Hay estaba mi querido primo y mereció la pena no haberselo dicho a Laura, su cara no tenia precio. Mi querido primo es Cristian, el chico que se colaba por las noches a ver a Laura, del que ella lleva enamorada tanto tiempo, por el cual ha estado castigada muchos días por saltarse las normas y escapar del internado constantemente. Laura me miro y la sonreí sabía que estaba loquita por mi primo pero no la podia decir que con el chico que se comprometería era el mismo chico de sus sueños, habría perdido la gracia. Lo mejor de todo es que Cristian se sento en la mesa sin dirigir la palabra a nadie, no vió ni siquiera que Laura estaba sentada en la mesa.
-Mis disculpas. Siento mucho la tardanza, me quede sin gasolina en la moto y tuve que llamar al chófer para que me trajese. Pero ya estoy aquí.
-Que sea la ultima vez que ocurre, no puedes tener a tus primos, padres y esperemos, a tu futura esposa esperando.- Cristian asistió. -no, no me digas que si con la cabeza. Llevamos mucho tiempo esperándote, hace más de una hora que tenías que haber llegado. No está bien hacer esperar a la familia.
-Mamá, ya te dije que no me iba a prometer con alguien que no conozco, se que no me traeras nada ni nadie que me pueda llenar lo suficiente como para casarme. Siempre me traes a chicas nobles, estiradas y repulsivas. Y esta chica no sera una excepción. Estoy seguro que será la sobrina o hija de alguna de tus amigas, y solo provocaras que aborrezca a otra chica más.
Laura se levantó de la mesa y se fue corriendo, mire a mi primo y me levante de la mesa cabreada por su comentario.
-Cristian te has equivocado, el repulsivo has sido tú, no has permitido ni que te la presentaran. A Laura la he traído yo, y es esa chica que estaba conmigo el dia de la fiesta de fin de curso. Sabía lo que significaba para ti y la invite a venir pensando que es la chica perfecta para ti.
-¿Mi Laura? ¿Por quien he saltado vallas y he sido golpeado por un palo en la cabeza?
Asentí y sali del comedor en la busqueda de Laura, despues de unos minutos la encontre, se habia cambiado de ropa y tenía la maleta preparada. Me acerque a ella, la abrace y ella comenzo a llorar, la quite la maleta y la pedi que nos sentaramos en la cama para poder hablar. Estuvimos hablando sobre lo de mi primo y de repente sonó la puerta de mi habitación, entró Cristian y se disculpó ante Laura, al principio ella se rehusó a perdonarle pero tras escuchar sus explicaciones de que mi tía siempre le llevaba chicas hijas de sus amigas que eran todo lo contrario a ella le perdonó.
Bajamos otra vez al comedor y comimos tranquilamente entre preguntas de mi tia a Laura.
-Laura ¿que estas estudiando?
-Esta estudiando el primer año de derecho, quiere ser abogada especializada en defender a niños y niñas que son maltratados. Es la mejor persona que he conocido en mi vida, tiene un corazón que no la cabe en el pecho.
-Muchas gracias Cristian.
A las cinco y media empezó a llegar familia y de un momento a otro perdi a Alex de vista, le busque por encima pero no le encontré, y tuve un mal pálpito. Me disculpe con mis invitados y me fui a buscarlo, necesitaba averiguar dónde se había metido.
Me tire más de veinte minutos sin encontrarle por ningún lado, me estaba empezando a preocupar, no es normal que desapareciese de la nada, cuando hacia menos de dos horas que había estado con él. Cogí el móvil y le llamé.
-Joder ¿quien es? ¿Que quieres?
-Principalmete tú a mi me hablas bien, y segundo saber dónde estás, no te encuentro por ningún lado. Y estaba preocupada.
-Estoy comprando tu puñetera tarta. Pero ya voy para casa.
Colgué sin responderle, cuando llegue que se prepare porque las cosas se pueden poner muy feas.
Seguí en la fiesta riendo y disfrutando de mi cumpleaños ya que mis amigos y familia no tienen la culpa de que Alex sea idiota.
Al rato llegó otra vez Alex pero después de la contestación que me ha dado se pueden ir él y la tarta a tomar por el mismo sitio. Pero para que mi tía no sospechara le di un pico como saludo, le agarre del brazo y le arrastre a mi habitación donde nadie nos oiria ya que se que esta insonorizada.
-¿Me quieres explicar que cojones te pasa? ¿Por qué me has hablado tan mal?
-Lo siento mucho mi amor, es que el coche que estaba por delante de mi no se movía y me estaba poniendo muy nervioso, y al final lo he pagado contigo cuando has llamado. Maddie necesito que vengas al salón conmigo tengo que decirte una cosa delante de tu familia.
Llegamos al salón y pidió a toda la familia que guardase silencio. Y arrancó, se puso de rodillas, agarro mi mano y me juró amor eterno ante toda mi familia y amigos acompañada de una hermosa y simple frase, la cual me pilla totalmente desprevenida y provoca que los nervios se apoderen de mí.
-Pequeña princesa, ya se que han pasado tres años desde que nos vimos por última vez, pero se que eres el amor de mi vida y aquí delante de toda tu familia y amigos te hago esta pregunta. ¿Quieres casarte conmigo?
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Internado
Teen FictionMadison es una chica con 16 años que es mandada a un internado solo para mujeres desde sus 13, y el futuro que la aguarda no sabe como sera y nos cuenta su historia desde los 13 años (el accidente de sus padres) hasta su presente...