Capitulo 2

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Deja de hiperventilar, deja de hiperventilar, deja de hiperventilar.

–Que, ¿Qué quieres tú? –Illán sonríe de lado y se aleja de mi cara.

–Nada, me gusta ver cómo te sonrojas, me encanta ver cómo te incomodas con mi cercanía –bufo y me doy media vuelta para ir junto a los demás.

–Como quieras –una risita baja se escucha detrás de mí y pronto sus manos están tomando mi cintura.

–Eres muy bonita, Lucia –su nariz sube por mi cuello y me alejo rápidamente.

– ¡No hagas eso! –mascullo escandalizada, él sonríe. –Tomar a las personas a tu antojo y rozar tu nariz en la piel, que incómodo.

–Lucia, ¿Tanto te pongo nerviosa? –su voz de idiota arrogante me molesta y comienza a cabrearme.

– ¡Ay por favor! No te sientas especial por hacer eso conmigo, ni que fuera primera vez que alguien roza su nariz en mi piel –la expresión sorpresa de Illán me trae oleadas de satisfacción, pero la verdad es que me escuche un tanto experimentada y tengo cero en eso.

Él pasa a morder sus labios y me mira de arriba a abajo, por mi lado comienzo a sentirme un poco incomoda por su mirada y sus dientes mordiendo su labio inferior. Sonríe de lado y se marcha junto a los demás al comedor, yo me quedo asimilando un poco todo y arreglo mi cabello para también ir junto a todos.

Veo que solo hay un puesto en la mesa y es junto a Illán, nadie me mando a quedarme hablar estupideces con él, ahora debo mirarlo, escucharlo y sentirlo a centímetros de mí. Me acomodo en mi silla y sirvo algo del rico almuerzo que preparo Mamá y Rubén.

–Margaret, nos alegra tanto conocerte, no imaginas lo tanto que nos hablaba Lorenzo de ti, estaba muy entusiasmado de traerte a casa para conocerte –mamá rompe el hielo en la mesa y comienza su charla con Margaret.

En mi mente solo se escucha la habladuría de todos y solo me entretengo en mi comida, llevo un pedazo de pollo a mi boca y siento los ojos del idiota sobre mí, volteo y sin dudas me está mirando.

– ¿Cierto Lucia? –la voz de Lorenzo me saca de mi trance y asiento.

–Si claro, disculpa ¿Que me decías? –Ricardo y Rubén se burlan de mí, saben lo despistada que soy y Lorenzo los acompaña.

–Nena, le estaba diciendo a Margaret que estabas ansiosa de conocerla –sonrió y asiento.

–Si muy ansiosa, por fin uno de mis tres hermanos se decidió a traer una novia y formal, ansiaba tener una cuñada, una amiga –Margaret sonríe y asiente.

–Gracias Lucia, yo también deseaba mucho conoceros, y por supuesto ser tu amiga –sonrio y el almuerzo se torna mejor y todos hablan de cualquier cosa.

Yo me entretengo escuchando y riendo con todos hasta que un pinchazo en mi pierna logra que salte de la impresión, veo en mi pierna y es este chico quien tiene un tenedor en su mano y rápidamente lo cambia por su móvil.

¡Quiero proponerte algo!

Una nota en su móvil me toma por sorpresa y subo mi mirada, nos miramos por un corto momento, vacilo por unos largos segundos y termino por asentir solo para él, sin que nadie nos descubra. Siento un cosquilleo en mis manos y no entiendo por qué, es como curiosidad por lo que me dirá este idiota, y Dios, detesto ser tan curiosa.

¿Ahora que quiere? ¿Que se traerá entre manos conmigo?


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¡Que Comience el Juego! ★ (Bilogía Juegos de Amor #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora