Nos Volvemos a Encontrar |Jimin, Hoseok Y Tú|

Capítulo 50

-¿Cuándo vamos a anunciar nuestro compromiso?- Dijo Hoseok.

-Primero tenemos que avisarle a nuestros padres- Me recoste en sus piernas.

-Tienes razón- Me jaló un poco más hacía él.

-Yo opino que hablemos primero con tu familia- Dije en un susurro.

-¿Por qué?- Me contestó entre risas.

-Porque siento que no le caigo muy bien a tu hermana- Le hice un puchero.

-Eso no es cierto. A demás sí yo soy feliz, ella es feliz- Me hizo el mismo puchero que le había hecho yo y comencé a reír.

-Está bien, aún así. Primero tu familia- Seguí riendo.

-______- Habló con ternura.

-¿Qué sucede?- Intenté calmar mi risa.

-Te he dicho que te ves hermosa cuando ríes- Me sonrojé y me levanté de sus piernas.

-Hoseok, ¿Qué haría sin tí?- Me acerqué para besarlo, pero después de unos segundos se separo de mi.

Con sus manos tomó mis mejillas mientras seguíamos a milímetros de distancia. Me acarició con mucha ternura y me delineó el labio con su pulgar.

-Probablemente no pasaría ésto- Dijo con malicia y me besó de nuevo.

Sentí que el ritmo de aquel beso aumento sin previo aviso y yo sólo me dediqué a seguir con ese beso y disfrutar. Sus manos no se habían separado de mis mejillas haciendo que no me separara de él.

El calor en la sala comenzó a aumentar al mismo tiempo que el de mí cuerpo y no podía quedarme quieta, así que en menos de un segundo me senté a horcadas sobre él y pude sentir su erección cerca de mi intimidad y empecé a besarle el cuello mientras movía mis caderas encima de él.

-Que bueno que te conocí- Dije cerca de su oído y le dejé un pequeña morida mientras regresaba a su cuello.

-El amarte tiene sus ventajas- Me susurró con esa voz ronca que tiene cuando está excitado.

Seguí moviendo mis caderas encima de su miembro aunque eso nos provocará algo de desesperación. Me separé de su cuello y pegué mi frente a la suya.

-¿Cómo cuales?- Dije susurrando y con la respiración acelerada.

Tomó mi trasero con ambas manos y me levantó para ponerme encima de la mesa y se colocó entre mis piernas.

-Está- Me dijo mientras volvía a besarme con desesperación.

Se separó de una forma inesperada de aquel beso que estaba disfrutando mucho, y comenzó a desnudarme de la cintura para abajo. Él de igual manera se bajó el pantalón y el boxer dejando a mi vista una enorme erección.

Sin pensarlo dos veces entró en mí y me colapse en la mesa disfrutando de todo lo que había dentro de mí.

-Ah Hoseok- Gemí en alto al sentir la fuerza que tenían sus embestidas.

Lo tome del cabello y lo jalé a mí para poder besarlo con la misma intensidad en la que entraba y salía de mí haciendo que gimiera en sus labios. Su lengua jugaba con la mía y eso me hacía que el momento no acabara, me sentía más excitada que otras veces.

-No vallas a parar- Dije separandome un poco de sus labios.

-Aún no- Me contestó y volvió a devorar mis labios.

Sentí que llegue a mi orgasmo, pero Hoseok aún no llegaba. A las 3 embestidas más el llegó y colapsó en mi pecho.

Nuestras respiraciones tardaron más  de lo común en regularse. Hasta después de un rato pude hablar con un poco de continuidad.

-¿Eso que fue?- Dije con agitación y risa.

-Eso se llama "hacer hijos sin hijos"- Dijo entre risas.

-Hoseok- Me reí y me levanté de la ¿Mesa?.

-Es la verdad, pero si quieres tener hijos sólo no tomes la pas...- Le dí un golpe en el brazo.

-Hoseok, ¿Por qué la mesa?- Dije mientras me ponía mi ropa.

-Porque estaba cerca- Dijo con inocencia y se acercó a mí para abrazarme.

-Pues te toca limpiarla- Hablé con autoridad.

-Está limpia.

-Hoseok ahí comemos y acabamos de hacer el amor ahí.

-Tienes razón- Me besó y se fue.

-Ey!- Grité -¿A dónde vas?.

-A limpiar la mesa- Me gritó desde la cocina.

-Hoseok- Me acerqué a donde estaba -Voy a llamar a tus papás para que vengan a comer.

-Claro, mientras tú llamas, yo limpio- Le dí un beso y me fuí hacía el teléfono.

Marqué a la casa de los padres de Hoseok. Sonó tres veces y su mamá me contestó.

¡Hola!.

Hola, habla ______.

¿Cómo están hija?.

Bien gracias ¿Y ustedes?.

También bien. Marcaba para hacerles una invitación.

Claro hija, de que se trata.

Es una invitación para que vengan con nosotros a comer el fin de semana.

Claro que sí, ahí nos vemos.

Gracias, nos vemos el sábado.

Adiós, besos a los dos.

Colgué el teléfono y me fuí con Hoseok que estaba en mesa limpiandola.

-Hopie, el sábado vienen tus papás a comer- Dije con algo de aegyo.

Se acercó a mí y me tomó de la cintura.

-Entonces el sábado le decimos a mi familia ¿Y a la tuya?¿Para cuando?.

-El Domingo o también el sábado. No sé, tú dime- Puse mis manos en su cuello.

-A todos juntos te parece- Dijo de una forma muy tierna.

-Si- Le dí un pequeño piquito.

NA:

Hola chic@s espero que se encuentren bien... El motivo de la nota es sólo para saber una cosa.

¿Hay alguien de aquí que sea de México? Y si es así, ¿Cómo se encuentran?. Yo sólo espero que bien y esperemos que todas las personas y niños afectados por los temblores salgan a adelante y ayudar con lo que más se pueda.