Bitácora de un Scout

Capítulo 21: Vergüenza

Narra Ignasi

Vi una estrella fugaz, cuando estaba en el sleeping, y pedí un deseo. Deseaba que lo que viví no fuese un sueño. Que sean realidad los besos, los abrazos, nuestra promesa.

Nunca me imaginé que le gustara a Ely, pero es el tonto miedo que nunca te lleva a ningún lugar, te estanca, te llena de contradicciones, inseguridad, y toda esa mierda. Y estoy contento por este toque de valentía, adrenalina, es que ¡Joder! Jamás pensé que esto llegara a suceder. Para mí ya era un caso perdido, un simple sueño que estaba a tetra millones de kilómetros de el. Que era un sueño imposible. Pero ahora sé que no hay imposibles, que es uno que debe coger una muda de ropa, una taza de café y mucha valentía para salir de allí, de lo imposible; en busca de las metas para cumplirlas, para vivirlas.

Ahora que Ely, me ha dado la esperanza, haré lo necesario para ganarme su total cariño, porque yo no quiero que me dé su corazón, yo no quiero arrebatarle nada que fuese suyo, yo solo quiero ser su compañía, compartir si es posible toda su vida junto a mí. Yo no quiero cambiarle las metas, yo quiero ser su apoyo incondicional para que las cumpla; yo simplemente no quiero hacerle daño, pero también sé que enamorarse implica salir herido. Y yo estaría dispuesto a tener cicatrices en su nombre.

Estos han sido los días más felices en toda mi vida. Y no me importa ni una milésima la novatada que me han hecho los chicos, porque si solo les contara las cosas que me han hecho.... Tengo mi trasero adormecido, adolorido de todos los golpes que me dieron esta noche, y lo único que me importa es mi corazón, las reacciones que causa en mi. Elyse Rinlelly.

Aquí entre nos, este día me eh encargado de preguntarle a Martí, el mejor amigo de Ely, sus gustos, sus preferencias. Porque tengo pensado hacer una cena, una cita. Quiero serle sincero, no eh tenido la oportunidad de demostrarle todo lo que siento. Porque de cobarde, aquel día que le mostré lo tallado en el árbol, salí corriendo. Es que el amor es tan jodido, pero tan bello a la vez.

Recibí un mensaje. Eran las 2:00 am de la mañana. Era de mamá.

---Mi Nachito ¿Cómo estás pasando en tu primer campamento?

---¡Hola mamá! Te extraño muchísimo

---Y yo a ti hijo, me haces tanta falta igual que a tu papá. ¿Cómo te va con tu chica? Con la linda Elyse.

---Y yo a ustedes... De maravilla mamá. Creo que también le gusto. Estoy tan feliz.

---Me alegra tanto hijo mío. ¿Ya almorzaste?

---Mamá acá está de madrugada. Son las 2:00 am, me imagino que allá, serán las 3:00 pm máximo 

---Sí, me olvidaba. Entonces te dejo, descansa Nachito. Te Amo.

---Y yo a ustedes.

Cuando me vine para acá, les explique el por qué a mis padres, al principio no estuvieron de acuerdo, pero con el tiempo se dieron cuenta de que allí no estaba mi felicidad. Mi felicidad la encontraría en Elyse Rinlelly. Mi mamá la conoce por fotos. Y desde que se enteró lo que sentía por ella, me ha venido apoyando. Tengo la mejor mamá del mundo. Y mi padre también. Aunque sea un poco estricto.

Narra Elyse.

Son las 4:00 am, y necesito ir al baño. Pero como ustedes sabrán el baño queda a millones de distancia, bueno solo exagero. Aunque también tienes la opción de buscar el primer lugar que encuentres. Pero decido ir al baño. Llamo a Julieth, que está al lado mío. Y está tan profundamente dormida que ni al caso. Así que como no aguanto más me voy sola. Cojo mi linterna, pero no la enciendo, después despierto a los demás. Le digo a los que están a cargo de la guardia, que me dirijo al baño. Para no tener ningún problema. Vale recalcar que está algo oscuro, por no decir mucho. Enciendo la linterna. ¡Y por las barbas de papa Noel!

---¡haaaaaaaaaaaa! ¡Serpienteeeeeeeee! ¡Serpienteeeeeeeee!

Grité demasiado fuerte, pero esa es una de mis mayores fobias. Y ya saben que cuando uno le teme a algo, ese algo siempre estará presente. No quería levantar absolutamente a nadie. Y terminé levantado a todo el campamento, tal vez hasta los que estaban en el séptimo sueño. Y todos corrieron hacia mí, y para lo más trágico, no aguanté hasta llegar al baño y me hice pis encima. Vinieron los Scouters con sus hachas. Los caminantes y Rovers y no tan solo de mi grupo, si no del otro también. Rusher también vino y me preguntó si todo bien... pero solo salí corriendo, por la fobia y por la vergüenza. Jalé a Julieth y a Joanne que también se levantaron. Y aproveché que todos tenían atención con la maldita serpiente, para cambiarme.

Jajajaja esto solo te puede pasar a ti. Que estúpida --- dijo mi conciencia

---¿Que te sucedió, estas bien? --– preguntó Julieth

---Lo que pasa es que..es que.... Yo iba.... Al baño hacer pis y al ver a esa cosa, no aguanté.---tartamudee al contestar

---jajajajajaja--- comenzó a reírse fuertemente Joanne.

---Me cambiaré y ustedes verán que nadie se acerqué y si alguien se entera. Serán mujeres muertas. Lo aseguro--- las miré lo más intensa y malvadamente que pude.

Afirmaron y entré a la carpa y me cambié. Cuando salí ya habían cogido a esa serpiente, la mataron y aprovecharon para tirarla al fogón y seria el desayuno. Corrección el desayuno de ellos, yo no me iba a comer esa cosa gigante.

---¿Ely estás bien? ¿Te mordió? --–está preocupado mi hermoso Rusher, que bueno que me puse muchísimo perfume.

---Ya estoy bien. No me hizo nada por suerte.

---¿Les tienes miedo cierto?

---No sabes cuánto. Ve a dormir. --– y me miró. Y Martín nos alumbró con la linterna y nos susurró.

---Lo veo y no lo creo. –-- yo sé que este tonto si se imagina lo que siento por Rusher, es mi mejor amigo. Y casi nos conocemos como la palma de la mano.

Hacia muchísimo frío, entonces me fui a calentar en el pequeño fogón que había de la noche anterior. Y después de varios minutos Rusher me siguió. Y me sentía muy avergonzada, nos quedamos allí, en silencio. Entonces él se fue y yo me seguí quedando allí. Mirando el fuego, pensando y escuchando las notas de una guitarra....

Al girarme veo a Rusher con una guitarra, estaba tocando y cantando. Este hombre me va a hacer enamorar. Lo juro. Y me miraba mientras cantaba una canción de Ed Sheeran. Cantaba con tanto sentimiento, con tanta dulzura, no conocía esa parte de él, y me gustaba. Me gusta la canción.... Me gusta finalmente él.

Cuando terminó de cantar. No pude más y lo abracé, nos abrazamos y sentí su cuerpo cálido pero sus manos heladas. Le cogí las manos, lo miré fijamente a los ojos. Y contesté su pregunta que me hacia en la canción.

---Posiblemente me enamoraría de ti, Ignasi Rusher