Romeo.( Segunda Parte De Rommeo&Romeo).

CAPÍTULO 37.

〰⬛MUY LEJOS DE ALLÍ. TIEMPO ACTUAL.⬛〰

El recuerdo de sus amigos la atosigaba. No podía sacarse de la cabeza a sus únicos amigos que quiso.

Los extraña tanto, nadie los podía igualar. Ahora tenía más amigas, pero no como eran Romeo, Evelyn y Ángel. Nadie como ese trío de locos para hacerla sentir bien en aquellos días que quería solamente asesinar a todo mundo.

Los chistes y bromas de Romeo, la confidencia con Evelyn, y las divertidas discusiones eternas con Ángel. Después de tanto, ya lo había perdonado.

-... ¡ Alicia!-. La voz de Elena la sacó de sus pensamientos-. Estás en babilonia, morra. ¿ Que te pasa, eh? O compartela.

Elena era su " nueva amiga". Ella entró al grupo después de los chicos. Ella es un poco gordita, pero muy linda. Con ojos oscuros y grandes, labios delgados y un poco oscuros, piel morena oscura, cabello corto y ondulado color negro opaco, un poco maltratado y con frizz.

- Despierta, wey. Andas en las nubes-. No dejaba de burlarse de ella.

- Que quieres enfadosa. Aquí está el libro-. Sacó el libro de ejercicios para que copiara la tarea de matemáticas que dejó Luna Azul.

- Y en quien piensas, eh. Estas en baba-. Interrogó copiando a toda prisa.

- En mis viejos amigos-. Su voz se llenó de melancolía por el triste recuerdo de sus amigos-. Romeo, Evelyn y Ángel.

- Oh, me parece haberlos escuchado. Que gacho lo que les pasó. ¿ Los mataron, no?

- Y de una cruel manera. Pero mis huesos me dicen que pronto lo recuperare. Mis huesos me dicen que Romeo aún sigue por allí, y pronto regresará.

- Ya déjalo descansar en paz. Ellos murieron, y nadie regresa de la tumba, excepto de los zombies. Esos si regresan-. Entregó el libro a la chica, guardando el suyo en su bolsa.

- Insisto, mi amigo sigue con vida. Tarde o temprano lo veré de nuevo-. Las lágrimas comenzaban amenazar en sus ojos, quemándole los lagrimales.

- Ya me tienes a mí. Y para que sepas que soy tu amiga, te disparo una Chamoyada* de la cafe-. La levantó del césped a tirones, llevándola a la abarrotada cafetería escolar.

Como pudieron, lograron entrar entre la multitud, donde los golpes, aruñones y manotazos les abrieron camino hasta la barra de despacho del pequeño lugar. Elena pidió los helados, mientras que Alicia buscó una banca donde sentarse y esperar a la morena con los postres helados.

- Ya viste, Lucio no te ya quitado la mirada de encima-. Llegó la chica, entregando el vaso y sentándose al lado de la rubia.

Lucio es un chico mayor, casi un graduado de 6◽ semestre de preparatoria. Es alto, rubio de ojos verdes claros, cuerpo fornido de gimnasio. Labios gruesos y carnosos, de un tono rojo cereza, nariz pequeña y respingada. En sí, parece modelo de marcas de lociones. Lo malo de él, es su extrema timidez.

Alicia desde que entro a la prepa le gustó de primera vista, pero Lucio no le da señales ni se le acerca, por lo mismo tampoco lo hace ella. Un día trató, pero el Chico huyó rápidamente casi arroyando a un par de chicas que caminaban tomadas por los brazos, formando una cadena, y estorbando el paso de cualquiera.