—¿Dónde estabas hija? —entró mi padre a mi habitación.
—¿Cómo? Estaba dormida papá —dije extrañada.
—No hija, hace poco vine y no te vi.
—Qué raro. Por cierto papá, tuve un sueño bastante extraño —le dije un poco confundida.
—Luego me cuentas hija, en el hospital te están llamando desde hace rato —dijo algo misterioso.
—La cirugía, ¡Lo había olvidado! —me despedí de papá.
Me levanté y me fui al hospital, iba un poco confundida pero tenía que llegar rápido. Entré al hospital y estaban todos en la sala de operaciones, sólo faltaba yo.
—Hasta que llegas —me dijo Lisa, mi mejor amiga.
—Discúlpenme todos por el atraso, comencemos con la cirugía.
Al cabo de 7 horas, terminamos con la cirugía, por dicha el paciente salió bien y se recuperará pronto. Me sentía un poco más tranquila, aunque una cosa en el corazón me decía que algo no estaba bien...
Me dirigí a la sala de descanso, allí estaba Lisa junto a Mario, mi mejor amigo.
—Chicos, hay algo que tengo que contarles. Es un poco confuso —les dije.
—Adelante amiga, sabes que puedes confiar en nosotros —dijo Lisa.
—Sí, dinos amo... quiero decir amiga —dijo Mario, quien está enamorado de Lisa desde que eran pequeños.
—Bueno, presten atención.
Les explique todo lo que sucedió, a lo que me dijeron que se trataba sólo de un sueño.
—Tranquila —dijo Lisa bastante segura— A veces todos tenemos sueños raros, ¿o no Mario?
—Sí, bueno es que... —dijo Mario un poco dudoso.
—¿Qué pasa Mario? —dijo Lisa.
—Es que yo no creo que sea un sueño...
—¿Porqué lo dices? —dijo Lisa.
🚨ATENCIÓN SE NECESITAN CON URGENCIA MÉDICOS CIRUJANOS EN LA SALA 104. ACABA DE ENTRAR UN HOMBRE QUE SUFRIÓ UN PARO CARDIACO. 🚨
—Luego seguimos hablando, hay que volver a la sala de operación —dije.
Corrimos hasta la sala 104, donde estaba el paciente grave. Entramos a la sala, el hombre estaba tendido sobre la camilla, tenía muchos aparatos sobre él, lo que dificultaba ver su rostro, aunque, se me hacía conocido.
—Layla será mejor que esperes afuera —me dijo mi jefe.
—¿Porqué lo dice señor jefe? —dije un poco dudosa.
—Layla, el señor que acaba de sufrir el paro cardíaco es tu padre.
ESTÁS LEYENDO
Tanburg
Science Fiction¿Te imaginas poder vivir en un mundo que realmente no existe? Layla Watson, de veinte años, es una joven doctora cirujana. Vive con su padre August, de cincuenta años, un reconocido escritor de los años ochenta que actualmente tiene una relojería en...