Viviendo con 5 Idiotas » 1D. [Cancelada]

1. "Cosas desaparecidas''

Día lunes, comienzo de mi tortura. Mis padres me han dejado completamente sola en este mundo cruel, se han ido y ahora debo aprender a cuidarme sola. Okay, Chloe, tú puedes... Alto, siempre despierto con este tipo de conversación conmigo misma. Mierda, necesito un psicólogo de inmediato.

Luego de leer aquella fea nota, la aviento a algún lado de la habitación y me dirijo a la cocina. Al entrar, veo una gran hamburguesa de doble queso sobre la mesa del lugar, debe de ser mía.

Tomo la hamburguesa relamiendo mis labios antes de salir corriendo a mi habitación esperando que ninguna cámara de seguridad que se encontraban en la casa, me captara. Una vez en el dormitorio, le doy un mordisco a esta y sonrío ampliamente. ¡La mejor que he probado! Completamente deliciosa.

—Esta es una hamburguesa de verdad —asiento mirando a la octava maravilla del mundo. Dejo está con cuidado sobre mi mesita de noche y entro al baño para darme una ducha súper rápida. Me dicen Flash, señores.

Luego de una hora, salgo de la ducha con una toalla enrollada a mi cuerpo. La ducha más rápida que he tenido.

Hora de elegir la ropa. Tomo una blusa de flores, unos shorts y unos zapatitos que Ty me regaló mi cumpleaños pasado. Me visto rápidamente y dejo mi cabello suelto. Ahora a por la hambur... No está, desapareció.

—Ush —resoplo haciendo una mueca con los labios.— hamburguesitaaaa, ¿Dónde estaaaás? —me arrodillo en el suelo para continuar buscando pero nada, no hay nada— no te haré nada, pequeña, sólo te... Comeré.

Y así por un largo rato. Buscando la hamburguesa que nunca apareció. Estoy comenzando a pensar que... Ya me la comí y nunca me di cuenta...

Bajo las escaleras rendida y veo mi móvil saltando en el sofá; una llamada. Mamá.

—Hola, mamá. —saludo sonriente.

—Hey, Chloe ¿cómo estás? Tu padre y yo lo sentimos mucho, fue...

—Ñe, no se preocupen —mentira— uhm... ¿Saben donde están mis hermanos?

—Pensé que estaban contigo —hubo un silencio muy largo— okay, luego los llamo. No te preocupes, Chloe.

—Vale, adiós.

—Adiós, hija. Recuerda que el tío Simon pasará a recogerte al mediodía —giro un poco y veo el reloj pegado a la pared. Son las once, tengo tiempo aún— te quiero, llámame —si, si, claro.

Cuelgo la llamada para luego sacar mi espejo de mi bolso que estaba al lado y verme. wOW, hay un gran amigo en mi frente y con 'amigo' me refiero a un grano enorme. Debo taparlo.

Dejo las cosas a un lado, me pongo de pie y voy al baño. Saco mis maquillajes y echo un poco de polvos justo en el lugar donde Justin apareció. Así es, ya le puse nombre al grano.

Bajo otra vez hacia la sala y me tiro en el sofá. Tanteo en este buscando el espejo mientras sigo mirando las noticias pero no logro a tocar nada. ¡Desapareció! Diablos, ¿que le sucede a esta casa? Ya me dio miedo, quiero a mi mami. Ya van dos veces, dos.

Cierro los ojos por un momento y luego llamo a Cupcake, mi gatita, para jugar con ella un poco y relajarme.

—¡CUPCAKEEEEEEE! —grito fuertemente por toda la casa esperando a que responda, je— gata gorda, donde te has metido.

Pasan varios minutos y nada, no aparece. Uhm.. ¿Y si se la robaron? Mantén la calma, Chloe, mente positiva.

—Necesito un jugo, me estoy volviendo loca —me hablo a mi misma caminando hacia la cocina. Ayer Zack preparó un jugo muy delicioso de zanahorias. No soy gran fan de estas pero le salió súper rico. Quiero más, supongo que debe de haber más zanahorias por algún lado.

Busco en las repisas y en el refrigerador hasta encontrar muchas allí. Las dejo sobre la mesada pero suena mi móvil nuevamente en la sala. Corro hacia allá y contesto inmediatamente. Es Tyler, al fin.

—Hola, ¿Dónde se han metido?

—Hola, tonta. Estoy en el supermercado comprando algunas cosas para sobrevivir.

—¿Estás con Zack?

—Sí... —de repente hubo un silencio muy muy largo, creo que ha cortado la llamada.

—¿Hola? ¿Tyler, estás ahí? —se oye una risa.

—Sí, aquí estoy, ya lo encontré. Zack estaba en el baño.

—¿Que están comprando? —pregunto curiosa.

—Adivina... ¡Zanahorias! El jugo de ayer estuvo genial.

—Lo sé pero aquí hay zanahorias aún —voltel hacia la cocina y casi me caigo hacia atrás. Corro hacia allá y no hay nada, las zanahorias han desaparecido. Esto no puede estar pasando— trae las zanahorias, sí, muchas.

—Okay, enana, te veo luego.

Corto la llamada y salgo corriendo hacia la sala nuevamente. ¿Porque me pasa esto a mí?

Tomo asiento en el sofá y comienzo a pensar, algo no muy común en mi. Si hubiera alguien aquí... Ya me habría dado cuenta, soy muy inteligente.

Observo mi móvil por unos minutos pensando en llamar a la policía o no. De pronto, escucho unos ruidos provenientes de la habitación de invitados, pero ahí no hay nada, ni ventanas. Bueno, una muy pequeña, nadie podría entrar por allí.

Cojo el bate de béisbol de Zack rápido y me acerco con cuidado a la habitación de los ruidos raros. Ayuda.

***********************************
Hey! Bienvenidos a Viviendo con 5 Idiotas. Espero que les guste, haganmelo saber. Dejen sus comentarios y voten!¡ Se los agradecería muchísimo.

Gracias por leer 💞

All the love,
Me ∞