Primera Vez

3.6K 250 16
                                    


(Atención: este capítulo tiene escenas eróticas y lenguaje adulto)


Recomendación para escuchar mientras lees este capítulo: Sarky Puppy- Lingus. https://www.youtube.com/watch?v=L_XJ_s5IsQc

PRIMERA VEZ

Julieta siempre estaba nerviosa desde que conoció a Sebastian Fuentes Otero una noche de octubre cuando un evento desafortunado desencadenó una cita inesperada donde conoció a una persona misteriosa que sembró nuevas sensaciones en la tranquila alma de una joven de veintitrés años.

Cuando eligió la lencería que llevaría puesta esa noche sabía que no iba a dar marcha atrás.

Miró el reloj una y otra vez después de pasadas las ocho de la noche dando un suspiro, ¿Cuándo le iba a escribir?

Decidió darle un largo baño esperando que eso la relajara, aunque su inquietud no le daba tregua.

Caminó por el largo pasillo que daba a su habitación dando las gracias porque su compañera no estaba y podía meditar acerca de cómo actuar cuando se encontrara con Sebastian.

El conjunto de ropa interior blanco inmaculado con encajes parecía llevar la palabra "virgen "por todos lados, suspiró y luego de vestirse mirándose al espejo agradeció que era una agradable noche para poder lucir su vestido de verano favorito.

*Hola, en un rato llego a mi casa y te escribo*

El mensaje llegó después de las diez, ¿Por qué tan tarde?, ah sí...ella estaba saliendo con un músico y casi siempre tenía conciertos los fines de semana.

Cuando Sebastian le volvió a escribir habían pasado las doce de la noche y Julieta pidió un taxi con las piernas temblándole como si fuesen de gelatina.

El trayecto no era muy largo así que la joven no pudo meditar acerca de lo que iba a ocurrir esa madrugada.

Bajó del vehículo y le envió un mensaje a su cita indicándole que estaba afuera, un par de minutos después pudo ver por los cristales del edificio de la planta baja como el hombre caminaba lentamente hasta su encuentro.

-Hola.

Alcanzó a decir y le saludó con un fugaz beso en la mejilla, ahora no parecía un autómata ni tenía la mirada aburrida, Julieta suspiró, esta vez no quería escapar de su apartamento como en la cita anterior.

Luego de subir por el ascensor y entrar a la casa del músico la joven aun moría de miedo y al quedar estática en la sala vio como Sebastian tomaba una botella de vino y dos copas para invitarla a entrar en su habitación.

Cuando los pies de Julieta decidieron seguir las instrucciones descubrió un acogedor dormitorio y recordó que seguía queriendo saberlo todo acerca del misterioso hombre que un día conoció en la red.

El Maestro del SonidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora