Zapatillas (Capitulo 49)

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Camine hasta la salida del cementerio, donde Artemisa me esperaba. Subí al coche sin decir ninguna palabra al respecto.

-¿Cómo te fue?-

-He recordado tantas cosas de ella. ¿Cómo sabias que...?-

-¿Las margaritas? Yo era una de sus enfermeras, cada mañana me pedía que le llevara una margarita, una sola del jardín. Cuando llegaba a la docena de margaritas se las regalaba a algunos internos con fases terminales. Ese era como su ritual- solté algunas lágrimas.

-¿Esos ramos son tuyos?-

-Algunos. Solo los que son de...-

-Margaritas- dije sonriendo con lágrimas.

-Sí, los demás supongo son de su familia o amigos- yo trate de disimular la mueca que había aparecido en mi cara.

-No había visto este coche- dije tratando de cambiar el tema de conversación.

-Sí, bueno a Mike le gusta llevarse MI camioneta- dijo recalcando la palabra MI- Este coche era de él, pero dice que se maneja mejor mi "Súper camioneta", siento que con este coche soy agente del FBI-

-¿Mike sigue trabajando en el hospital general?-

-Sí, ama su trabajo, aparte tiene un horario de maravilla. Pasa mucho tiempo con nosotros-

-Tienes un excelente esposo- ella sonrió sin apartar la mirada de la carretera.

-Lo se ¿Cass?-

-¿Si?-

-¿Vas a regresar? Que te voy a extrañar muchísimo- yo sonreí.

-De eso no te preocupes, regresare siempre que pueda- ella sonrió.

-Hallie y Dominic quedaron encantados con ustedes-

-Tus hijos son un amor, los adoro. Eres muy afortunada- Artemisa comenzó a reír.

-Lo sé, son polos opuestos esos dos. Hallie es muy dulce e introvertida y Dominic..es extrovertido y muy carismático. Son mi angelita y mi diablillo- yo reí. Llegamos al estacionamiento del hotel donde ya estaban abajo Adam, Tonia y Luke. Estacionamos el coche y bajamos.

-¡Cass!- chillo Tonia con una mueca en la cara.

-¿Qué pasa Tonia?-

-¡Tu hermano me ha llamado y me ha dicho que mañana se va a España y no vuelve hasta en dentro de 2 meses y medio!-

-¿Qué?- grite.

-¡Eso!- Tonia tenia la cara roja de enojo y juntaba las cejas con desaprobación.

Un coche con el logo del aeropuerto llego. Artemisa me miro con los ojos empañados.

-Vuelve pronto Cass, te extrañare bastante- yo le abrazo mientras los chicos suben las maletas al coche.

-Te llamare siempre que pueda ¿Vale?- Artemisa asintió llorando.

-¡No se vayan!- escuche una fuerte vocecilla. Me gire para encontrar a Hallie sentada en los hombros de Michael mientras este corría. Dominic brincaba y corría mientras trataba de evitar que sus lentes cayeran.

Michael llego al lado de su esposa y le tendió una bolsa color caramelo.

-Espero te sirvan. Las tuve por tanto tiempo guardadas que sinceramente pienso que esa suela debe estar hecha roca- yo la miro con ojos brillosos. Sabia de que se trataba... unas zapatillas.

-No puedo aceptarlas, eran tuyas-


-¿Entonces tu hermana pasara por ti mañana?- yo asiento mientras sigo guardando todo en la maleta que me había prestado Nía.

-Mañana por fin me voy- digo con una sonrisa falsa- Daría todo para que te fueras conmigo, me harás falta-

-No lo creo princesa- dice Artemisa mientras dobla mi ropa sentada en "Mi" cama- ¿Qué será de Michael, Dominic y Hallie? Son mi vida entera- yo sonrió.

-Espero algún día verme así, aunque créeme eso jamás pasara- Artemisa niega.

-Eso no lo decides tu señorita, solo el destino y dios lo saben. Además, te juro que encontraras a un buen chico, te enamoraras, te casaras, tendrás hijos y tus hijos me llamaran abuela-

-Me niego- digo sonriendo.

-Cass, eres casi mi reflejo. Te ira bien en el instituto y más en la universidad. ¡Que hubiese dado yo por estrenar esas viejas zapatillas que seguramente siguen en mi armario, hasta el fondo!-

-¿Por qué las conservas?-

-Porque sé que esas zapatillas le serán útil a alguien, algún día una chica las usara y las conservara porque esas zapatillas le abrirán puertas- yo sonrió.

-¿Hallie?- Artemisa negó dulcemente.

-Alguien que es como mi tercera hija-


-¿Siempre fui yo?- pregunte con los ojos estallándome de lágrimas. Ella sonrió y me abrazo.

-Siempre fuiste como mi tercera hija Cass- susurro. Yo estalle en llanto.

-No te defraudare, te lo juro- ella se separó y me miro dulcemente, paso un mechón de mi cabello atrás de mi oreja.

-Y lo se pequeña, sé que las sabrás utilizar- yo sonreí y le di un último abrazo. Después a Michael y a los niños.

-Cuídate Cass- dijo sonriendo Michael. Yo asentí y subí al coche, me despedí con la mano de ellos mientras nos alejábamos.

-¿Todo bien?- pregunto Luke yo sonreí con algunas lágrimas todavía y me recosté en su costado mientras abrazaba la bolsa caramelo. 


 *Renata, no subiste capitulo ayer*

Tengo una explicación, aun no me tiren rocas -.-

Como su querida Reny tiene que mantener una buena calificación para poder seguir aquí con ustedes cada semana ¡Reny tiene que cumplir con tareas y trabajos muy MUY largos! Por eso no pude subir capitulo ayer (Échenle la culpa a Física)

Lo siento mucho mis amores, pero aquí les dejo el capitulo. Ya vamos a la mitad de la novela ;) 

Siempre Suya

-Reny 


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