Nos Volvemos a Encontrar |Jimin, Hoseok Y Tú|

Capítulo 24

-Nam- Llamé su atención y se giró a mí dirección -Sobre lo de hace ra...- Me puso un dedo en mis labios y me interrumpió.

-No te preocupes, nos dejamos llevar- Habló sin importancia y me sentí aliviada.

-Haremos cómo si ésto no hubiera pasado.

-Si así quieres, no hay problema- Me sonrió y yo hice lo mismo.

-Gracias- Se dió la vuelta y lo detuve -Espera- Me miró desconcertado.

-¿Qué sucede?- Preguntó curioso.

-Crees que en éstos días puedas pasar a mi casa- Dije tranquila y el alzó una ceja con picardía.

-No seas mal pensado- Le dí un golpe en su brazo -Lo digo por la puerta de mi mamá- Se pasó una mano por su cabello y se empezó a reír.

-Claro que sí, pasó mañana. ¿Te parece?.

-Si, está bien. Muchas gracias por todo y cuando pueda te pago lo de la puerta.

-Pero si ya me pagaste- Alzó sus cejas y me dió una nalgada.

-Oye- Alargue la palabra -Quedamos que ésto no pasó- Lo señalé y le solté un golpe.

-Bueno ya- Alzó sus brazos en forma de rendición -Vamonos que si no vamos a perder otra hora- Me jaló de mi brazo lastimado.

-Cuidado- Me quejé -Aún me duele- Me soltó y me sobe.

-Perdón- Se apenó.

Nos reímos un rato y cada uno se dirigió a su respectivo salón. Las clases se me fueron más rápido y eso me agradó, mientras más rápido llegará a mi casa, más rápido estaría con mi mamá. Y así fue, terminaron las clases y salí disparada, no pude ni despedirme de Jungkook o de los hermanos Kim, para ser sincera no me importaba mucho, tenía prioridades.

Llegué a mi casa y me di una baño rápido, me puse un pantalón y blusa holgados y bajé a la cocina para hacerme un sándwich e irme al hospital. Tomé un taxi y llegué en 20 minutos aproximadamente. Me dirigí al cuarto de mi mamá y ahí estaba ella dormida, se veía tranquila y hermosa cómo siempre a pesar de no llevar maquillaje y estar con cables al rededor.

Me acerqué a su cama y recargué mi cabeza a lado de su mano y cerré mis ojos un momento hasta que llegó el doctor.

-Ya tenemos los resultados- Me informó. Y ambos salimos del cuarto.

-Y qué sucedió. Dígame todo, porfavor- Exigía con desesperación.

-El tumor es benigno- Sentí un alivio en mi alma, pero sabía que faltaba más -Desafortunadamente no se puede operar, debido a que está ubicado en una parte muy sensible y se corren varios peligros si se procede tal cómo el perder la vista o la vida- Mi dolor volvió.

-¿Eso es todo? No sé puede hacer nada- Mi voz era una combinación de dolor, coraje e impotencia.

-Podemos iniciar un tratamiento y esto hará que el tumor no se siga expandido.

-Mi mamá ya lo sabe- Pregunté en voz baja.

-Si, en cuanto tuvimos los resultados, se le informó- Dijo el médico.

-Y qué dijo ella.

-Dice que no quiere vivir atada al tratamiento- Dijo el doctor algo apenado -Permiso tengo que atender otros pacientes- Hizo una reverencia y yo hice lo mismo y el se retiró.

Cómo es posible que mi mamá piense así. Voy a tener que convencerla. Me volví a meter a la habitación y ya estaba despierta y me acerque a ella.

-El doctor dice que no quieres tomar el tratamiento- Dije desanimada y enojada.

-Así es, no quiero vivir así- Me dijo sería.

-Pero mamá, si no lo haces dice el doctor que las cosas irían empeorando más.

-Lo sé, pero hija entiendeme. El poco o mucho tiempo que esté aquí- La interrumpí.

-No mamá, yo te necesito, por favor- Mis lágrimas caían ante mis súplicas -No te atrevas a dejarme tú también- Rompí en llanto al igual que ella.

-Hija, no te pongas así, sabes que lo que más quiero es que estés bien- Me acariciaba mi mejilla.

-Estaré bien si tú te quedas conmigo y eso incluye el tratamiento- Besé la mano que se encontraba en mi mejilla.

-No soporto verte así, así que empezaré con el tratamiento- Me abalace sobre ella y llene su cara de besos.

-Gracias mamá- La seguí besando y una enfermera entró.

-Voy a revisar a la señora, necesito que salga- Asentí con la cabeza y le dí otro beso a mi mamá antes de salir de la habitación.

Me salí del cuarto y me encontré cara a cara con Hoseok, lo cuál me hizo ponerme nerviosa y empecé a temblar.

-______ estás bien- Me preguntó preocupado.

-¿Ah? Ammmm s...si- Estaba tartamudeando.

-¿Segura? Estas temblando- Puso sus manos en mis hombros y el temblor aumentó

"Carajo Hoseok, no me toques que por eso tiemblo" Hablé en mis adentros.

-Si, sólo que me asustaste- Dije apenada.

-¿Entonces yo te pongo nerviosa?- Me tomó de la cintura.

-No dije eso- Quise alejarme de él, pero no me dejó.

-Entonces- Se acercó peligrosamente a mí.

-Hoseok- Me notó incómoda y se alejó un poco.

-Perdón- Me soltó y rasco la cabeza desesperado -______ siento mucho todo ésto- Besó mi frente y se dio la vuelta para irse.

-Hoseok- Grité, pero no volteó y siguió su paso.