Amor destinado

En Busca Del Vestido De Novia

POV.Anastasia:
Ya hemos vuelto de Londres hace dos días y ahora lo que mas preocupa aquí es que nuestra boda sea perfecta.
Kate y Eliot después de la noche en la que salimos de fiesta en Londres han empezado a salir como novios y se les ve muy caramelizados lo que me parece hermoso.
Ahora mismo me encontraba en mi oficina intentando trabajar un poco pero es imposible me están llamando cada dos minutos para preguntar que prefiero el rosa o el blanco para los manteles, las invitaciones de que modelo y bla, bla, bla más. Se supone que esto no debería de parecerme pesado y que debería estar feliz pero yo no quiero casarme y esto no me hace feliz.
Yo soñaba con casarme con el hombre a quien ame y con tener unos hermosos hijos junto a él. Vivir feliz y tener una vida llena de amor pero no mi padre me tenía que obligar a casarme con Christian y a fingir estar feliz.
Lo único bueno de esto es que pasado un año todo terminará.
-Señorita Swan sus hermanas y la señorita Kate quieren verle-me dijo mi secretaria. No otra vez no.
-Vale déjalas pasar-le dije suspirando.
Pronto entraron saltando a mi oficina, bueno eso Bella y Kate solo en cambio Katniss entro normal. Ella no se traga mucho la farsa pero aun así no dice nada.
-Ana tenemos que ir a comprar tu vestido-me dijo Bella que estaba impaciente.
Si hay algo que le guste es ir de compras y si hay algo torturoso es ir de compras con ella. Lo que me espera hoy.
-Chicas estoy muy ocupada lo podemos dejar para otro día por favor-les pedí.
-No Anastasia-me dijo mi amiga. O no a usado mi nombre completo peligro-No tenemos tiempo para demoras.
-Pero si aún quedan dos meses y a este paso me podría casar mañana sin ningún problema-les dije y sin exagerar.
Desde que volvimos de Londres lo único que hacen es preparar mi boda, es más ya tienen todo listo y aún quedan dos meses.
Bueno al final ganaron como siempre y aquí estoy con mis hermanas, Kate, mi madre y mi suegra en una de las tiendas de vestidos para novias. Por cierto ya llevamos cuatro y aún no he encontrado nada que me guste.
-¿Le gusta este señorita?-me dijo la dependienta pero tampoco me gustó el que me enseñó.
-Lo siento pero no-dije suspirando.
-Pues ya le he enseñado todos los modelos que tenemos-me dijo ella-Lo siento pero ya no tengo nada más.
Y así salimos todas rumbo a una tienda mas. Me dolían los pies, estaba de mal humor, llevaba 5 tiendas sin encontrar un puto vestido que me gustará y me muero de hambre definitivamente esto no puede empeorar. Y dicho este un chico se chocó conmigo y me tiro su café encima que por cierto QUEMA.
-QUEMA QUEMA-me puse a gustar al sentir el líquido en mi piel. Adiós a mi camisa blanca que tanto amaba.
-Lo siento mucho no era mi intención tirarle el café fue sin querer-me dijo el chico muy apenado.
-Tranquilo no pasa nada a sido un accidente además yo también tengo la culpa por ir en las nubes-le dije al pobre chico y después Bella me arrastró a una tienda para que compara otra camisa y me cambiará la que esta sucia.
Al fin llegamos a la siguiente tienda. Al entrar nos recibió una mujer un poco mayor.
-Buenos días-nos saludo alegremente-¿En que puedo ayudarles?
-Queremos un vestido de novia por favor-dijo Kate educadamente.
-Vale díganme quien es la afortunada que se casa-nos pidió. Afortunada si ella supiera no diria eso pero como no sabe debo poner mi cara de enamorada y actuar.
-Yo soy la que se casa-le dije levantando mi mano como me acuerdo que hacíamos en el cole.
-¿Y la madre?-pregunto ella y mk madre imitó mi gesto. Eso que tiene que ver la que se casa soy yo no mi madre.
-¿Y la suegra?-preguntó y Esme hizo lo mismo que mi madre y yo.
-Vale y cuéntanos¿señora cómo le gustaría que fuera su hija el día de su boda?-le pregunto. Oye que la que se casa soy yo repito que tiene que ver lo que quiera mi madre.
-Quiero algo elegante-le contestó ella con un brillo maternal.
-¿Y usted como le gustaría ver a su nuera el día de su boda?-le preguntó a Esme.
-Me gustaría algo elegante y gigante-le contestó con una sonrisa.
-¿Y usted como le gustaría su qué fuera su vestido?-me preguntó a mi esta vez.
-Quiero algo simple pero bonito-le contesté ya que no quería uno de esos vestidos enormes y extravagantes que siempre llevan.
-Ahora vuelvo-nos dijo después de apuntar todo en un cuaderno y desapareció detrás de una puesta que no se a donde conducía.
-Que mujer mas rara-comentó Bella.
-Cariño no es rara-le dijo mi madre regañandola cómo cuando era pequeña.
-Si que lo es en lugar de enseñarnos los vestidos se pone a preguntaros cual es vuestro vestido perfecto y luego desaparece.
-Vale ya Bella por favor-le dijo mi madre.
Unos minutos después la mujer regresó con un vestido tapado en manos.
-Aquí esta el vestido que buscáis-nos dijo y definitivamente era el vestido que buscaba.
Era un vestido largo con un escote corazón y sin tirante. Quedaba ajustado por arriba pero de cintura para abajo ya era menos ajustado y la falda estaba adornada con flores. Era realmente hermoso
-Ve a probartelo cariño-me dijo Esme y yo le hice caso y salí de ahí con mi vestido para probarlo.
Me lo puse y salí para que lo vieran.
-Dios estas hermosa Ana-me dijeron las chicas.
-Estas preciosa hija-me dijo mi madre con lágrimas en los ojos.
-Definitivamente ese vestido fue hecho para ti-me dijo Esme también con lágrimas .
-Me lo llevo-le dije a la dependienta y ella me sonrió.
Después de pagar les exigí que fuéramos a comer antes de hacer cualquier otra cosa.