Semanas después de la boda, llegaron a nuestros oídos que la feliz pareja había vuelto de su luna de miel, ya que Isabella se había puesto enferma. Todos nos pusimos nerviosos ya que eso podía significar que el chupasangre la había mordido.
Jacob tonto de él, salió corriendo a ver lo que pasaba, y si la habían mordido, otra guerra comenzaría.
Horas después de irse Jacob empezamos a ver imágenes desordenadas de una Isabella pálida, ojerosa y con un bulto en el vientre. Ese monstruo la había dejado embaraza y la cosa que llevaba además de peligrosa, la estaba matando.
Cullen quería que le sacaran esa cosa, pero ella no quería y ahora estaba protegida por la rubia chupasangre a la cual se le había activado su instinto maternal.
Sam decidió que entonces sintiéndolo mucho debíamos acabar nosotros mismos con esa cosa, aunque con ello pereciese una humana, ¿que era una muerte con la masacre que esa cosa haría?
Cuando Jake supo la decisión de Sam, corrió fuera de la reserva, para avisar a los chupasangres, Sam dio la orden como alfa, pero Jake continuó corriendo sin mirar atrás, yo lo seguí para intentar detenerlo y Seth también corrió detrás de nosotros. Todo era normal, hasta que de pronto dejamos de escuchar voces en nuestras cabezas, eso era raro porque aún estábamos cerca de la reserva para no oírlos.
Volvieron a su forma humana, excepto yo que me quedé a los alrededores de la mansión, mirando si nos seguía la manada, pero todo era silencio.
Mientras Jake y Seth avisaban de lo ocurrido a los vampiros, yo decidí acercarme a un riachuelo que había cerca; y así lavarme un poco la suciedad de mi peludo cuerpo, mis tripas rugían de hambre, pero era asqueroso el sabor de los animales crudos, por lo que esperaría a cuando volviésemos a la reserva.
Con el paso de las horas Jacob, Seth y yo descubrimos que nos habíamos separado de la manada, por lo visto al ser Jake el verdadero alfa, al negarse a cumplir órdenes de Sam se proclamó alfa y eso quería decir que por primera vez había dos manadas en la reserva.
Para mí esa noticia me relajó ya que no tendría que ver a Sam, ni obedecerlo, ahora yo era la beta de Jake y al estar solo nosotros tres todo era más tranquilo y podía relajarme. Jake nos dijo que esto sería hasta que naciese la cosa y la matásemos, que él después se marcharía y volvería a haber una única manada.
Después de ese día las cosas fueron normales, digamos que la nueva manada vivíamos, aunque me doliese admitirlo, cerca de la casa de los vampiros, ninguno hemos vuelto a la reserva, solo Jake un día para avisar a mi madre de que estábamos bien.
De pronto un día las cosas cambiaron, Isabella Swan entró en parto, por lo que escuchamos desde fuera, Jake estaba con ella y una vez naciese se encargaría de matar a esa cosa, por mucho que ahora su marido vampiro lo quisiera. Casi todos los vampiros salieron de la casa a excepción del doctor y la pareja de Isabella. Todo estaba bien hasta que Jacob salió llorando de la casa, por lo visto Isabella no había soportado el parto y había muerto, enfadado entró a la casa en busca de la cosa asesina para deshacerse de ella.
Minutos después olí a la manada, avisé a Seth para que vigilase y con un aullido avisé a Jake de que el resto de la manada estaba aquí.
De forma apresurada salió Jake seguido de todos los chupasangres. Paul fue el primero en llegar, quería entrar a la casa para matar a la cosa, pero Jake se interpuso entrando en fase, fue en ese momento cuando las imágenes de Jake al ver a esa cosa o niña, llegaron a mi mente.
No lo podía creer, Jacob se había imprimado de ella y por lo tanto nadie de la manada podía hacerle daño, ya que sino dañaría a Jake. A la vez que yo pensaba eso, Jake les contaba lo ocurrido. Debido a esto todos volvimos a la reserva para avisar a los ancianos de ello y de la transformación de Isabella en vampiro.
Los ancianos ante tremenda noticia de la imprimación de Jake, la transformación de Isabella y la división de la manada en dos, no daban abasto. Al terminar la reunión todos nos fuimos a casa.
Lo primero que hice nada más entrar a casa, fue ducharme para volver a sentirme humana, ponerme ropa cómoda y tomar una gran cena.
Tenía pensado decirle a Sue que en dos semanas me marchaba de la reserva porque empezaban mis clases en la universidad de Michigan, pero decidí esperar a que las cosas se calmasen un poco esta semana y ya decírselo en el fin de semana tranquilamente.
Después de cenar, me despedí de Sue y Seth para ya sí descansar en mi cómoda cama.
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Mi vida patas arriba, la historia de Leah Clearwater
FanfictionLeah es una chica normal y corriente de 18 años, que vive en una reserva india llamada La Push junto a sus padres y su hermano pequeño. Desde hacía tres años salía con un chico llamado Sam; Él era todo lo contrario a Leah serio, con mal genio y mu...