La sala de prensa está abarrotada de gente: fans del grupo y la prensa que ha ido buscando dejar testimonio de todo lo que ocurra en la gran sala. Por uno de los laterales empiezan a salir los miembros de The Black Rose, encabezado por Toni, que suelta un pequeño gruñido cuando los flashes de las cámaras le ciegan, seguido de una sonriente y radiante Jacky, que saluda alzando la mano, al igual que Joel, que lo hace inmediatamente después de la pelirroja, con su guitarra al hombro y con Leah de la mano, la cual saluda tímidamente, con las mejillas totalmente rojas por la vergüenza. Detrás va Rina, bastante seria, incluso con expresión de asqueo, ya que justo tras ella sale el ansiado y afamado Ed, con Sheila de la mano. La pareja saluda también a los asistentes, aunque Sheila no puede evitar reclinarse un poco sobre el cantante y susurrar.
─¿Esto siempre es así? Parece que se me van a lanzar encima en cualquier momento.
─No te preocupes, no es tan malo como parece. ─Ed le dedica una amplia y seductora sonrisa a la policía, la cual le devuelve ella, asintiendo.
Y al final, tras ellos, entran Anne y George, que parecen muy entretenidos echando un pulso con los pulgares. George, de hecho, va con el ceño fruncido y todo, concentradísimo en intentar ganar a su hija, la cual sonríe orgullosa, posiblemente porque le debe haber ganado en varias ocasiones ya.
─Gracias a todos por venir ─dice el manager del grupo, el cual ha salido el último, colocándose delante de la larga mesa donde se sientan todos los demás─. Bienvenidos a esta entrevista pública a los miembros de The Black Rose y a sus compañeros más cercanos. Vamos a empezar la ronda de preguntas enseguida. Recordad ser respetuosos.
Una mano se levanta entre los asistentes y Carlos se acerca apara dejarle el micrófono a la persona que pregunta, la cual lleva en su placa identificativa el nombre de Heii_27.
─Oye Ed, ¿te casarías conmigo? ─Hay unas cuantas risitas entre el grupo y Ed, esbozando una traviesa sonrisa y acercándose al micrófono, mira directamente a la chica.
─Por supuesto que sí, lindura. Y te llevaría hasta el fin del mundo. ─Le guiña el ojo, sin perder la sonrisa, mientras que Rina suelta un bufido.
Otra mano se alza entre el público y Carlos, tras ver que la chica no quiere hacer más preguntas, se acerca directamente a la siguiente persona, otra muchacha con el nombre de KaoruOkino.
─Yo quiero hacerle una pregunta a George. ¡¿Por qué abres la puerta en pelotas?! ─Anne suelta una carcajada, tapándose al instante la boca con las manitas porque ha sonado demasiado fuerte. George se cruza de brazos, sonriente, y se encoge de hombros.
─No sé, cuando aquí el chavalín llamó yo acababa de salir de la ducha. Y no iba en pelotas, la serpiente no se me veía. ─Sheila le da una colleja por la burrada, a lo que el hombre suelta un quejido y frunce el ceño─. ¡Jolín, es verdad, que llevaba la toalla!
─Pues dilo así, mendrugo.
─¡Otra, otra George! ─dice la chica─. ¿Juegas al Tekken? ¡¿Qué juego de lucha es?!
─Juego al Totem ─asiente el marine.
─Al Tekken, papá ─corrige Anne, riendo por lo bajo.
─Sí, eso. Y uso a José.
─¡A Jack! ─vuelve a corregir la muchacha, entre alegres risas.
─Ahora tengo una para Rina ─Asiente Kaoru, mirando a la muchacha, que arquea una ceja mientras se señala a sí misma, cogiendo luego el micrófono, dispuesta a contestar─. ¿Por qué eres tan mala?
─No soy mala, solo... ─Se sonroja, mirando hacia otro lado, a la vez que frunce un poco el ceño, como si le costara contestar a la pregunta─. Solo hice las cosas sin pensar. Me fastidia que le guste una vieja.
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The Black Rose
RomanceAVISO: Esta historia es para mayores de 18 años. La historia puede contener escenas de sexo explícito en algunas de sus partes. A sus 35 años Sheila es una mujer feliz, una gran policía, una mujer independiente y madre de una enérgica adolescente. D...