Las siguientes clases trascurrieron con más tranquilidad pero aún así no dejaban de resultar un poco tediosas, hasta que finalmente llego la hora de marcharme a casa pero no encontraba por ningún lado a Skyler pero seguramente se fue con sus amigas a comer o algo por el estilo como habitualmente, al menos eso pensaba.
Cuando llegué a casa su mochila estaba en el suelo y había una bolsa de comida china sobre la mesa de la cocina y una figura apreció por el marco de la puerta, se había recogido el cabello en una coleta alta y alguien venía tras de ella con un rostro inexpresivo.
-¿Mamá no vendrá a comer?. Pregunté y papá negó con la cabeza sacando algunos platos de uno de los cajones.
-Tenía cosas que hacer en la oficina.
-Pero es tu secretaría, no entiendo por que no la has dejado salir a comer. Murmuré pero esta vez no existió respuesta alguna, solo me paso los platos para colocarlos en la mesa. Hacía años con la misma rutina en donde mamá no llegaba a comer y después papá no llegaba a dormir porque supuestamente tenía muchos asuntos que resolver en la oficina.
Una vez que terminamos de poner todo en la mesa, nos dispusimos a tomar asiento y comenzar a disfrutar de los rollitos de sushi en silencio absoluto, Skyler, papá y yo sentados en la misma mesa sin un tema de conversación de interés, es como si fueramos unos completos extraños sentados frente a frente, mejor dicho, yo era el extraño, la pieza que no encajaba.
-Estaré dos semanas en detención. Dijo Sky como si le estuviera haciendo un cumplido a la comida y él dejó de comer pero mantenía su vista enfocada en el plato a medio comer mientras ella se encogía de hombros. -Creo que el profesor me odia aunque creo que la culpa de todo es de...
-Fue mi culpa. Interrumpí levantando la mirada hacía ella quién me sonreía y después hacía él. Me gustaría decir que estaba enojado pero no era así, supongo que el enojo es un sentimiento muy fuerte y yo nunca he merecido eso, tantos años conociéndolo y lo único que he llegado a percibir es... indiferencia.
A veces pienso que para él no represento nada más que un estorbo, es como si toda su vida se basará en querer la a ella, a mi hermana.
Ni siquiera me di cuenta cuando se puso de pie y me obligó a hacer a mí lo mismo sujetando me por la camiseta, lo único que sentí fue una oleada de calor cerca del ojo y que se extendía por mi mejilla izquierda.
Lo único que distinguí fue como ella seguía sonriendo y no entiendo que esta mal en ella.
Quizás, simplemente es mala.
•~•~•~•~•
Estoy recostado sobre mi litera, mirando al techo con el televisor encendido pero sin estar escuchando realmente lo que dicen pero puedo escuchar que a mi costado derecho una ligera vibración me hace entrar de nuevo en la realidad y contesto la llamada entrante.
-¿Julia?. Preguntó sentándome mientras busco el control remoto y oprimir el botón rojo para apagar la pero no escucho ningún sonido al otro lado de la línea. -Lamento mucho todo lo que paso, no sabes cuanto me odio por no poder protegerte en esa fiesta.
-No te preocupes, no fue tu culpa. No estoy bien. Contesta en un tono oprimido como si tuviera un nudo en la garganta. -¿Crees que... que podemos reunirnos?. Pregunta y paso la mano cerca de mi ojo apartandola de inmediato por el ardor que me produce pero justo cuando pensaba en alguna excusa alguien me arrebató el télefono y puedo escuchar como la llamada ha sido colgada pero ni siquiera trato de protestar.
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RED Sobreviviendo al Infierno COMPLETA
Non-FictionNuestros padres murieron hace ocho años. Él nunca me haria daño, porque soy su princesa. Él cuida de mi y nos mantiene a salvo. Él es un buen hermano. O por lo menos eso me obliga a decir. Si miras con atención tras la ventana de nuestra casa, sabrá...