E D U N| TERMINADA.

Cuatro

No lo podía creer, ese idiota se había marchado dejándome tirada a la mitad de la calle sin siquiera darme un motivo coherente.

Ya había logrado avanzar algunos 5 kilómetros caminando, y aun así aun no veía señal alguna de estar acercándome a cualquier lugar, en definitiva odiaba a Caleb.

Senti el sonido de un motor acercándose y por instinto propio me detuve a observar de quien se trataba, el chico en el cual hace un rato pensaba se encontraba a acercándose a toda velocidad.

-¿Se puede saber donde coño te habías metido?-gruño, una vez que me alcanzo.

-¿Disculpa?-pregunte incrédula-Me dejas tirada en quien sabe donde y luego tienes el coraje de venir a preguntarme donde me habia metido, estas loco.

Caleb frunció el ceño y luego bajo de la moto para encararme-Hablo enserio, ¿porque te moviste? Casi haces que me de un infarto.

Sonreí irónica-Obvio no iba a quedarme allí esperando a que tu decidieras ir por mi... Espera ¿que dijiste?.

-No me gustaría meterme en problemas con la policía por tu culpa-dijo y subió a su moto de nuevo-sube.

-No-negue.

Caleb cerro los ojos un momento y suspiro-Lo siento mucho Novale, de verdad no quería desaparecer así de la nada pero es que ocurrió un problema y...

-!NO QUIERO TUS DISCULPAS¡ Vete, yo me ire sola.

-!NO PIENSO DEJARTE DE NUEVO SOLA¡

-!QUE TE LARGUES¡-estaba cansada ya de verlo, lo único que quería era que se fuera y me dejará en paz.

Caleb me miro un momento mas y luego arranco, cuando se marcho me arrepentí de haber dicho que no quería su ayuda, porque si la necesitaba, pero alguien interrumpió mis pensamientos.

-Guapa, ¿quieres que te acompañe a algún sitio?-gire la cabeza y a mi lado en un coche se encontraba un hombre de al menos unos 50 años.

-No, gracias-ni de chiste iría con él.

Seguí caminando pero me di cuenta de que el hombre se bajo del coche y me agarro la muñeca bastante fuerte.

-Tu vas a venir conmigo, sube al auto.

-!SUÉLTAME¡-grite agitada.

-Suéltala si no quieres que te mate ahora mismo-gire la cabeza y no me lo podía creer, era él, pensaba que se había marchado pero al parecer solo trataba de engañarme.

Caleb se bajo de su Harley y camino hacia nosotros, estiro su brazo hasta llegar al cuello del hombre y lo apretó.

-Que la sueltes-ordenó y pude sentir su fría voz.

-Lo lamento-dijo el hombre y me safo de su agarre-no sabia que era tu chica...

Caleb giro la cabeza hacia mi y sonrío ligeramente-Si, ella tampoco-dijo y finalmente el hombre se fue hacia su auto donde arranco velozmente.

Mire a Caleb un poco avergonzada pero él no hizo nada mas que volver hacia su moto y hacer crujir el motor.

-Sube-hablo de nuevo.

Mis ojos chocaron con los de él por un nano segundo. Al cabo de un rato suspire y sin decir alguna otra palabra, subí tras él.

-Eh, Novale-hablo para llamar mi atención-llegamos.

Me apresuré para poner mis pies en el asfalto. Luego lo observé.

-Gracias-murmure

Él sonrío de medio lado.