Capítulo 25

498 53 7
                                    


- Bienvenido a nuestro lugar sagrado capitán – dijo Alma dándome la bienvenida

La verdad es que me cuesta mantener la mandíbula superior pegada a la inferior...es el paraíso; Una cascada inmensa cae sobre un lago de aguas cristalinas que te deja ver cada piedra que tiene en su base. Detrás del inmenso caudal se puede vislumbrar una muralla de piedras musgosas, que, por el incesante paso del agua nunca están del todo secas. El pasto y los árboles bordean el lago con perfecta simetría. Praderas llenas de coloridas flores se extendían hasta donde alcanza el horizonte...Es simplemente una maravilla

El ruido del agua cayendo me dio un escalofrío. Lo único que falta es un arcoíris en el cielo y delfines saltando para que fuese la imagen más cercana que he visto del Paraíso.

- Wow... - es lo único que pudo salir de mi boca. Un grito me sacó del trance

- ¡Vengan niños! ¡Tenemos que sacarnos una foto! – me quedé en el mismo lugar mientras los demás se agrupaban. Miss Avocet me miró y puso los brazos en forma de jarro - ¿Qué estás esperando?

- Que se saquen la foto – la mayoría de los peculiares se rieron y negaron con la cabeza

- Todos los que vienen al lugar tienen que sacarse la foto Chris – dijo Alma con una sonrisa

- Ven aquí – dijo Claire invitándome con un movimiento de su mano

Con una sonrisa y con un trote me puse entre Claire y Bronwyn. Una felicidad tremenda se dispersó por mi cuerpo.

- ¡Ya! – dijo Miss Avocet mientras corría hacia el grupo. Luego de unos segundos un click indicó que la foto ya había sido tomada, todos festejaron.

- Chris, tú vas a ser el responsable de ir a revelar las fotos

- Sin problema, mañana mismo estarán en sus manos Miss Avocet

- ¡Ahora todo el mundo a sacarse la ropa! ¡Hay apuestas que saldar! – gritó Alma

Cinco minutos después todos estaban en traje de baño, todos menos Miss Avocet, esperando a que Claire, Millard y Alma terminaran de cambiarse. Enoch estaba a mi lado esperando la señal. Los dos miembros del grupo de élite trataban de tardarse lo más que podían para que Miss Peregrine fuera la primera en quedar en traje de baño, así que con perezoso ritmo se sacaban la ropa. Cuando esta finalmente se quedó en traje de baño mi cerebro dejó de responder. Sentía como Claire, Millard y Enoch me clavaban la vista mientras mis ojos seguían la trayectoria de la ymbryne hacia el grupo que ya estaba listo. Un duro codazo me hizo volver a poner los pies en la tierra.

- ¡Chris! – dijo impaciente Enoch luego de haber plantado su codo en mi brazo

Todas las víctimas nos estaban mirando, preguntándonos con miradas porque no nos acercábamos todavía. Miré a Enoch y eso bastó para que todos entendieran.

- Antes de zambullirnos me gustaría decir unas palabras – dijo Claire plantándose frente a los expectantes peculiares, atrayendo toda la atención hacia ella

Enoch, Millard y yo nos acercábamos lentamente al grupo por sus espaldas. Dentro del plan habíamos definido cuales eran las víctimas de cada uno; Millard se encargaba de Miss Avocet, Fiona y Hugh; Enoch se encargaba de Emma, Jacob y Horace; Claire se encargaba de Olive y yo me encargaba de Bronwyn y Alma.

- ...Es por eso que les pido que se reúnan un poco hacia la izquierda – proseguía Claire guiándolos hacia una orilla del lago – para que no queden tan mojados con las salpicaduras – miró hacia nuestra dirección y guiñó un ojo.

Los brazos del grupo de élite se aferraron a sus víctimas. Caras de sorpresa seguidas por otras de miedo se giraron hacia cada uno de nosotros. Todo pasó en un par de segundos. Miss Avocet se convirtió en pájaro y salió volando lo más rápido que pudo, lo que le dio mayor facilidad a Millard para empujar a Hugh y Fiona al agua. Estos, en el momento de verse cayendo hacia el agua, se sujetaron uno al otro esperando el impacto. Claire aferrándose fuertemente a la soga que sostenía a Olive logró bajarla y se tiró agarrada de su cintura al agua, asegurando así la zambullida. Luego llegó el turno de Emma y Horace que cayeron en un instante con un seco ¡bloop! en las cristalinas aguas del lago. Jacob costó un poco más de trabajo pero entre Enoch y Millard lograron zambullirlo. Cuando llegan los primeros ruidos de agua yo tomo lo más rápido que puedo a Bronwyn – que, por suerte, no tuvo tiempo de reaccionar - .y la empujo en dirección al agua. Ya todos los peculiares se encuentran sumergidos...lo único que falta es la ymbryne. Una sonrisa maliciosa se me forma mientras me acercó lentamente a Alma, la tomo de la cintura y ella, inútilmente, se aferra a mis brazos.

- Recuerda que me puedo vengar - dictaminó mirando fijamente a los ojos mientras sus pupilos gritaban para que la mojara

- Creo que no soy el único que quiere zambullirte

- No, pero eres el único que lo va a disfrutar

- Eso creo... - con un ágil movimiento bajo sus brazos y la subo a mis hombros, mientras Alma con pequeños gritos y pataletas intenta zafarse – Toma aire – es lo último que dije antes de tirarme al lago.

Cuando saqué mi cabeza del agua para tomar aire, pude escuchar como los peculiares se alegraban de la pequeña broma que habíamos planificado

- Eres un... - dijo Alma mientras se acercaba para salpicarme agua

- ¿Un...? – negó con la cabeza

Era increíble lo bien que resaltaban sus ojos cuando tenía el pelo mojado. Eran como dos linternas en medio de la oscuridad...o al menos yo los veía así. Se veía increíble 

- Funcionó – dijo Enoch nadando hacia mí para darme un choque de palmas - ¿Qué piensa directora? – preguntó entre risas

- Que tarde o temprano nos vamos a vengar - dijo con una sonrisa malévola

En el tiempo en que Enoch y yo le tratábamos de sonsacar alguna pista sobre la "venganza" a Alma, Miss Avocet llegó, finalmente, con la cámara

- ¡Reúnanse! – dijo mientras trataba de enfocarnos con el aparato 

Todos nos acercamos y posamos . Cuando Miss Avocet estaba por terminar la cuenta regresiva una de las manos de Alma me rosó, creo que de casualidad, haciendo que girara mi cabeza hacia su dirección. El click sonó justo después...

- ¡Chris! ¡Alma! Se supone que deben mirar la cámara cuando te van a sacar una foto

- ¡Lo siento! – dije sin girarme - ¿Qué tal si tomamos otra? Esta vez prometo no desconcentrarme – formé una sonrisa sincera, al igual que Alma

- Perdónenlos niños...son las hormonas

- ¿Las hor...qué? - preguntaron algunos 

- Nada – dijo rápidamente Miss Avocet - ¡Ahora sí! ¿Listos? Tres, dos, uno... click 



Este capítulo a rowlandxbae, que fue la primera en comentar...la que me dio la confianza necesaria para seguir escribiendo  

No olviden comentar y votar!!

Miss Peregrine y el extrañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora