los ojos un poco confusa, gemí y rodé sobre un costado esperando volver a dormirme y entonces lo acontecido la noche anterior interrumpió en mi conciencia.

Sonreí recordando todo lo ocurrido y luego di un largo suspiro, gire la cabeza hasta que mis ojos se encontraron con las manecillas del reloj que marcaban las 04:32 pm y salte rápidamente de la cama.

Me precipite hacia al baño para tomar una ducha larga. Después de cepillarme los dientes, me esforcé por alisar la maraña caótica que era mi cabello y luego salí nuevamente del baño hacia mi habitación.

Baje las escaleras rápidamente y me detuve en seco al ver a papa.

-Hasta que al fin decides despertar.

-Buenas tardes a ti también-murmure y me dirigí a la cocina.

-El desayuno ya paso por si no lo sabias... ¿Tienes idea de a que hora regresaste ayer?-arrugo su frente.

Levante ambos hombros con indiferencia.

Encontré una caja de cereales y una taza sobre el taburete, pude sentir los ojos de papa en mi mientras tomaba un poco de leche y una cuchara, puse la comida sobre la mesa y luego me detuve a mirarlo.

-¿quieres algo?-pregunte.

Frunció el ceño-Estoy bien.

Me senté y le observe mientras comía. Al cabo de unos minutos él salió de la sala por un momento hasta que llego nuevamente con su uniforme de trabajo y unos documentos en sus manos.

-Tengo que ir al trabajo-dijo-volveré tarde, no me esperes... ¿Tienes planes para hoy?

Metí una cucharada de cereal a mi boca-Se me ocurría algo.

-Vale, cuídate-se limitó a decir y finalmente salió.

Aun me seguía preguntado porque papa no aceptaba completamente a Caleb, mientras especulaba me apresure a terminar los cereales, permanecí plantada en la mesa durante un tiempo hasta que decidí salir al frente a tomar algo de sol.

En momentos así, cuando me encontraba sin nada que hacer solía llamar a Jade para juntarnos. Pero las cosas cambiaron un poco desde que Hunter y ella salen, seguimos siendo muy buenas amigas pero debo admitir que se ha roto un poco ese lazo que nos mantenía tan juntas.

Bostece un poco y finalmente me rendí ante el sueño nuevamente, gire para caminar hacia la puerta y me detuve en seco al observar Caleb parado frente a ella.

Sonreí-deberías dejar de aparecerte así, tengo un teléfono ¿sabes?

Escuche una risa proveniente de su parte y luego se giró para observarme-Lo se, pero preferiría mantener mi estilo de chico malo.

Gire los ojos divertidamente y me cruce de brazos-¿Que haces aquí?

-Vine a invitarte a una cita.

Observe mi atuendo y fruncí el ceño-¿ahora?

-No-negó-a las 7.

Asentí-pues aquí te espero.

El guiño un ojo y luego camino hacia su Harley-Ah, Novale te propongo algo.

-Dime

-Tu usas vestido y yo un esmoquin ¿que dices?

Sonreí-que tendré que comprarme un nuevo rastrillo...

El sonrió y luego se acerco lentamente hacia mi-Pero que dama-dijo y pego sus labios a los míos-entonces ¿te veo a las 7?

Asentí-A las 7

E D U N| TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora