Capítulo 5

11.6K 983 31
                                    

***


— ¡Riddle! — el grito de MacGonagall retumbo en mis oídos, haciendo que riera como desquiciada. Me gire a verla, mis ojos brillaron, pude notar su miedo al verme en esta situación.

Bueno cualquiera, me vería con miedo, si me viera en esta situación.

Reí nuevamente y apreté la varita en mi mano mientras escuchaba los quejidos de la chica que se encontraba en el suelo.

— Yo no la mande a que se metiera en mi camino. — mi voz salio dulce, casi un susurro escalofriante. Aunque yo no había tenido el privilegio de ser quien lo hiciera.

─ Esta prohibido el uso de magia en sus compañeros.

— Es una lastima.

— ¡Riddle!

— Minerva.  — reí y negué mientras con un movimiento de varita curaba las heridas de la chica para que estas dejaran de sangrar y de paso limpie mi uniforme.

—¡Hermione! ¡Hermione!

El mugriento hermano de los gemelos y el fideo de Potter aparecieron en escena, miraron a su amiga tendida en el suelo, llena de sangre y sin herida alguna. MacGonagall solo se dedicaba ahora a mirarme, una mirada que no me gustaba para nada. Porque odio que me miren decepcionados, eso demostraba que esperaban mas de mi cuando no debía ser así.

— ¿Que le hiciste? —grito el pelirrojo y me encogí de hombros.

— Me iré a la oficina de Dumbledor.  —dije mientras miraba una ultima vez a la chica tendida en el suelo, para luego irme a la oficina del director.

Entre en la oficina tranquilamente y me senté en la silla para mirar al viejo frente a mi. Negó  levemente, estaba decepcionado. ¿Por que nadie pregunta que fue lo que paso?

— Dame tu varita. — entre cerré los ojos y saque el palo de madera de mi túnica para entregársela.

—Se que no me creerás. — miré mis uñas. — Pero yo no fui.

—Tienes razón no te creo. — hablo seriamente y levante las manos. — ¿Por que lo hiciste?

— ¿Que? ¿Salvar la vida de la sangre sucia?

— Agredirla.

—Te repito Albus, yo no lo hice. ¿Por que tendría que hacerlo? ¿Que ganaría yo con eso? Y si yo lo hubiera hecho ten por seguro que ella ya no estaría respirando.  — el viejo tomo mi varita y se concentro en ella, luego de unos minutos levanto la vista y me giro a ver. — ¿Sorprendido?

Me coloque de pie y le quite mi varita de mala gana. El me miraba directamente y sin pestañear. Sabía que estaba leyendo mi mente esculcando en ella para poder saber lo que paso y le deje ver lo que le convenía que viera.

Flash Back

Había salido del comedor con los gemelos siguiendome, mas bien acosandome. En estos últimos tres días los gemelos parecían mi sombra a cualquier lugar que fuera ellos estaban. Ya me tenían harta, mal, irritada. No podía ni gritarles porque ya se estaban riendo. Habían cogido una obsesión conmigo o yo no se que. Se que soy hermosa pero ellos estaban exagerando. Estaban buscando acabar mi paciencia y que los matara. Es que no entiendo porque ellos dos son las únicas personas (a parte de Draco, Theo y Blake)  que no se me despegan por nada, tan siquiera sabiendo quien soy y que llegue hacer.

— Podrían dejarme en paz. — exclame irritada.

— Pero damita te queremos acompañar. — río George.

— No tienen que hacerlo.— hable entre dientes.— Quiero estar sola..

— Siempre quieres estar sola y eso es malo. La soledad nunca es buena.

Me iba girar para decirles algo, pero el quejido de Fred hizo que me mantuviera en alerta. Un olor a sangre llegó a mis fosas nasales y mire hacia el suelo.

— ¡Hermione!

Ambos gemelos se acercaron rápidamente a ella mientras yo miraba la escena. La leona estaba tendida en el suelo con muchas heridas y cubierta de sangre. Mire hacia el final del pasillo y ahí en la oscuridad pude deslumbrar unos ojos color zafiro mirarme con malicia.

¿Que hacia el aquí?

— ¡Hermione! ¡Hermione!,

Me gire a ver a los pelirrojos quien ya estaban soltando un mar de lágrimas. Me acerque a ellos y me baje a su altura para tomar el pulso de la chica. Suspire, esta con vida.

— Vayan por la enfermera ¡Ahora! Esta viva.

Ellos asintieron mas rápido que ligero, echándose a correr por los pasillos se fueron. Y  minutos después la vieja gata llego.


Fin del Flash Back


Luego de que salio de mi mente y vio lo que yo quise que viera. No permití que viera que alguien se había colado por los muros del castillos a echarme el ojo.

— Y si cree que yo distorsione todo, hable con los gemelos. Estoy completamente segura de que ellos no les mentirán, ellos tienen que servir para algo ¿No?

La hija de VoldemortDonde viven las historias. Descúbrelo ahora