Capítulo 22: Fin de Campamento

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Narra Ignasi

---Chicos... tienen 15 minutos para estar cambiados con su ropa de baño. Si no están listos... se quedarán sin entrar al lago. --–dijo el Scouter Tito.

Nos cambiamos lo más rápido posible en especial yo... nunca eh estado tanto tiempo sin bañarme, creo que mi cabello aún tiene lodo con pasto, pero ni al caso, han sido los mejores días de mi vida. Y espero que haya mas como esos.

Me puse una pantaloneta y unas gafas... porque hacía mucho sol, saldría quemado de esta, pero es bueno coger un poco de color.

Las chicas también se fueron a cambiar, eran las 11:00 am. Ya todos estábamos listos para entrar pero no veía por ningún lugar a Ely...

---Joanne, ¿Dónde se perdió la malvada guía?

---Te pasas, Ignasi. Creo que está ayudando a Akela con la manada. ¿Y para qué preguntas?

---Se me hacía raro no verla

---Ja ja ja... conmigo no ocultes tus sentimientos... eh visto como la miras. Aquí entre nos... hacen una bonita pareja--- me guiñó el ojo 

---¿Quién hace bonita pareja? ---Preguntó Miguel, el novio de Joanne.

---Ustedes. --–interrumpí antes de que ella hablara, pues los dejé solos y me fui más allá con los demás chicos.

Después de 30 minutos... vi por fin a Ely... tenía un cuerpo impresionante... tenía un traje de baño turquesa y un shorth ... el color le resaltaba con su color de piel... está mujer es impresionante;  bella y blanca, llevaba el cabello rubio suelto. Entró en el lago y empezó a nadar hacia donde estábamos nosotros. Creo que mi mundo se paralizó.

Yo nadé hacia otro lugar porque... si me quedaba allí seguramente le robaría un beso. Al cabo de otro rato me salí del agua y me senté en un tronco y solo miraba a todos divertirse, todos sonreían y me preguntaba si... todos ellos no tendrían problemas y no creí eso. Yo creo que todos tienen problemas pero ellos cantan y ríen pese a eso. Son valientes

---Rusher ¿alejándote de mí? –--me sobresaltó Ely, no la vi llegar, pensé en mi respuesta y finalmente le dije

---tal vez

---¿por qué?

---porque no creo poder resistir estar cerca de ti, sin abrazarte o... robarte un beso.

Se quedó callada y se sentó al lado mío. –--Tal vez yo también deba alejarme, pero no puedo.

Yo miraba hacia otro lugar que no fuera ella. Se me erizó la piel y finalmente terminé  mirando hacia la pierna que tenía más cerca de mí.

---¿Qué te sucedió allí? –--joder tenía una gran cicatriz en su pierna, que me asusté.

---Un recuerdo--- dijo con total naturalidad.

---¿Pero qué te sucedió? ¿Cómo pasó?

---Pues pasó que cometí un error, un grave error. Peor que novata en el asunto --- la miré con los ojos entrecerrados, porque yo era un novato --- ¡Oh no! No lo decía por ti Rusher . Bueno el caso es que... sucedió en el grupo. En el gran árbol donde activamos, un día estábamos haciendo descenso y pues yo no aseguré el mosquetón y me caí y me rompí el hueso de aquí---señaló donde estaba la cicatriz.--- Gracias a eso... estuve inactiva durante un año en el grupo. Cuando tú entraste recién me había incorporado de nuevo.

---¿Y te duele?--- Pregunté con preocupación

---Pues más me duele haberme perdido tanto tiempo en el grupo. Pero la cicatriz es un gran recuerdo. No me importa tenerla. Aunque mi mamá me quiera hacer una cirugía para que ya no se vea.

---¿Puedo tocarla?

---Claro---la toqué y se sentía tan raro pero fue bonito tocarle su cicatriz. Y decidí bromear.

---Con razón caminas raro, ya me preguntaba yo por qué

---Tonto--- me dijo riendo.

---Tú tonto. Ely. --–y me miró tiernamente. Y  me sentía en las nubes. Cada día estoy mucho más seguro que...  Elyse es mi chica. Y lucharé por ella.

Narra Elyse

No puedo creerlo, han terminado estos hermosos días en este campamento. Por un lado quiero ir a casa a comer mucho y darme una merecida ducha y dormir unos 50 años pero es que los scouts somos así... ''queremos ir a casa y cuando estamos en casa, queremos ir de campamento'' Hemos recogido todo, dejado limpio el lugar. Como BP dijo ''dejad el lugar en mejores condiciones de como os encontráis'' y así hacemos. Dejamos todas las pertenencias en la parte del bus, donde se guardan las cosas, hacemos fila para subir... creo que esta vez sí me quedaré dormida. Quiero sentarme con mi Martín... aunque no lo crean hemos estado la mayor parte del tiempo juntos en el campamento viendo estrategias para ganar  y ¿saben qué? Lo hemos ganado. Hemos ganado el trofeo, ha sido una gran victoria porque las pruebas que nos pusieron no han sido fáciles como las otras veces. Llevo intercambios de insignias con chicas que conocí del otro grupo y es estupendo. También le dejé claro a Joshua si otra vez se quiere pasar de listo, le irá mal, quiero decir... peor.

Me senté con Martín en la parte de frente porque quiero descansar y atrás siempre vamos los más bullosos, mas fiesteros.

---Martín ¿Qué harás cuando llegues? ¿Lo iras a ver?

---Por supuesto que sí ... estos días lo eh extrañado demasiado. Será lo primero que haga después de bañarme, claro.

---todo te irá bien. Y cierto,  ¿cuál es su nombre? no me lo has dicho

---Mateo, pero todos le decimos Teo. --–me quedé pensando en ''TEO'' creo que ya lo eh escuchado antes. Antes que yo pudiera decir algo más. Martín le dijo a Rusher que se sentara conmigo y se fue... así nada más. No sé si agradecerle o matarle.

---¿Cómo estás? ¿Cansada? --–me preguntó

---¿Y tú?

---Yo pregunté primero, señorita

---Sí, Rusher sí. Me muero de sueño. ---me miró, me agarró la mano y me dió un sutil beso en ella. Eso era tan romántico. Y se arrecostó en mi hombro en silencio y así nos quedamos hasta que empezó andar el bus. A muchos kilómetros de donde estábamos ya no podía estar consciente y pues puse mi cabeza sobre su regazo mientras el me sujetaba con sus brazos. Hasta que poco a poco me quedé dormida sobre sus piernas.

Pero antes de cerrar mis ojos... Le miré el rostro y estaba con los ojos cerrados pero con una enorme sonrisa. La más bella que conozco, y si no es más bello todavía, le había crecido la barba y si él realmente supiera cuánto me gusta, cuánto lo estoy llegando a querer. Estuviera más perdida de lo que estoy ahora. 

Él ha venido a cambiar mis días. Estoy segura.


Bitácora de un ScoutDonde viven las historias. Descúbrelo ahora