El Black desheredado y el Lestrange despreciado

68 3 1
                                    


Una vez que Albus, Scorpius e Isaac estuvieron afuera de la sala común de Slytherin, Albus se volvió hacia sus amigos.

-Scorpius, espero que no te haya ofendido que haya llamado a tu padre y a tu abuelo "traidores a la sangre".

-¿Ofenderme? ¡Me encantó como la derrotaste ahí adentro!

Pero Albus sacudió la cabeza.

-Nadie jamás podrá derrotar a esa chica. Creo que seguirá atacándome hasta que nos vayamos de Hogwarts.

-No pienses en ella -dijo Isaac-. Tenemos que desayunar y luego ir a la clase de Herbología.

Pero antes de que emprendiesen su camino hacia el Gran Salón, uno de los prefectos de quinto salió de la sala común y los detuvo. Temiendo que lo fuese a reprender, Albus se volvió para escucharlo.

-Vi el altercado entre Valerie Rosier y tú, Potter. Sólo quiero que sepas algo: cualquier rencor personal que le guardes a esa chica, asegurate de que nadie de las Casas inferiores lo conozca. Esto es un asunto de Slytherin, ¿entendido?

-De acuerdo.

-Ahora, vayan a desayunar y yo hablaré con Rosier.

Los chicos de Slytherin subieron al Gran Salón y se sentaron en la mesa de su Casa. Al cabo de unos minutos, Valerie Rosier, con aspecto muy contrariado, y las otras cuatro chicas de Slytherin, acompañadas por Antoine Zabini y Perseus Flint, entraron al Gran Salón sin hablar con los tres chicos, y se sentaron en el extremo más alejado de la mesa.

Los de Slytherin también compartían Herbología con los de Ravenclaw. El profesor Longbottom, un viejo amigo de los padres de Albus, estaba esperándolos en la puerta del invernadero, cerca de la cabaña de Hagrid, y los saludó a medida que iban entrando. Neville pareció sorprendido al ver a Albus y Scorpius juntos, pero les dio una cálida sonrisa de bienvenida.

Isaac, Albus y Scorpius ya se habían acostumbrado a la compañía de Irene y Rose, pero ese día les llamó la atención que insistiesen en que Livius Black se sentase con el grupo. Era la primera vez que Albus veía de cerca al joven mago, y le sorprendió la fuerza con la que se habían manifestado en su rostro los rasgos de la familia Black. Habiendo crecido entre decenas de retratos de miembros del clan, y habiendo visto muchas veces a Andrómeda Tonks, podía distinguirlos a la perfección. Era como si los genes familiares quisieran reafirmar su presencia en aquel miembro desheredado de la "Noble y Ancestral Casa de los Black".

Por supuesto, era difícil acostumbrarse al hecho de que Livius se comunicase a través de notas, pero al cabo de un rato Albus pudo adaptarse. Cuando le preguntó por cómo se las arreglaría para recibir clases normalmente siendo incapaz de hablar, Livius no pareció ofenderse, y escribió:

Cuando le conté al profesor MacMillan que soy mudo, él habló con el profesor Flitwick, el jefe de mi Casa, y ambos hablaron con la directora Crouch. Convinieron en que asistiría a todas aquellas clases en que no necesite pronunciar hechizos de ningún tipo, y que recibiría clases particulares de magia no verbal de los profesores de las otras clases.

Albus leyó la nota con atención, y le preguntó:

-Entonces, ¿qué materias tendrás con el resto de los alumnos de Ravenclaw?

Herbología, Historia de la Magia, Astronomía y Pociones. Flitwick, MacMillan y Jones van a darme clases por separado.

-Te deseo suerte, Livius -contestó Albus-. Los hechizos no verbales no son enseñados hasta sexto año, y aún los alumnos de ese nivel tienen muchísimos problemas para dominarlos.

Harry Potter Y El Hacedor De ReyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora