De la guerra, el odio y otros amores (Libro 1 de amores y otras aberraciones)

XXXIV

El miedo del masoquismo las carcome por dentro yo lo sé xD.

Así que solo disfruten mientras puedan :V 

Con amor Taylor

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8 de 10

Camila

—¿Cómo se llamaba esto?—le pregunté por milésima a Lauren mientras no dejaba de probar aquella pequeña fruta sin ninguna forma impuesta, de color rojizo con pequeños puntos amarillos y que tenía sus hojas como si fueran una corona. La ojiverde alzó la vista hacía mi dejando lo que estaba haciendo para ver a que me refería por lo cuál le señalé la fruta que estaba en mis manos y ella rió ligeramente por eso.

—Se llama frutilla —mencionó con una sonrisa mientras yo me comía de a poco la que estaba en mi mano, jamás había comido una igual y sabía deliciosamente dulce como si fuera capaz de derretirse en mis labios a través de cada mordida, frutilla me repetí una y otra vez porque cuando todo terminara no dudaría en comprar muchas de ellas para poder deleitarme todos los días comiéndolas.—Y espero que no te las hayas comido todas —afirmó quitándome el plato donde aún quedaban unas cuantas de ellas, ya que había pasado casi toda la tarde comiéndolas sin que Lauren se diera cuenta, debido a que ella estaba más concentrada haciendo la cena que viendo lo que yo estaba haciendo —Camila —frunció el ceño al darse cuenta que ya casi no quedaban —Pero si te las has comido casi todas —negué ligeramente a ello aunque sabía a la perfección que era culpable de su acusación, Lauren suspiró frustrada por mi respuesta y aunque tenía que admitir que había adquirido ese leve gusto de hacerla enojar porque ponía gestos como si fuera una niña pequeña, no dudé en buscarla y acercarme a ella para abrazarla y besar su cuello dejando que mi respiración se volviera loca solo por tenerla tan cerca y que mi piel se sintiera conforme ante el hecho de que amaba tenerla cerca de mí todos los días.