CAPÍTULO 6

808 35 2
                                    

—¿Bromeas?

—Eso quisiera —resoplo desanimada al tiempo que me recuesto mirando al techo. Sara toma lugar a mi lado para acariciar mi cabello.

—Sabes que debería golpearte, ¿verdad?

—Hazlo por favor —resoplo ocultando mi rostro entre mis palmas.

Después de unos minutos en silencio y yo casi al borde de caer dormida, Sara habla.

—¿No será que pensabas en otra persona? ¿O deseabas que lo fuer? —la miro confundida —. No te hagas, confiésamelo.

Abro la boca para negarle su suposición pero me doy cuenta que no tiene caso y termino suspirando.

—Estuve mal, lo sé. Le estoy dando falsas esperanzas.

—Sí, amiga. Tienes a un prometedor partido tras de ti, pero no, tú sigues aferrada a tu ex.

Aunque duela, tiene razón. Si no fui capaz de superarlo antes, mucho menos ahora que ha aparecido de nuevo.

—Tenía la cabeza en otro sitio y cometí un gran error, jamás habíamos cruzado esa línea y alimenté la ilusión de un sentimiento que no sé si podrá ser mutuo, pero...

—¿Te sentiste débil? ¿Quisiste demostrarte que puedes avanzar? —sabe lo que dice, se nota en su voz. Asiento dándole la razón.

—Cuando me di cuenta de lo que hice, me sentí muy mal. La llegada de Logan me está volviendo loca, mi mundo se está desestabilizando justo bajo mis pies —murmuro —. Muchas cosas se vinieron a mi cabeza, ¡y ahora esto! —escondo mi cara en el cojín y continúo, con la voz enmudecida por la tela —. Creí que en un futuro podría corresponderle a Ian, pero ahora que metí la pata, me siento más confundida que antes.

—Entiendo que no lo ves fácil por ahora pero todo se solucionará. Ven aquí —aparto el cojín de mi rostro y abre sus brazos, gustosa acepto el gesto —. Sabrás que hacer, siempre lo haces.

—Sé lo que es que te lastimen, y quisiera darme una oportunidad de ser feliz, pero ya no quiero hacerle perder el tiempo a Ian —musito cabizbaja mientras acaricia mi cabello.

—Si no sientes nada por él, está bien. No debes querer solucionar tus problemas del corazón con él primero que se te cruza. Algún día tendrás que superarlo, pero si por el momento quieres estar sola, también es aceptable, linda. No te presiones pero tarde o temprano deberás decirle —sus palabras me reconfortan. Tiene experiencia en esta rama y confió en ella. Su compañía es medicina para mí. Asiento ante su consejo.

—Cuéntame que hay de tí, solo hemos hablado de lo mío —me separo para acomodarme en el sofá.

—Oh, nada. El trabajo ha estado muy pesado. Todo el mundo se ha puesto de acuerdo hoy en ponerme de malas —bufa y se cruza de brazos.

—Sara, tienes una florería... —enarco una ceja divertida.

—¿Y?

¿Es que no se da cuenta?

—Y es una de las más grandes e importantes de esta área —me mira sin entender aún —. Y hoy es San Valentín —digo remarcado lo obvio. Me mira sin decir nada y luego de unos segundos, expresa asombro.

—¡DIOS ES CIERTO, JEREMY! —salta del sofá —. ¡TENGO UNA CITA CON ÉL! —sale por la puerta casi corriendo.

Miro el reloj de la sala, son las 8:15pm. Veo a parejas saliendo del departamento, seguramente para ir a cenar.

Malas Decisiones [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora