No es fácil ser un semidiós

Percy es un héroe e intentan asesinarlo. "James"

—Lo siento amigo. En verdad estoy arrepentido de lo que hicimos Joshua y yo. Por favor perdóname— me suplicó Lurygon—. Te juro que no sabía que estaba haciendo. Tal vez fue influencia de violencia que irradia mi padre cuando hay guerra. Pero te lo ruego, perdóname.

Yo lo miré a los ojos, estaban llorosos, entonces estaba diciendo la verdad. Lo cierto es que quise perdonarlo desde la primera vez que dijo que lo sentía, pero Gab me dijo que deberíamos averiguar si de verdad estaba arrepentido. Y así era, gracias a Apolo.

—Tranquilo amigo, todo está perdonado— me acerqué y di un abrazo—. No dejaremos que una pequeña afrenta nos separe, ¿cierto, amigo?

—Claro que no— respondió él luego de secarse las lágrimas.

Después de los abrazos y más disculpas nos reunimos con los demás y hubo más abrazos. Joshua se puso rojo como tomate cuando se disculpó con Mary, y Edward perdonó a regañadientes a Lury por destruir su Partenón de arena.

Percy, Annabeth y Grover regresaron ese mismo día. Nos relataron todo lo que les sucedió durante esos diez días:

Primero hicieron explotar un autobús de alguna forma, los semidioses somos propensos a hacer volar cosas por accidente. Después se encontraron con la gorgona Medusa, con el sobrenombre de tía Eme y Percy la decapitó.

Luego un poodle les consiguió un boleto de tren hasta que llegaron al Gateway Arch, lugar que Annabeth quería conocer. Ahí encontraron a Equidna, la madre de los monstruos y uno de sus hijos, Quimera. Fue Quimera quien provocó la explosión, envenenó a Percy, pero él saltó desde el punto más alto del Gateway Arch hasta el río Misisipi, pero sobrevivió y se curó del veneno. Supongo que el agua es buena para los hijos de Poseidón.

Después se encontraron con Ares, el padre de Lurygon, quien les invitó unas hamburguesas y les encargó recuperar su escudo de un parque de atracciones abandonado, lo olvidó en el túnel del amor cuando tenía una cita con Afrodita, así que Percy y Annabeth fueron a recuperarlo. Pero el túnel resultó ser otra trampa, preparada por Hefesto para humillar a Ares y Afrodita nuevamente, pero los dos semidioses se las ingeniaron para escapar de ella, una trampa para dioses probablemente los habría matado. Ares les sugirió que tomarán un camión a Las Vegas. Ellos liberaron unos animales que estaban siendo transportados en el camión de manera ilegal.

Al llegar a la ciudad más divertida del mundo, Las Vegas, se hospedaron en el Hotel Casino Lotus, con seis días de sobra para llegar. Planeaban quedarse sólo un día, pero después de unas cuantas horas de diversión se dieron cuenta que era una trampa, supuestamente el tiempo no afectaba a quien estuviera dentro del hotel y creaba una ilusión de que el este transcurría de manera normal, cuando en realidad, fuera del hotel pasaba más rápido, o algo así, la verdad me costó mucho trabajo comprender cuando lo explicó Annabeth. Por fortuna ellos solo se quedaron cinco días, pero había gente que llevaba treinta años o más dentro de ese lugar.

Después llegaron a Los Ángeles y cometieron el error de entrar a una tienda de camas de agua donde se encontraron con Procrustes "El Estirador", pero Percy rescató a Annabeth y Grover, y venció a Procrustes. Finalmente llegaron al Inframundo, se encontraron a Caronte, hijo de Erebo y Nyx, y después de unas cuantas promesas los llevo a través el río Estigio hasta la entrada del Inframundo custodiada por Cerbero el perro tricéfalo. Lograron pasarlo gracias a que Annabeth jugó a la pelota con él.

Conocer a Hades y pedirle que regresara el rayo no salió como esperaban. Para empezar, no había sido Hades quien había usado a un héroe para robar el rayo maestro de Zeus y además a él también le habían robado algo, su yelmo de oscuridad. Al parecer el ladrón había estado ocupado. Antes de que Hades los matara, los tres escaparon del Inframundo con unas perlas que les regalo una nereida y al llegar a la superficie se encontraron cara a cara con el dios rebelde: Ares.