Sentimientos Ocultos - Junjou egoist

CAPITULO 19 Preparativos.

---Akihiko---

Hemos estado una semana en la casa de mi padre, mi hermano se ha portado muy bien con nosotros y se preocupa por mi amado.

Me alegro de tener a Yukito a mi lado, estoy feliz, afortunadamente lo pude liberar de ese encierro al que su padre lo había obligado, yo no quería que él se casará con el imbécil de Takeshi él cual le hizo tanto daño.

Yukito es un lindo chico al cual protegeré, con el cual me casaré y le daré todo mi amor, es mi felicidad y yo soy la felicidad de él, ¿Qué más puedo pedir?

Estábamos recostados en la cama mientras leía un libro en voz alta y mi amado me miraba fijamente, yo lo abrazaba a mi pecho con mi mano suelta mientras sus manos estaban en mi pecho, siento su respiración tan cerca que lo amo tanto.

-Akihiko. –me miro- ¿Puedes leer de nuevo el poema?
-Claro mi amor.
-Gracias.

Sed de ti me acosa en las noches hambrientas.

Trémula mano roja que hasta su vida se alza.

Ebria de sed, loca sed, sed de selva en sequía.
Sed de metal ardiendo, sed de raíces ávidas......

Por eso eres la sed y lo que ha de saciarla.
Cómo poder no amarte si he de amarte por eso.
Si ésa es la amarra cómo poder cortarla, cómo.
Cómo si hasta mis huesos tienen sed de tus huesos.
Sed de ti, guirnalda atroz y dulce.
Sed de ti que en las noches me muerde como un perro.
Los ojos tienen sed, para qué están tus ojos.

La boca tiene sed, para qué están tus besos.
El alma está incendiada de estas brasas que te aman.
El cuerpo incendio vivo que ha de quemar tu cuerpo.
De sed. Sed infinita. Sed que busca tu sed.
Y en ella se aniquila como el agua en el fuego.

-Es hermoso. –murmuro.

-De mis poemas favorito. –cerré el libro.
-Creo que también será el mío.

Me coloque encima de mi amado Yukito y comencé a besarlo apasionadamente mientras él se aferraba a mi cuello.

Siento como mi cuerpo empieza a reaccionar cuando nuestros cuerpos empiezan a friccionarse, sin poder evitarlo metí mi mano por debajo de la playera de mi niño mientras devoraba sus labios con profundo deseo.

-Ahh. –gimió cuando acaricie su pezón- A-Akihiko.

Me di cuenta de lo que hacía y me separe un poco de él.

-Lo siento mi niño me deje llevar. –baje la mirada- Lo lamento.

Sentí como sus brazos me rodeaban.

-S-Sé que estará bien si es contigo, porque eres al único que amo.
-Yukito...
-Por favor Usagi-san, -se sonrojo- hazme tuyo.
-NO deberías excitarme tanto. –lo tome del mentón.
-¿Excitarte? –me miro.
-Así es, -lentamente le quite la playera mientras pasaba mi lengua por su cuello- Yukito te deseo tanto.
-Ahh, -murmuro- s-siento c-cosquillas.
-En ese caso te haré sentir mucho mejor.

Baje mi lengua hasta su pecho y comencé a lamer sus pezones mientras el mordía su labio para no emitir algún sonido.

Su expresión se me hizo demasiado hermosa mientras seguía jugando con sus pezones.

Su piel es tan suave y deliciosa, en verdad Yukito es tan perfecto, lo que más amo, mi vida entera, la persona con la que compartiré mi vida entera.

Dejé de lamer sus pezones para dedicarme a terminarlo de desnudar, quitándole sus zapatos, luego su pantalón para finalizar con su bóxer.

Lo mire, en verdad es tan hermoso, su cuerpo es tan perfecto y me encanta. Comencé a besar todo su torso desnudo hasta bajar hasta su miembro. Lo tome entre mis manos y comencé a lamerlo lentamente.

-Ahhh U-Usagi, n-no lamas...
-Eres tan delicioso, así que quiero disfrutarte por completo.
-E-Es vergonzoso.
-Te amo.

Seguí lamiendo su miembro hasta meterlo por completo en mi boca, ocasionando que mi amado se estremeciera.

-Ahhh, s-sé siente bien. –murmuro.

Lo saque de mi boca para lamer mis dedos y lentamente coloque uno en su entrada.

-E-Eso es...
-Tranquilo mi amor, no te lastimaré.
-L-Lo sé, s-solo es extraño.
-Pasará pronto.

Metí mi dedo en su entrada mientras seguí saboreando su miembro, engulléndolo por completo, lentamente metí otro dedo moviéndolo poco a poco para dilatarlo por completo. Luego de unos momentos metí el tercero simulando embestidas.

-P-Para yo me...

No pudo terminar de decirme ya que arque su espalda y se corrió en mi boca, trague todo el semen que salió y él me miro sonrojado.

-Yo...
-No pasa nada mi niño, -me quite mi ropa- todo de ti me gusta.
-E-Extraño.
-Dejémoslo en raro, -sonreí- te haré sentir mejor.

Me quite mi ropa interior ya que comenzaba a apretarme de lo duro que estaba, lentamente rosé mi miembro con su entrada mientras lo besaba apasionadamente.

-Te amo. –me miro.

Sus ojos cristalinos, su bella sonrisa me hacen enloquecer de amor.

-Y yo a ti.

Comencé a lamer sus pezones para relajarlo un poco, y lentamente metí mi miembro en su entrada haciendo que Yukito se aferrara a las sabanas.

-Ahh e-espera n-no te muevas. –jadeo.
-Tranquilo mi amor, -tome su miembro- hare que te acostumbres a mí.

Comencé a masturbar su miembro que comenzaba a despertarse y acaricie sus piernas, él miraba a otro lado por la vergüenza que sentí.

Luego de un tiempo asintió y comencé a moverme lentamente. Lentamente tome sus caderas y con delicadeza empecé a embestirlo, no quería que le doliera, solo quiero que ambos disfrutemos, aunque una parte de mí quiere que me deje llevar por la pasión y el deseo, la otra parte la mantiene en calma.

-Ahhh, -gimió- A-Akihiko.
-Me gusta cuando pronuncias mi nombre, -tome una de sus piernas y la subí en mi hombro dándole unas pequeñas mordidas- suena tan hermoso de su voz.
-Ahhh, e-espera.
-Acaso...

Tome sus caderas y lo embestí fuertemente.

-Ahhh, a-ahí. –gimió.
-Tss, -me queje- quiero besarte.

Salí de su interior y me senté en la cama, tome del brazo a mi amado y lo senté en mis piernas dándome la cara.

Sus piernas rodearon mi cintura y lentamente abrí sus glúteos para poder entrar en él.

-Tan cálido. –murmure.
-Akihiko... -me beso colocando sus brazos alrededor de mi cuello.
-Bésame Yukito y no dejes de hacerlo, quiero tener todo de ti, absolutamente todo.

Tome sus caderas y lo moví de arriba hacia abajo.

Siento que en esta posición puedo sentirlo más, sus labios devoran los míos y tiemblan cada vez que doy en el punto certero.

-Ahh, n-no puedo más. –gimió.

Tome su miembro entre mis manos y comencé a masturbarlo.

-Hazlo mi amor, no te detengas.

Aceleré el ritmo de mi mano y mi Yukito arqueo su espalda mientras se corría en mi mano. Le di unas embestidas más corriéndome en su interior.

-Te amo, -bese su cuello- eres mi todo.
-Yo también te amo. –sonrió.

No puedo ser más feliz, Yukito es mi vida entera y no lo dejare irse de mis manos...

---Hiroki---

Mañana es el peor día del mundo...

Mañana me casaré con Mookyul, en donde haré mi vida tan desdichada, donde renunciare al amor que le tengo a Nowaki...

Pero, no puedo quejarme, mi mamá estará mejor y libre, así que no importa, ella debe ser libre, quien sabe cuántos años haya estado prisionera.

¿Por qué?

¿Por qué mi padre ha hecho eso?

¿Por qué lastimar a su esposa? A nuestra madre...

Mi padre está loco...

En cuanto ponga a mi madre a salvo me escapare de Mookyul, ese hombre es un mafioso, tal vez por eso me comprometió mi padre con él.

-Hiroki.
-M-Mookyul, -murmure- ¿Qué ocurre?

Desde que me salí de la casa de Nowaki me obligaron a vivir en la mansión de este loco, afortunadamente él está tranquilo y eso me deja en calma.

Entre mi padre y él se han encargado de cada arreglo para nuestra boda, flores, banquete, músicos. Esto es una exageración, la boda se realizara en esta casa, al menos no tendré la vergüenza de salir a la calle.

No sé cómo rayos convencí a mi padre de que la presa no estuviera presente, esos tipos me hostigan, son unos chismosos.

-Quiero presentarte al violinista que contrato tu padre.
-¿Para qué quieres presentármelo? –lo mire.
-Porque no conozco mucho de música, quiero que elijas la que más te guste.
-Está bien. –suspire.
-Iré a terminar unos negocios, -me tomo del mentón- nos vemos mañana en nuestro día feliz.
-Muy feliz. –dije sarcásticamente.

Me sujeto de la cintura y me beso apasionadamente mientras yo cerraba los puños para no golpearlo.

-Nos vemos.

Salió de la casa y yo camine hacía la sala donde vi a un castaño de ojos azules.

-Buenas tardes. –comente.
-Buenas tardes, -sonrió- mi nombre es Roderich y seré el violinista en su boda.
-Mucho gusto, soy Kamijou Hiroki.

Comenzamos a platicar de las melodías que tocaba con algunos compañeros y le pedí las melodías que más llamaban mi atención.

Después nos despedimos y él salió. Mi celular comenzó a sonar y conteste.

-¿Sí?
-O vienes a verme o hago un escándalo. –comento.
-¿Nowaki? –me sorprendí.
-Te doy una hora.
-Espera no me... -colgó.

Sentí un miedo terrible que algo le pueda pasar a Nowaki si intenta hacer algo, así que tome mi cartera con mis llaves y salí de la casa dirigiéndome al hogar de Nowaki. Tome un taxi y rogué que Mookyul no llegará a tiempo.

Al llegar al lugar, me acerque y toque la puerta.

-Vaya, llegaste a tiempo. –sonrió Nowaki.
-¿Qué quieres?

Me tomo del brazo y me llevo hasta su despacho donde me sentó en el sofá.

-Ahora me dirás ¿Por qué rayos te vas a casar?
-Porque lo amo.
-No te creo.
-No me interesa.
-MALDICIÓN, -se arrodillo ante mí y tomo mis manos- DIMELO, POR FAVOR, MI AMOR.
-Nowaki...
-ESTOY DESESPERADO, ESTOY ANSIOSO, YO TE AMO TANTO, ERES MI VIDA ENTERA, MI TODO, HIROKI YO SIN TI NO SOY NADA, ERES MI VIDA, NO ME DEJES ASÍ POR FAVOR, QUEDATE SIEMPRE CONMIGO, LO PROMETISTE. –sollozo.

Mi corazón empezaba a doler y lo abrace.

-Te amo Nowaki, si me caso con él es porque tiene prisionera a mi mamá.
-¿Qué? pero si tu mamá...
-Sigue viva, tengo que salvarla.
-¿Qué paso?

No puedo aguantarlo más...

Decidí contarle todo lo que hizo mi padre y él parecía que mataría a cualquiera que se acercará.

-Nowaki no hagas nada.
-Pero...
-Lo siento Nowaki, por favor no te metas.
-Te amo y debo...
-Sí quieres hacer algo, puedes...

"Maldición perdóname por mentir"

-Me caso a las 7, puedes llegar a interrumpir y yo huiré contigo.
-¿Lo harás?
-Lo prometo.
-Hiro-san, -me abrazo- te amo.
-Yo también te amo.

Me tuve que despedir de él porque ya era muy tarde. Lo besé como siempre lo besaba y me fui corriendo.

Sé que le he mentido pero solo yo puedo salvar a mi madre.

Lo siento Nowaki pero esta vez las cosas serán diferentes...