- ¿Me ayudas? – pregunta Millard mientras sostiene un montón de mantas que dejan ver solo sus cejas
- Claro, pásamelas
- Gracias – se pasa la mano por la frente y suspira – no creo que hubiera llegado más lejos
- ¿Dónde las dejo?
- En el sillón del living
- Hecho
Subo los escalones, me limpio los pies en la alfombra y cruzo el umbral de la puerta. Silbo una canción que, si no mal recuerdo, la escuché cantar a uno de mis reclutas el día que llegamos a Francia. El pobre estaba feliz...que bruto. Pero a pesar de todo, la canción era pegadiza.
Detuve mis silbidos cuando escuché unos susurros que cada vez se volvían más audibles
- Es lo que me dijeron. Desapareció y esperan lo peor, de hecho es lo que daban a entender en su carta. – un suspiro -Pensé que esto nunca sucedería de nuevo – decía una voz. Estoy casi seguro de que es Miss Avocet
- ¿Están completamente seguras de que eran ellos? – desde que la voz hizo énfasis en el "ellos" mis oídos se agudizaron
- No completamente, pero es lo más fiable ¿Cuándo has escuchado que una ymbryne se escape sin dar aviso? – se hizo un silencio
- ¿Qué debemos hacer?
- Deberíamos pasar más desapercibidos hasta que aclaren el asunto
- Por ahora no le diremos nada a los niños...y espero nunca esté en la necesidad de hacerlo ¿Has sabido algo de tu bucle?
- Nada desde la última carta. Estaban bien hasta ese entonces. Si no recibo alguna carta de aquí a pasado mañana creo que me veré en la necesidad de dejarte querida – definitivamente es Miss Avocet hablando con Alma
- No hay problema, los niños son la prioridad – se hace un nuevo silencio y yo pego más mi oreja a la puerta. De repente esta se abre de golpe y yo me quedo congelado luego del susto, pero en una milésima de segundos me doy vuelta y trato de alejarme lo más rápido posible, casi al ritmo de mis pulsaciones
- ¿Chris? – la voz de Alma me detiene en mi escape, me deja un momento quieto y de espaldas mientras trato de inventar algo. Me doy media vuelta y me encuentro con el entrecejo fruncido de Alma, que parece estar sugiriendo posibles razones para que yo esté aquí. Se relaja cuando ve el montón de mantas - ¿Sabes dónde dejarlas?
- En...el sillón...del living – dije, como si dudara hasta de la misma humanidad
- ¿Estás bien? – Alma vuelve a fruncir el entrecejo y se acerca
- Sí, solo son reacciones post pesadillas
- ¿Estás seguro?
- Si – le sonrío y ella se contagia – ahora si me permites debo hacer un encargo – digo mirando las mantas
- Adelante – dice luego de echarse a un lado
Dejo las mantas en el sillón con un suspiro. Estuve a punto de ser descubierto espiando ¿Qué acabo de escuchar? ¿Quiénes eran "ellos? Fueran lo que fueran algo no está bien, y no presagia algo mejor
Capítulo corto, lo sé, pero es debido ha que el siguiente viene MUY pronto
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Miss Peregrine y el extraño
FanfictionMiss Peregrine la madame más querida por los peculiares habitantes de una pequeña isla... ¿Qué hubiera pasado si la historia fuera distinta?¿Si hubiera llegado un militar que hubiera descubierto que no era normal? ¿Qué pasaría si ese militar hubier...