Parallel

Lapislázuli (Capitulo 32)

Miré la cajita de música  y sonreí ampliamente. Nía antes de irme a dormir la abría y daba 7 vueltas a la manija para darme las buenas noches. Tomé la caja que formaba un octágono, en la tapa estaba pintada una bailarina abrochando los listones de sus zapatillas, la misma imagen relucía en cada parte de las caratulas de abajo.

Destapé el viejo baúl azul con dorado donde mi nana me obligaba a guardar todas las noches mis juguetes. Cuando lo abrí sonreí, estaban ahí mis muñecas de trapo y varios juguetes más. Encontré una muñeca en particular, mi favorita. Mary, una muñeca de cabello dorado y ojos azules de botones. La tomé y la guardé junto a la caja de música en la mochila que colgaba de mis hombros. 

Salí de aquella gran habitación y fui a la de enfrente. La antigua habitación de Ed. 

Las paredes azul rey tenían un color opaco, sonreí al encontrar el balón favorito de mi hermano totalmente intacto debajo de su cama. Con ese balón me enseño a jugar futbol y para él, ese balón era el motivo de no aburrirse viendo televisión en casa. Lo tomé, el viejo cuero blanco estaba un poco rasgado por el tiempo y noté que la inactividad que pensé segundos antes fue una mera alucinación. El balón estaba un poco flácido y le faltaba bastante aire, pero no noté ninguna pinchadura. Lo apretuje hasta dejarlo sin un solo rastro de aire por dentro, dejando así la cubierta. La doblé y metí en la mochila. 

Cerré la puerta y me adentré en la habitación de Nía. Su habitación hasta con sabanas seguía siendo hermosa. Parecía suite de princesa. Traté de encontrar algo que le gustara a mi hermana, pero solo encontré su libro preferido. Lo tomé y eché con las demás cosas, tomé valor y fui a la habitación de mi madre. 

Había una amplia cama que robaba la mayor parte del cuarto, también un amplio tocador de madera. Algo raro pasaba con todos los muebles, ninguno estaba tapado. Todo seguía igual, sin embargo había una gruesa capa de polvo. Me senté en el tocador, los espejos haciendo semi círculo revelaban mis ojos medio hinchados. Pronto encontré lo que estaba buscando, un alhajero dorado, lo abrí revelando toda la joyería de mi madre. Perlas, diamantes, anillos pesados, collares y aretes exagerados y aquel collar que tanto me encantaba. Una fina gargantilla con cadena delgada de platino y un triangulo de lapislázuli sencillo colgando de ella. Jennet una vez me contó que esa gargantilla se la regalo mi padre antes de que naciera Ed.

Tome la fina gargantilla y bajé al piso de abajo. Luke me miró sonriente.

-¿Qué tienes en la mano cariño?-

-Una gargantilla, era de mamá- él levantó una ceja y se acercó a mí.

-¿Te ayudo?- yo asiento, él me rodea y toma la gargantilla, la abrocha y sonríe- Se ve hermosa junto a ese hermoso collar- yo sonrió, tomo entre mis dedos la piedra de lapislázuli y el collar que me había regalado el día del baile.

-Se ven hermosos- él sonrió.

-Pero no tanto como...-

-Déjate de romanticismo Luke, es casa de mis padres- él rió. La puerta se abrió de par en par revelando a Artemisa.

-¡Regrese! ¿Todo bien? ¿Qué ha pasado? ¡Cassie tranquila!-

-¡Estoy bien!- grité exaltada. Ella sonrió.

-¿Lo lograste?-

-Me siento mejor, pero faltan 2 cosas-

-¿Hiciste una lista sin consultar a tu novio?- preguntó Luke haciéndose el enojado, yo asentí.

-Me falta ir al psiquiátrico e ir y visitar a...-

-Ágata- respondió Artemisa tristemente. Luke me observó confuso. 

-Era mi mejor amiga- Artemisa se giró para encontrarse con un Luke confundido. 

-Eran como los tres mosqueteros a excepción de que eran 2 y mujeres- yo sonreí.

-Ahora, quiero irme al hotel, cenar y dormir mucho-

-Que pena, yo que quería presentarte a mi esposo y mis adorables hijos que tanto me suplicabas conocer- yo abrí los ojos como platos y ella sonrió. Me tendió una tarjeta con una dirección apuntada.

-Los espero a las siete y media, ahora vámonos para que se arreglen y lleguen presentables a mi hogar- caminé con ella hasta la camioneta, Luke me seguía sin comprender aún algunos detalles aunque por mucho que doliera seguiría sin dar información. 

Cuando estuvimos a unos pasos de la camioneta, Artemisa de detuvo y hurgó en su bolso hasta encontrar un manojo de llaves, las cuales me tendió.

-¿Y esto?-

-Es tu casa- yo negué.

-Esta no es mi casa-

-Claro que lo es Cass, eres la única que puede tomar posesión de ella-

-¿De qué me hablas?-

-Tus padres hicieron esta casa para ustedes, Nía y Edward no se atreven a poner un solo pie aquí, así que tú te la quedas- Yo la miro atónita y tomo las llaves.

-Gracias- ella asiente y subimos a la camioneta, cuando llegamos al hotel lo primero que hice fue dar una larga siesta.

-Cass, amor, despierta- escuché la voz de Luke, pero me arremoline en la cama y solté un gruñido- Venga, despierta, Sugar- no hice caso a pesar de reír en el interior por el apodo que me había asignado Luke y permanecí con los ojos cerrados -Cass- susurró mi nombre de una manera tan ¿Sensual? Que una serie de descargas pasaron por mi espalda. Pronto sentí como Luke metía su nariz entre mi cuello y mi nuca. Comenzó a hacerme tantas cosquillas que estallé de la risa.

-N-no ¡ Luke Andrew Carter!- entre risas y jaloneos, de alguna manera quede arriba de él. Moví en forma desaprobatoria y divertida la cabeza.

-Tu cabello  se ve tan hermoso desordenado- Luke estalló entre carcajadas. Miré en el espejo mi cabello, estaba totalmente desordenado que parecía un nido de pájaros. Yo hice una mueca.

-¡Muy gracioso Carter! ¡Largate!- él rió más.

-Pero que gruñona has despertado- yo reí, él se levantó y antes de salir del cuarto me miro y sonrió- Aun con ese cabello, no sabes que hermosa te ves- ese comentario me hizo sonrojar, como aquel día en el partido. Me levanté a darme una ducha. 

Bajé a recepción donde estaban Luke y Adam. Adam fue el primero en saludarme mientras que Luke me miraba.

-¿Dónde te habías metido Adam?-

-Me quede dormido, aparte creo que ir a tu casa era un asunto extremadamente personal- sonreí y tome el lapislázuli entre mis manos. Luke se acercó y pasó su brazo por mi cintura.

-Tu cabello se veía bien antes- dijo susurrando en mi oído.

-Venga, cállate- dije dándole un pequeño codazo- ¿Y Tonia?-

-¡Por aquí!- dijo bajando las escaleras en tiempo record.

Hola Gente Sexy de Wattpad:

Como había mencionado en un capitulo anterior por cierto motivo me veo obligada a tener que decirles que lamentablemente saldré de viaje y no podré subir capitulo ni viernes ni sábado (Guarden los gritos) 

Les juro que el lunes vuelvo y les regalo un capitulo de infarto (Porque acabo de editar los capítulos que se vienen para la próxima semana y hasta yo que los escribí me quede muy satisfecha con los resultados) 

Por mi parte creo es todo, les deseo lo mejor esta semana y seguiré pensando las posibilidades de dejar los horarios de: Lunes, miércoles, viernes (Eso si, el sábado lo tendré que eliminar porque tengo algunas actividades los sábados que me impiden subir capitulo esos días) 

Gracias por todo ¡Los amo mis bebes, porque acabamos ESCÚCHENME BIEN, ACABAMOS DE LLEGAR A LAS 1,5K DE LECTURAS! Gracias por todo su apoyo LOS AMO infinitamente. 

Siempre suya

-Reny