–Chicos, sé que recién está comenzando su último semestre de Psicología, como vuestra coordinadora de estudios, tendremos una reunión el jueves a las 10:30 am en el auditorio de la universidad –tomo algunos apuntes anotados en el pizarrón y vuelvo la mirada a la coordinadora.
– ¿Disculpe Señorita Gómez, pero de que se trata esa reunión? –uno de mis compañeros hace la pregunta del millón.
–Sobre un congreso de Psicología, y hablaremos también de las pasantías de ustedes, eso quiere decir que irán a algún psiquiátrico u hospital donde desarrollaran todo lo que han aprendido en estos años –comienza a interesarme el tema y levanto mi mano.
– ¿Es obligatorio? –sus ojos cafés caen sobre mí y niega.
–Para nada, solo para aquellos que quieran ir al congreso, las pasantías es lo de menos eso está más claro en su historial de estudios, pero si se dirán los lugares donde la harían, algunos podrían decidir dónde ir aplicarlas, otros simplemente donde nosotros los enviemos.
–Oh, vale...
–Me gustaría que asistiera señorita Cadaval –le miro y asiento.
Después de unas cosas más, ella se marcha y todos comienzan a guardar sus cosas, hago lo mismo y salgo de inmediato del aula, todos están entusiasmados, por mi lado estoy tranquila. Quizás decida ir al congreso, una semana lejos de casa suena bien, y me interesa saber dónde serán nuestras pasantías de fin de curso.
– ¡Hey Lucia! Espera –volteo a ver y es uno de mis compañeros de clase.
–Oh, hola Matías –me sonríe y asiente.
–Ten –me entrega un volante, que tiene dibujadas unas botellas espumeantes –Abra una fiesta en casa de Teo esta noche, puedes ir con quien desees –lo miro y niego.
–Odio a ese infeliz arrogante, pero gracias por invitarme –ríe y niega.
–Lucia, es nuestro último año, debemos disfrutar de las fiestas, anda, ¿Vale? Vamos, no dejes de disfrutar por Teo –este me guiña y pasa a marcharse, asiento, vuelvo la mirada al volante y la detallo.
No tengo ánimos de ir a una fiesta en casa de Teo, pero pensándolo bien, Matías tiene mucha razón, es nuestro último año y debería ir y hacerle unas de mis jugarretas a Teo como muestra de mi eterno odio hacia él. Guardo el volante y tomo mi móvil, le marco a mi amiga, al contestarme le digo lo de la fiesta, quien de inmediato acepta ir en cuanto le comento donde será realizada, ella disfruta hacerle la vida infeliz a Teo y yo disfruto como ella lo hace sentir más miserable.
Al finalizar la llama, me pongo de camino por los pasillos de la universidad, unas chicas dicen un montón de cosas mientras ríen y sus miradas van a las afueras, no les doy importancia y salgo para tomar camino a casa. Un coche muy conocido esta estacionado y con música un poco alta, el chico del coche baja, pantalones rasgados, camiseta color roja con rayas negras, lentes de sol, cabello desordenado, sus tatuajes deslumbrando y su arete brillando...
–Illán...
Susurro su nombre solo para mí y lo veo caminar hacia mí, pero en un momento su caminar se desvía a la derecha y volteo a ver de qué se trata... Su ex novia.
–Veo que ya no es tu ex novia –vuelvo a susurrar y mi mirada está en ellos, me nota y sonríe con arrogancia.
Este idiota camina hacia Graciela y ella sin más lo rodea con sus brazos, se dan un beso frente a todos, frente a mí, suspiro y paso colocarme mis lentes de sol y volteo al frente nuevamente. En un segundo unos brazos me rodean por la cintura y volteo a ver de quien se trata, aunque si, su aroma me deja saber quién es mucho antes de voltear.
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¡Que Comience el Juego! ★ (Bilogía Juegos de Amor #1)
RomansaLa vida es un juego, ¿Pero el amor también? A la vida de Lucia Cadaval pronto llegara el juego mas intenso, ella sera consciente de todas las reglas del juego, pero solo una se le pasara por alto, 'No te puedes enamorar'. Nunca sabes si terminaras...