Casate Conmigo. ||Chriserick||

- 3 -

~ Febrero 24 ~

- Sin interrupciones - repitió el chico volviendo a su lugar, esperando paciente a que el señor Vélez le dijera que ocupaba.

- Bien... - estaba por comenzar, pero un mensaje le llegó, la curiosidad le ganó y revisó de quien era: Richard.

No necesito pensarlo dos veces y apretó a su nombre.

Richard: Él es de buena familia, ¿Porque trabaja en tu empresa?
Richard: ¿Has escuchado de Colón's family? Él es parte de esa empresa.

Buena familia, ya tengo planeado algo ~ pensó Christopher guardando su celular, ya vió lo necesario.

- ¿Sin interrupciones? - preguntó en burla levantando una ceja.

- Solo está vez, disculpa - respondió - Tengo algo que ordenarte que hagas y no te negaras, habrá consecuencias.

Trago con dificultad, ¿Lo despediría?

- Soy todo oídos - dijo, era todo lo que Christopher necesitaba para continuar.

- Tienes que casarte conmigo - dijo sin más.

- ¿Di-disculpa?

- Casate conmigo - repitió.

- No, te-tengo novio - respondió perdido, no esperaba aquella orden.

- Ese no es de mi incumbencia, tu te casaras conmigo - repitió, listo para que lo siguiente fueran decir sus consecuencias.

- No acepto - se levantó del sofá camino hacia la puerta con rapidez, pero la voz de Vélez lo detuvo.

- No tan rápido - se puso de pie - Si no aceptas manchare tu nombre, así si renuncias nadie te contrataría, tengo poder ¿Lo sabes, no? - el chico de cabello negro volteo indignado - Y también creo que tu familia no le agradaría que tu nombre este manchado, ¿Te apoyarían?

- Eso es chantaje - susurró mirando hacía el suelo.

- ¿Que decirte? Así se consiguen las mejores cosas - habló sin ningún descaro.

Erick a descartado que fuese una broma, una de muy mal gusto.

- Tengo novio - repitió recordándolo, sus promesas, sus momentos ¿Serán destruidos?

- Termina con él - dijo simple.

- ¿Crees que es fácil? - preguntó con su mandíbula apretada.

- Se que no es difícil, tu decides ¿Casarte o manchar tu nombre? - preguntó, seguro de la respuesta del chico.

- No me conoces.

- Solo necesito estar casado, eso ya veremos que pasa - le resto importancia, y Erick no podía estar mas enojado.

- ¿Me dejarás pensarlo?

- No hay nada que pensar, Erick - escuchar salir su nombre de la boca de Vélez no le agrado para nada, se dio la vuelta para salir del despacho, no soportaría estar mas tiempo dentro - ¿Y la respuesta?

- No hay otra opción, SEÑOR - recalcó la última palabra y se retiro dejando a Christopher con una sonrisa satisfactoria, conservaría su trabajo, y estaría con un enojo y lindo esposo a su lado.

Mientras tanto Erick sentía todo lo contrario, decepción, enojo.

¿Como podre estar a lado de Vélez?
¿Joel?
¿Que haré? ~ pensaba, lágrimas caían de sus orbes verdosos, no quería esto, pero no tenía otra opción.