POV.Anastasia:
Estuve dando vueltas por la ciudad sin rumbo fijo pensando en que iba a hacer con la pequeña criatura que crecía en mi interior. El aborto no era una opción ya que yo ya amaba a esta pequeña criatura sin siquiera haberla visto alguna vez y aunque Christian no me ame y lo nuestro solo sea un contrato no pienso matar al pobre bebe ya que él es inocente y no tiene nada que ver con todo esto.
Me dirigí inconscientemente a un parque donde habia un montón de niños jugando sonrientes que me hicieron sonreír al instante. Pensé mas de una vez en si iba a decírselo a Christian o no y al final decidí que se lo tenia que decir ya que él era el padre y tenia todo el derecho a saber.
Saque mi móvil y me dispuse a llamarle para quedar con él en algún lugar y hablar sobre el tema. Llame mas de una vez pero como no contestaba decidí ir a la empresa a buscarlo y salir juntos a comer a algún restaurante mientras le contaba sobre el bebe.
Iba con una sonrisa en el rostro a diferencia de como me habia sentido a la mañana ahora estaba feliz de tener a un mini Christian o una mini Ana dentro de mi creciendo y estaba dispuesta a hacer lo imposible para que mi matrimonio con Christian dejara de ser una farsa y se convirtiera en un matrimonio real. Podría hacer que Christian me ame con el tiempo y así vivir feliz con mi bebe y marido.
Al llegar a la empresa entre con una sonrisa y salude a la chica de recepción que me devolvió el saludo amablemente. Entre rápidamente en el elevador y pulse la plante numero 27 que era la planta donde se encontraba el despacho de Chris. Al llegar a la planta me encontré con el lugar de la secretaria vació por lo que supuse que habia ido a sacar alguna fotocopia o algo asi que me dirigí directamente hacia la puerta del despacho de Chris.
Abrí la puerta sin tocar y me arrepentí al instante después de ver la imagen que tenia enfrente a mi. Mi cabeza me decía que debía salir de ahí inmediatamente, mi corazón estaba se rompió en dos pedazos y mi cuerpo estaba paralizado. Toda la ilusión y alegría con la que habia llegado habia sido transformada por una tristeza inmensa y un dolor desgarrador.
Christian estaba besándose con Elena la que estaba sentada en su regazo abrazándole por el cuello y él a ella por la cintura. Era muy doloroso presenciar esa escena pero no podía moverme ni apartar mis ojos de ellos.
Elena era la ex de Christian con la que mas habia durado y hasta se estaba rumoreando que se iban a casar pero entonces lo dejaron sin que nadie supiera el porque y ella desapareció. Hace un par de semanas habia vuelto a Seattle y le habia ofrecido a Christian asociar la empresa de su padre y la nuestra para un proyecto a lo que él acepto al instante y me convenció de dar el si también aunque a mi no me hacia mucha gracia trabajar con su empresa.
Claro ahora todo tiene sentido. La insistencia de Christian por asociar las empresas, las llamadas que colgaba en mi presencia o que se dirigía a otro lugar donde yo no pueda oírle para contestar, el mogollón de reuniones que tiene últimamente....Lo que Christian quería no era el bien de la empresa era el ver mas a Elena y pasar mas tiempo con ella y yo la tonta creyendo poder enamorar a Christian y vivir feliz con el y nuestro hijo¡Que boba llego a ser!
Al notar mi parecencia la alejo de él y ella me miro fijamente inspeccionarme de pies a cabeza con aire de superioridad que me molesto sobremanera.
-Siento haberlos interrumpido yo ya me marcho podéis seguir con lo vuestro-les dije una vez que mi cuerpo reacciono y salí de ahí corriendo lo mas rápido que mis pies me permitieron.
-Ana espera-me llamaba Christian pero yo me metí rápidamente en el elevador ignorándolo.
-Tranquilo cariño mamá no te abandonara pase lo que pase tu y yo viviremos felices lejos de todo esto aunque sea sin tu padre-le susurre a mi bebe acariciando mi aún plana barriga.
Cuando las puertas del elevador se abrieron salí corriendo de nuevo del dichoso edificio y me dirigí a mi coche cuando una conocida y cálida mano me sujeto del brazo dándome la vuelta para encarar al dueño.
-Ana escúchame puedo explicarlo, no es lo que crees-me dijo él mirándome fijamente a los ojos.
-Sabes Christian ya tengo oída esa frase mil veces en todas las películas que he visto y siempre el que la dice es el culpable y nada inocente-le dije mirándolo fijamente y intentando sacar fuerza de donde no tenia para no romperme.
-Ana ella se me lanzo y yo la estaba apartando cuando llegaste te lo juro-me empezó a decir el pero lo interrumpí.
-Mellark no me importa como bien me has dicho tu mas de una vez lo nuestro solo es un contrato por lo que tu puedes hacer lo que quieras y yo puedo hacer lo que quiera solo sed discretos para que nadie os pille y quedemos mal delante de todo el país. Recuerda que sales en todas las revistas-le dije y sin darle oportunidad de hablar me subí a mi coche y arranque alejándome de ahí.
Creo que es hora de dejar Seattle por un tiempo y alejarme con mi hijo a un lugar tranquilo donde no estén ni Christian, ni Elena ni nadie que nos moleste. Solo mi bebe y yo por lo menos un tiempo y luego ya me pensare lo de regresar y recuperar lo que me corresponde en la empresa. Por otro lado lo de decirle a Christian que estoy embarazada queda sin duda cancelado por un buen tiempo.
Me dirigí directamente a la casa de Christian y nada mas entrar me derrumbe en el suelo llorando y soltando todo lo que habia estado contendiendo hasta ahora. Mi móvil empezó a sonar y al ver el numero de Christian decidí ignorarlo y me puse de pies para empezar a preparar mi maleta. Mi móvil estuvo sonando uno diez minutos seguido y una vez que se dio por vencido cogí el móvil y vi que tenia 50 llamadas perdidas de Christian que por supuesto ignore y abrí rápidamente los contactos para buscar el numero de Katniss. Al encontrarlo la llame seguido y después de un par de tonos cogió.
-¿Hola?-saludo y estoy segura de que ni a visto el identificador. Si pretende ignorar a Peeta mal va así.
-Hola Kat soy Ana-la salude con tristeza.
-¿Estas bien?-me pregunto¡Que bien me conoce!
-No estoy fatal-le conteste sin poder contener las lagrimas.
-Voy para ahí-me dijo pero yo la detuve.
-No Kat no vengas-le dije-¿Oye este mes tienes vacaciones no?
-Si hoy a sido mi ultimo día de clase y a partir de ahora tengo un mes de vacaciones-me contesto ella algo desconcertada.
-Kat yo necesito alejarme de Seattle un tiempo y me preguntaba si vendrías conmigo a la cabaña que tienen nuestros padres a las afueras para descansar un poco este mes que tienes libre-le propuse mientras seguía preparando mi maleta.
-Oh claro me encantaría ir contigo pero no te vas a librar de explicarme todo lo que a pasado con detalles-me dijo ella sin dudar-¿Cuando salimos?
-En media hora voy en tu busca-le dije y al parecer la tome por sorpresa.
-¿EN MEDIA HORA?-grito asombrada recordándome a Bella que también me llevaría pero ella no tiene el mes libre además de que no puedo alejarla de Edward por tanto tiempo-¿Pero que a pasado para que quieras irte con tanta urgencia.
-Kat no preguntes solo haz tu maleta para irnos-le dije y colgué sin dejarla replicar para seguir con mi labor.
Hola guapísimas aquí os traigo el nuevo capitulo que es algo largo pero es que no podía parar de escribir. Estoy super contenta de que os guste mi historia y sobre todo vuestros votos y comentarios me ponen feliz.
Ana se va y se lleva a Katniss con ella¿Como actuaran nuestros hermanos Mellark?¿Las dejaran ir?¿Lograran pararlas?
Espero que os guste y me lo hagáis saber. Ya sabéis cualquier duda o algo me comentáis seguido y yo os contestare sin problema alguno.
Besos para todas
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Amor destinado
FanfictionTres hermanos:Christian, Peeta y Edward Mellark y tres hermanas:Anastasia, Katniss y Isabella Swan unidos por diferentes razones. Anastasia y Christian son forzados a casarse y aunque al principio ninguno esta de acuerdo al final encuentran el amor...