Habían pasado mas de tres días desde que Lucius me sacó de ese inmundo calabozo y me llevó a mi habitación que me pertenecía en la Mansión Malfoy. Aún así seguía siendo prisionera entre estas paredes por mas bonitas que estas fueran.
- ¡Riddle!
- No me grites. - le dije a Colagusano con voz tranquila y este comenzó a temblar, bufe divertida.
- La están solicitando.
Levanto las cejas y me cruzo de brazos, me coloco de pie y alzo la mirada para salir de la habitación. Mire los escudos de la familia Malfoy mientras avanzábamos por los pasillos para llegar en donde estaban todos reunidos.
- Nagini preciosa. - exclame viendo a la gran serpiente arrastraba para acercarse a mi, me dejo acariciar su cabeza y luego comenzó acurrucarse junto a mi. Ella no seria capaz de hacerme daño no como estos puros cobardes. La mayoría estaba en sus filas por miedo, por miedo a que ellos los maten no por verdadera vocación. Bellatrix si estaba por vocación esa mujer si que estaba loca, verdaderamente loca, desquiciada.- Tanto tiempo sin verte, estoy segura de que Kia te caería muy bien.
La acaricié con delicadeza y luego me coloque recta, mirando a toda la bola de estúpidos que me rodeaban.
- Ustedes estarán de acuerdo con que ya perdí mucho tiempo. - todos rieron con cinismo en afirmación. - Ya no mas.
- ¿Y como estamos tan seguro de que no volverás a defraudar a nuestro señor? - pregunto uno de los encapuchados, reí levemente y comencé a desplazarme por la sala tranquilamente con nagini siguiéndome de cerca.
- ¿Por qué yo necesitaría la confianza de ustedes en mi? - llegamos al comedor y me senté en la cabeza de la mesa. En el puesto que le tocaba a mi padre. - No la necesito. Podrán torturarme todo lo que quieran, no pueden matarme se encontrarían en graves problemas, yo si puedo matarlos a ustedes y abra ningún inconveniente.
Un trueno resonó por toda la sala y sonrió, la seriedad en sus rostros me provocaba tanta gracia.
- Necesitan la sangre de Harry Potter para que mi padre pueda volver a tener forma y fuerza, devolverle el poder.
Cada uno de ellos comenzaron a tomar asiento en la mesa, todos me miraban con interés y sed de sangre por igual.
Esto tiene que salir como lo planeo porque si no moriremos, todos los haremos.
– ¿Que tienes en mente Diana?
***
- Diana. - su voz sonó como un susurro serpentean-te en medio de esa humedad y oscura habitación.
Le hice una reverencia y así me mantuve esperando una orden o un castigo. Tenerlo frente a mi no era algo que me intimidara, mucho menos que me pusiera a temblar. Tenia un monstruo por padre, un mestizo con complejos de sangre pura. Un loco desquiciado que quería gobernar el mundo mágico, alguien que mato a mi madre a sangre fría alejándome de lo que era mi familia.
– Padre.
– ¿Que te trae por aquí? – levantó el rostro para mirarlo, me mantengo firme ante la horrible imagen que es su vida.
– Necesito comentarle una idea.
– ¿Esa idea incluye que me destruyan?
– Esa idea incluye que usted vuelva al poder.
– Te escuchó.
ESTÁS LEYENDO
La hija de Voldemort
Fanfiction- Tu y yo no somos tan diferente, Potter. Tu vida sigue siendo un paraíso comparada con la mía que es un completo infierno, tu vives para acabar con y yo vivo por él y para él. Si yo sigo viva es gracias a él. Él mató a tus padres, así que lo ves co...