Casate Conmigo. ||Chriserick||

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Para que les digo que no sí si. Este capitulo me gusto ;) Y espero que también a ustedes. ¡Holi!

Primero que nada, quiero agradecer a las personas que siguen ahí a pesar del tiempo que he tardado en seguir con la historia, en serio perdón. Este recorrido ya esta llegando a su fin, y sé que probablemente lloraran por que yo misma estoy llorando :'').

Si mis cálculos no fallan, faltan dos partes (contando el epílogo) para que esta historia llegue a su fin.

Este capítulo está un poco largo para recompensarlos por la espera, vuelvo a repetir, perdón pero a veces la inspiración no llega y no quería que quedara todo por ningún lado.

Pd. Es la primera vez que escribo un capitulo en la computadora :-) 

Pd.2: La canción de arriba es por que me gusta y me inspire 7.7

¡Los quiero! <3 y sin más interrupciones ¡a leer! :3

~ Octubre 5 ~

— ¡Chris, no te muevas! — se quejo por quinta vez la amiga de Yulissa, que era de poca paciencia.

— No mames, Christopher. No puedo creer que Aaliyah se haya quedado mas quieta que tu, pareces gusano, no puedes quedarte un solo minuto sin moverte — dijo, esta vez, Yulissa mirando desde el sillón de la sala de la tienda de trajes donde confeccionan el traje al castaño.

— Es que no me gusta que me vistan, puedo hacerlo yo solo — contesto incomodo volviendo a mover su pierna lejos de la mano de la chica hincada que colocaba alfileres — sin contar los alfileres muy cerca de mi cuerpo.

— Oh, creeme que no lo hago por gusto — exclamo la chica —. Además solo estamos arreglando el largo, el ancho del pantalón, y perdón para la próxima tu te vistes solo, ¿de acuerdo? — pregunto poniéndose de pie, asegurándose que la camisa de botones este bien colocada.

Al llegar al cuello de la camisa la chica jalo de ella para tener a Chris mas cerca y verlo a los ojos (ya que es mas alto que ella).

— ¿Que haces? — cuestiono el castaño abriendo mas los ojos, queriendo alejarse por puro impulso.

— ¡Uy, esto sera divertido! — soltó Yulissa comiendo una galleta.

— Quiero dejar una cosa en claro, chico rico — la chica endureció la mirada —. Si te vuelves a mover no te quejes si sientes un piquete, tampoco esperes una disculpa por que no será sin querer. Primer y último aviso — la chica mas bajita, de cabello castaño claro y ojos oscuros, le sonrió alejando cualquier rastro de maldad —. ¿De acuerdo?

— S-si — logró decir, la chica lo soltó y volvió a hincarse para seguir con su trabajo.

En ese momento Christopher deseo tener a Erick a su lado.

Se encontraba en una tienda en el centro de la ciudad, una muy grande donde se encargaban de confeccionar ropa a la medida, una tienda que fue elegida por Yulissa para darle más trabajo a su amiga, y de paso invitarla a la fiesta. Christopher se había negado desde el inició a que le hicieran su ropa a la medida, preferiría comprar un traje y listo, pero después de tanta insistencia (y que todas hubieran convencido a Erick), a él no le quedo de otra mas que aceptar.

No le constaba decir que el lugar era bonito. La tienda esta decorada con una gran alfombra gris, un candelabro muy llamativo, las paredes blancas y uno que otro cuadro de algún famoso que entraba en aquel lugar. Al parecer era de prestigio y muy moderno.