No sabía. Segunda parte.

Segundo día de clase.

No puedo dejar de pensar en esa profesora del mal.
Es una idiota, irritante y muy arrogante mujer.
Me cae en la punta de los pies. ¡Ahhhhhhhh!
Pero que no dejo de pensar en ella.
Odio mi vida.
¿Será que yo... Será que soy lesbiana?

Joder, nunca me había hecho esa pregunta. Mis madres lo son y mi hermano mayor es gay. Eso no me predestina a serlo, pero yo nunca me había interesado por nadie que no fuera yo.
Nunca me había cuestionado sobre eso y hasta ahora lo pienso.
¿Soy lesbiana?
-¡Daniela!

¡Oh mierda! ¿Y ahora que hice?
-dime.
Le pregunto a mi madre Caliope.
-¿cómo te ha ido hoy en la escuela?

Me pregunta alegremente.
-eh... Bien mamá, bien.
-es bien suena un poco indeciso...
Dice mi madre Vica.
-es sólo que ya saben que no me quería mudar. Si era necesario para ustedes, no para mi. Yo me podría haber quedado con George.

Digo reprochando sobre ese cambio tan drástico.
Pero, ¿de verdad voy a seguir enfadada por eso?
-No, no vamos a hablar de eso Dan. Te miro muy sonriente ¿conociste a alguien?

Me pregunta otra vez mi mamá Vica.
-si, ¿conociste a alguien?

Pregunta mi mamá Cal más sería.

-eh... No. Sólo una profesora me trajo hoy a casa. Y eso es todo.

Mi mamá Cal casi se ahoga con el vino y me mira de una manera extraña.
Aunque parezca tonto o desinteresado no se cómo se conocieron mis madres. Y no es que me desinterese, es que nunca ha habido la oportunidad de preguntarles.
Sigo pensando en eso una y otra vez, pero cada vez que intentó cambiar de pensamiento viene a mi mente esa rubia déspota e incompetente.

-¡salte ya de mi cabeza!

Mis madres levantan la vista interrogativa hacia mi y ya se que valí mierda.
¿Por qué pensé en voz alta?
¡MIERDA!
-¿quién quieres que se salga de tu cabeza?

Carajo, maldita sea.
-eh... Eh... La migraña mamá...s mamás.

Me río de manera distraída y ellas aún con más sospechas se miran entre ellas.
Término de comer y me dirijo hacia la piscina de la calle. Ahí donde hago un poco de ejercicio y despejo mi mente.
Ahora más que nunca necesito mi cabeza en blanco.
No se por que me siento tan ansiosa, detesto sentir eso.
Genial, ahora estoy preocupada...
Camino hacia la piscina y tengo los auriculares puestos, se que estoy escuchando una canción pero aún así no la escucho. ¿Se entiende?
¡Claro que no! Ni yo me entiendo y me hago preguntas sobre sí me entendí a mi misma.
Daniela, tu grado de locura o estupidez aumentó como nunca.
¿Qué pensaría de ti la rubia incompetente si te...?
¡¿Otra vez?!
No, no, no, no, no, no

No me voy a permitir nada de eso. No, yo no, yo nunca me he enamorado. Y ahora no será la primera vez.
¡Coño!
Me meto a la regadera de la piscina y ya con mi traje de baño escucho a alguien entrar.
Siempre he sido muy pudorosa, así que corro hacia afuera de los vestidores y me topo con una mujer, alta y rubia...
Un momento...
-Hola señorita Ciges Boné.

Mierda, es ella, la profesora rubia.
-hola.
Digo lo más tajante posible.
-¿me esta siguiendo?

¿Qué, qué, qué?
Me río de una manera arrogante en su cara y le digo.
-¿no será al revés? Digo, yo vivo cerca de aquí.
-igual yo.

Dice con la mandíbula apretada.
-Bueno, da igual. Tengo que ir a nadar. A menos que quiera asesinarme aquí.

Me voy casi corriendo y veo como ella se queda viendo hacia la puerta...
¿Qué carajo esta pasando?

Catherine POV
Desde esa maldita clase no dejo de pensar en esos ojos avellana.
¿De dónde salió esa chica insoportable?
Soy la profesora más severa de este maldito colegio de pacotilla y esa estúpida adolescente perturbada me falto al respeto y yo se lo permití. No la puse en su lugar.
¿Por qué sigo pensando en esa chiquilla impertinente y altanera?
Ya, ya Catherine. Es sólo una alumna inoportuna e imprudente, no es nada más que eso.
Y por sí fuera poco la miro en la parada de autobuses, se miraba linda con el sol en...
¡¿QUÉ CARAJO ESTAS DICIENDO CATHERINE?!
Es una maldita mocosa imprudente.