Internado

Capitulo 39

El tiempo en el hospital pasa super lento pero lo que no saben es que una chica tras llevar un año aquí encerrada se la ocurre de todo y mis ideas cada vez parecen tener mejores resultados, la última vez que intente escapar llegue hasta la puerta antes de que una enfermera me reconociera y me llevará de nuevo a la habitación, pero está vez conseguiré salir. Desde que deje de tener que tomar la medicación tengo más facilidad para pensar.

Laura viene a diario a verme pero no apoya la mayoría de mis locuras, pero esta última la apoya ya que es una de las que ideó ella en la escuela siendo pequeña y era con la que se escapaba a ver a mi primo.

-Madison, te quieres estar quieta. ¿Que te pasa hoy?

-Alexander, me quieres dejar en paz. Que pesado eres. Me aburro aquí dentro y necesito moverme para no enloquecer.

-¡Maddie deja de gritar! Estas súper rebelde últimamente.

-¡Pues deja de gritar tú! Y no es rebeldía es aburrimiento te repito.

-Mira, cuando estés más calmada vuelvo. Sigue saltando hasta que te canses.

Le dije adiós con la mano y se fue, ahí empezaba mi plan, esperaba que saliera bien. Laura entretendria a Alex y a Darío en la cafetería yo me pondría un conjunto suyo y partiría hacia Italia, pasaré una larga época con Ana. Así lo hice, me peine y me vestí, ahora venía lo más difícil, salir por la puerta sin levantar sospechas. Baje con cuidado de no encontrarme con ninguna de mis enfermeras ni médicos, llegue hasta la puerta y ahí estaba mi coche, con Lorenzo dentro para llevarme al aeropuerto. Me acerqué al coche y me subí a él, ya quedaba sólo salir de allí sin que Darío o Alex se dieran cuenta de que me había ido o por lo menos poder coger el avión antes de que dieran voz de alarma.

Narra Alex.

Después de la discusión con Madison pensé que tenía que pedirla perdón por lo ocurrido, mi padre tiene razón yo también estaría super estresado estando ingresado en un hospital durante tanto tiempo, también es normal que se aburra y quiera un poco de libertad.

Fui a salir de la cafetería y me choque con Laura tirandola al suelo.

-¡Auch! Alex, ten más cuidado.

-Lo siento Laura, no te ví al salir, te ayudó.

La levante del suelo y entramos a tomar una coca-cola a la cafetería. Hablamos sobre el tema de Madison y lo estresada que estaba con querer volver a casa y poder seguir bailando.
Después de un ratito decidimos subir a la habitación de Maddie para poder hablar con ella tranquilamente. Pero al llegar nuestra mayor sorpresa fue que no estaba allí, la llame al móvil y no lo cogía, llame a su hermano y seguramente si le llamaba el lo cogería, pero tampoco. Esto me olía a plan conjunto.

-Laura, estoy segurísimo que tú sabes dónde está, al igual que también estoy seguro que tú la has ayudado a escapar. Dímelo, no la pasará nada pero dilo.

-Alex, Maddie en estos momentos está cogiendo un vuelo con destino Porto Cervo, sabíamos que no la podríamos retener mucho tiempo más, me ha mandado un mensaje diciéndome que se iba. Y yo no lo sabía.

-La localizaremos, siempre lo hacemos. Gracias Laura.

Salí corriendo, llamando a todas las líneas de vuelo para que no saliese ningún vuelo, que buscasen el nombre de Madison, pero me informaron que ese vuelo había salido hace 10 min y que ya no se podía hacer nada.

Al final va a conseguir lo que quiere que es bailar y ser libre, pero no todo es tan fácil, ella lo ve así pero no lo es.
Me llegó un mensaje al móvil.

"Princesa"
Amor mío, siento decirte esto por un mensaje de texto, pero creo que ya habrás visto que me he ido, no podías detenerme esta vez, perdona a Laura que ella no ha tenido nada que ver con esto, todo ha sido culpa mía. Espero que algún día sepas perdonar que me haya ido a Italia sin avisarte, pero estoy cansada de estar metida entre cuatro paredes blancas que provocaran que me acabe volviendo loca y no es lo que quiero. Te amo amor mío, cuando estés dispuesto a ver quien soy y cuál es mi única pasión, te espero en Italia.

"Yo"
Madison por favor vuelve, tienes que recuperarte, ven a España, te prometo que no te volveré a llevar al hospital, estaremos en casa si así lo deseas. Ya sentí lo que es tenerte tan lejos y no poder ver tu sonrisa cada mañana al despertar y saborear esos labios con sabor a caramelo de fresa amarga que otras personas dirán que está malo pero para mi es el mejor sabor del mundo. Si es necesario iré a Italia a buscarte por no tener que pasar un sólo día más sin ti. Pero si voy es para traerte de vuelta. Te amo pequeña princesa. Posdata: Todo no es así de fácil. Ojalá te des cuenta pronto que todo no se arregla escapando.