Capítulo 35: Uff!

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---¿Estás segura que quieres venir conmigo?

---Ya discutimos eso Camill, iré contigo, no se diga más.

La hora de entrega del dinero era a las 8pm en una fábrica que se encontraba un poco retirada de la ciudad, Lina no pudo acompañarnos porque hoy en clases de educación física, se viró el tobillo, no le dijimos a nadie acerca de este lio, pero le hicimos prometer a Camill que dejara este vicio, por el bien de ella, por el bien de todos. Al decir verdad, tengo miedo... esos chicos andan armados así que traje mi navaja suiza y la guardé en el bolsillo trasero de mis jeans, no es la gran cosa pero servirá de algo, ya nos encontrábamos cerca de la puerta de acceso y di una pequeña oración en silencio pidiendo que todo salga bien.

---¿Lista? --- preguntó Camill

---Los scouts me han enseñado a estar siempre lista ---la tomé de la mano y caminamos, abrimos la puerta que hizo gran ruido porque estaba oxidada, la habitación estaba oscura, tomé la linterna de mano y la encendí, se encontraba una mesa y unas sillas donde estaba sentado un tipo atractivo mientras le daba caladas a su cigarrillo

---Mi Reina, ¿no te advirtieron mis hombres que vinieras sola? ---dijo aquel tipo

---Yo le exigí que me trajera--- traté de sonar convincente

---Tienes agallas, niña

---Eso dicen, allí está tu dinero--- me propuse a caminar hacia él pero me detuvo un tipo que estaba atrás de mí y me sobresalté porque no había notado su presencia

---Hice el negocio con mi Reina, que lo traiga ella --- Camill me miró, tomó el bolso y se lo entregó, el tipo le tomó de la mano y le dio un beso en ella, mientras Camill puso cara de asco

---Ahora ya podemos irnos ---exigí

---No tan rápido mis bellezas, la fiesta recién empieza --- mi corazón dejó de latir ¡Por favor! que nos dejen ir sanas y salvas

---Ya cumplí con el trato ---Dijo Camill llorando, el tipo se levantó de su asiento, le dio una calada al cigarro y cuando estaba frente a frente de Camill, dejó salir el humo haciéndola toser.

---Las dejaré ir, si me presentas a tu amiga---se refería a mí y yo rogaba que Camill no dijera mi nombre verdadero

---Ella es Elyse --- gracias Camill, la jodistes

---Bonito nombre, para una bonita chica, me gusta --- se acercó a mi, dio una vuelta alrededor mio, mientras mi manos me sudaban, nunca había estado tan nerviosa en mi vida

---¿Ya podemos irnos? ---le hablé fuerte en la cara pero él me agarro fuerte de los brazos, yo traté de zafarme pero me agarró más fuerte aún --- Déjanos ir, allí tienes tu dinero. Si quieres cuéntalo, están los 4.000$ completos

---4.000$?-- -miró sorprendido a Camill--- y ¿los intereses? Mi Reina ---no me jodas, Camill 

--- Bueno, si tu amiguita acepta unas copas, es deuda pagada ---dijo con un tono seductor. Si el tipo no fuera malo, de seguro fuera un buen partido, porque es realmente atractivo.

---No bebo---tocó mis labios con su asqueroso dedo con olor a cigarro

---A mí nadie me dice que no. Tráiganlas ---le ordenó a los hombres que estaban armados, nos llevaron por una puerta que llegó a un casino, seguimos avanzando a través de este, entramos por otra puerta que llevó a un bar vip, habían muchas mujeres con poca ropa, y una enorme cantidad de hombres que daban miedo, yo rogaba que no nos hicieran nada.

Nos hicieron sentar en una gran mesa de adornos rojos.

---Eh sido un mal educado, mi nombre es Thomas, puedes decirme Thom, sonaría perfecto---se dirigió a mi

Bitácora de un ScoutDonde viven las historias. Descúbrelo ahora