Capítulo 2

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-¿Quieres venir a jugar ______?- Me dijo Jimin.

-Ammm sí- No estaba muy segura, no solía jugar mucho con otras personas.

Jimin me llevó a su cuarto, era grande y estaba lleno de juguetes y peluches. Ví uno que me gustó demasiado, era un panda muy bonito.

-Tu panda está muy bonito. Me encantan los pandas- Dije acercándome al peluche.

-Este me lo regaló mi mamá el año pasado- Dijo acercándose al peluche y tomándolo en sus manos -¿A que quieres jugar?- Me preguntó

-No lo sé, a que te gustaría jugar. Esque no conozco muchos juegos- Estaba avergonzada.

-¿Y si jugamos a las escondidas?- Empezó a sonreír, tenía la misma sonrisa de su mamá, sus ojos parecían ya no ver nada.

-¿Como se juega eso?- Estaba confundida.

-Es muy fácil, mira. Uno tiene que contar mientras se tapa los ojos y el otro se tiene que esconder. Si lo encuentran, pierde y si no lo encuentran, gana- Dijo muy ansioso.

-Está bien, suena divertido.

El se puso primero a contar, para que supiera cómo se jugaba. Yo corrí por muchos lados para poder encontrar un lugar dónde esconderme, hasta que decidí esconderme debajo de su cama. Empezó a buscarme y podía ver cómo caminaba por varios lados de su cuarto buscándome, solté una pequeña risa audible sólo para mí, hasta que sentí que me tomaron de un pie y me jalaron, haciéndome gritar un poco.

Era Jimin que me había encontrado, se puso arriba de mí y me empezó a hacer cosquillas. Estaba riendo, gritando y pataleando. El también reía mientras decía que era el mejor.

-Ya- No podía respirar de tanta risa -Para, Jimin, parar- Seguía riendo.

-No, hasta que digas qué soy el mejor- No me podía soltar y seguía riendo y gritando.

-¡Eres el mejor!- Estaba gritando.

Me dejó de hacer cosquillas y cuándo estaba agarrando aire, llegó su mamá con una sonrisa.

-______ tu mamá está acá abajo, esperando por ti- Dijo muy tierna la señora.

-Gracias, aho....- Me interrumpió Jimin.

-Que se queden a cenar mamá, por favor- Puso una carita de perro y me dió ternura.

-Está bien, deja le digo a la mamá de _____- Salió del cuarto.

-Quieren seguir jugando _____- Dijo Jimin.

-Solo si no me haces más cosquillas- Dije apuntándole con un dedo.

-Está bien- Dijo emocionado.

Seguimos jugando, creo que era muy mala en el juego, siempre me encontraba y yo no podía encontrarlo a él, estaba casi fastidiada. Hasta que llegó su mamá y nos dijo que ya estaba la comida. Bajamos y estaba mi mamá sentada en el sillón, me acerqué a ella y la abracé, la jalé del brazo y la lleve para presentarle a Jimin.

-Mira mamá, el es Jimin. Mi nuevo amigo- Dije contenta.

-Hola señora, mucho gusto- Dijo Jimin muy educadamente.

-Hola, mucho gusto- Dijo mi mamá.

Empezamos a comer y a platicar un poco. La mamá de Jimin había preparado Kimchi y estaba muy rico. Nos empezaron a contar que se habían mudado de Busan a Seúl hace un año por el trabajo del papá de Jimin y regresaron a Busan por el mismo motivo. Terminamos de comer y mi mamá y yo nos despedimos de Jimin y su mamá.

-Mamá, mañana puede Jimin a la casa y jugar- Le supliqué a mi mamá con los ojos. Jimin miraba a su mamá con ilusión y suplica

-Se podría, pero hay un problema- Dijo mi mamá.

-¿Cuál?- Dijimos Jimin y yo al unísono.

Mi mamá y la de Jimin comenzaron a reír. Jimin y yo nos mirábamos confundidos.

-Mañana tienen escuela chicos- Dijo la mamá de Jimin.

-Pero cuando nosotras platicabamos, mientras ustedes jugaban, nos enteramos que irán a la misma escuela- Decía mi mamá.

Jimin y yo nos miramos emocionados y empecemos a hablar de todo lo que haríamos. Mi mamá al ver nuestra emoción propuso que una semana nos llevaba mi mamá y la mamá de Jimin nos recogía y la siguiente semana a la inversa. Jimin fue el primero en decir que esa era una buena idea y yo por mi parte me sentí feliz de tener amigos, ya que nunca se me dió ser amistosa.

Mi mamá y yo salimos de la casa de Jimin y nos fuimos a la de nosotras.

Nos Volvemos a Encontrar |Jimin, Hoseok Y Tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora