¿Tu y yo?¿Un nosotros de nuevo?

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Pov.Bella:

Han pasado quince dias desde el incidente de Kat y ella se esta recuperando muy rapidamente lo que nos alegra a todos pero sobre todo a Peeta quien no se aleja de ella en ningún momento. Kat me pidió que organizará la boda de nuevo si podía pero que está vez fuera algo simple por lo que ahora me encuentro en una floristería para ver las flores con las que quiero que decoren la iglesia y la sala donde se celebrará la boda.
Estaba mirando las flores con atención cuando de pronto vi una rosa delante de mis narices.
Me gire para ver quien la sujetaba y me asombre al ver a Edward.
Lo nuestro iba de mal en peor y no lo hemos solucionado. Echo mucho de menos estar con él pero me agobia su comportamiento posesivo.
-Hola-me saludo mirándome con una sonrisa plasmada en el rostro.
-Hola-contesté del mismo modo.
-Tengo algo para ti-me dijo asombrandome.
-¿A sí? ¿Y que es?-le pregunté curiosa.
-Ven te lo enseñaré-me dijo y sin dejarme tiempo a contestar me agarro de la mano y me saco a arrastras del lugar.
Me metió en el coche y sabiéndose a mi lado arrancó el coche.
-Si no te conociera pensaría que eres un psicópata que me intenta secuestrar-le dije sincera y asustada por la manera en la que conducía aunque él parecía acostumbrado a conducir de ese modo.
-¿Quien sabe?-me contestó sonriente.
-¿Edward Mellark que planeas?-le pregunté entrecerrando los ojos.
-Recuperar tu corazón-me dijo dejándome boquiabierta por un momento pero me recompuse rápidamente.
-¿A si? ¿Y como planeas hacerlo?-le pregunté.
-Ya verás-me dijo despertando mi curiosidad.
Estuvo conduciendo durante media hora en la que estuvimos en silencio absoluto ya que no sabíamos de que hablar exactamente. Al llegar me di cuenta de que estábamos en uno de los barrios que se encuentran en los afueras donde hay enormes mansiones.
Edward aparcó delante de una y me ayudó a bajar del coche como todo un caballero.
Se acercó conmigo de la mano hacía una de las mansiones y la abrió con una sonrisa¿Piensa recuperar mi corazón con una mansión? Vaya estúpido entonces pero no por el hecho de intentar recuperar mi corazón con una mansión sino por el hecho de intentar recuperarlo cuando ya lo tiene.
Por muy dura que me haga yo sigo amandolo con locura y lo único que quiero es un lo siento simple y una promesa de que va a intentar no ser tan posesivo. Eso es lo único que necesito. No quiero ni mansiones ni joyas ni todo el dinero del planeta. Solo quiero un amor de verdad.
Entre a la casa y me quedé alucinada. Todo era muy bonito pero lo que mas me impresionó fue que habia fotos nuestras por todos lados, en el suelo había pétalos de rosas y lo único que iluminaba el lugar eran unas velas.
-Wow esto es precioso-le dije admirando el lugar.
De repente una hermosa melodía tocada por el piano empezó a sonar haciendo que todo este más romántico.
-Tu eres mas preciosa y esto se ve hermoso porque tu estas aquí iluminandolo-me dijo él sonriente.
Dios como echaba de menos esa sonrisa.
-Edward... - lo llamé de repente.
-Bella sé que no soy el hombre perfecto ni el que desearía toda mujer pero te amo y sé que sin ti no puedo respirar-me interrumpió él-Bella sé que quizás te agobie mi posesividad pero no puedo evitarlo. Te amo y quiero que seas solo para mí. Quiero formar una hermosa familia junto a ti y criar a nuestros hijos juntos con amor y cariño.
Las lágrimas bajaban cómo cascadas por mis mejillas y sabía que no eran de tristeza sino de emoción.
-Bella yo te sigo amando y cada día lo hago más y más-me dijo sonriente y yo en lugar de contestarle me lance a sus brazos y empecé a devorar sus labios.
Los echaba mucho de menos y deseaba volver a probarlos de nuevo.
El beso era ansioso, dulce pero sobretodo lleno de amor y cariño que ambos sentíamos por el otro.
El beso poco fue subiendo de tono más y más hasta que no se como terminé en una cama con Edward encima de mí.
Nos besabamos, tocábamos con ansia y deseo. Echaba de menos todo esto y por fin vuelvo a tener a mi Edward.
Edward se fue deshaciendo de mi ropa al igual que yo hacía con la suya.
Fue una noche impresionante llena de amor, cariño, dulzura, placer...
...................................................... Los primeros rayos de sol me dieron en plena cara despertándome. Intenté levantarme pero un peso sobre mí me lo impedía y al bajar la vista vi que tenía el brazo de Edward rodeandome la cintura.
Me giré con cuidado para mirarle dormir. Se veía hermoso con ese rostro angélico y relajado. Su rebelde pelo le caía por encima de su frente y sin darme cuenta me encontré apartándoselo.
Empecé a acariciarle la cara con suavidad hasta que abrió sus hermosos ojos verdes cómo esmeraldas asombrandome.
-Buenos días princesa-me dijo con voz adormilada.
-Buenos días guapo-le dije yo de vuelta y de un momento a otro ya tenía a Edward encima de mi cuerpo de nuevo besándome.
Sin pensarlo dos veces le seguí el beso con las mismas ansias hasta que nos quedamos sin aire y nos tuvimos que separar.
-Te amo Isabella Marie Swan-me dijo mirándome fijamente a los ojos con verdadero amor.
-Yo te amo más Edward Anthony Mellark-le dije con todo el amor que sentía.
Holiii amores
Siento tardar tanto en publicar y espero que el próximo lo pueda publicar más rápido.
Espero que les guste el capítulo y no olviden votar y comentar.
Intentaré publicar todos los sábados.
Os amo

Amor destinadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora