Julieta es una joven estudiante de abogacía con persistentes sueños de cambiar el mundo.
Astuta, ansiosa, filantrópica, feminista, gran devoradora de libros y con creencias filosóficas sumamente definidas la chica construía su propi...
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(Esta es la foto original del pastel de cumpleaños de Sebastian, como siempre me piden pruebas de los hechos reales quizás esta sea la prueba fehaciente de que Julieta es mejor escritora que pastelera jaja, disfruten de la lectura.)
EL CUMPLEAÑOS DE SEBASTIAN
Si Julieta Mollinari estaba viviendo una época dorada junto con su amante y ahora también amigo no podía imaginar lo que vendría después.
Lo malo de haber tenido tanta atención acumulada luego de pasar meses a cuentagotas era que esta separación debido a las vacaciones de invierno y la gira de Sebastian le generaban ansiedad.
"¿Oh Julieta, como puedes ser tan tonta?" se decía a si misma una y otra vez cuando la ansiedad golpeaba a la puerta de sus nuevos pensamientos igual de alborotados, pero ahora felices y sin tanta incertidumbre acerca de los sentimientos que le generaba el hombre que le causó tanto insomnio.
Pero era un hecho que Julieta nunca sería una mujer desestructurada y tranquila, siempre estaba alerta, ansiosa, siempre quería estar un paso delante de todo y próximamente acontecería algo de suma importancia para la joven de veintitrés años, el cumpleaños de Sebastian número veintinueve.
Los días siguientes fueron un caos de estudio y ansiedad debido a que tanto ella como Peter preparaban el examen clave para poder cursar el consultorio jurídico en el siguiente año y así poder consagrarse como abogados.
-No se como puedes leer sobre accidentes laborales con una sonrisa de bobalicona y luego tomar tu computadora para calcular despidos, yo estoy padeciendo cada párrafo que leo sobre esta aburridéz.
Julieta apartó la vista de sus apuntes notando que su amigo se frustraba demasiado, estaba sumamente preocupado por aprobar, hace mucho tiempo no se sentía tan feliz, quizás eso ayudaba a que la ansiedad disminuyera un poco.
- ¿Aburridéz?, esa palabra ni siquiera existe en el diccionario, pensé que estudiar aquí te relajaría, ya sabes que vivo con muchas universitarias sexys.
Peter rodó los ojos y bebió un poco de café, las chicas ya no estaban en sus primeros pensamientos del día, se despertaba pensando en el derecho del trabajo y se dormía escuchando los audios que Julieta le enviaba sobre posibles preguntas de examen.
-Tu estás así por el músico, mi antigua amiga Julieta estaría arañando las paredes, llorando por no haber exonerado porque el examen es obligatorio.
La joven sonrió, no podía decir que su amigo mentía, el hecho de regresar a cierto orden emocional una vez que Sebastian dejó de ser un grosero la calmó súbitamente, ahora solo pensaba en estudiar y en las fotos que le enviaría su chico desde Europa mientras tocaba en algunos países de ese continente.
