Cap 13: Cafetería

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Antes de comenzar el capítulo, quiero pedir disculpas por la falta de actualizaciones, realmente no justificare mi ausencia pero prometo volver con mas muy pronto ya que en estos días comienzan las aclamadas vacaciones.

Lo siguiente es, agradecer a todos ustedes...de verdad muchas gracias ¡Somos más de 1.2 k! Todo esto es debido a ustedes. Me siento muy emocionada respecto a esos grandes números que sé que continuaran creciendo. Nuevamente muchas gracias.

PSD: Este capítulo será diferente, realmente me encanto escribirlo.

Esperoque les guste    


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Las clases habían terminado por unos cortos meses; los estudiantes salían a montones como verdaderos prófugos de la penitenciaria juvenil, la preparatoria, para poder recibir las abundantes olas con bikinis y fiestas en la playa bajo el poderoso sol en las tardes de verano que abundarían por los próximos días.

Sin embargo, un singular grupo de jóvenes, para nada normales, se hallaba en una cafetería aparentemente vacía a la espera de la aclamada pareja de héroes que para esos momentos charlaban sin parar por los pasillos en busca de dichoso lugar de reunión.

-¿De verdad es muy necesario hacer todo esto?- la chica ajusto su mochila en sus hombros una vez más en toda la mañana mientras apartaba una delgada mecha de cabello de su rostro con molestia.

-Vamos- apuro el joven ignorando la pregunta de su acompañante, ella solo apuro el paso de manera dramática-Los chicos han de estar esperando en la cafetería, y deja de actuar como una reina del drama...

-No entiendo por qué tenemos que hacer esto- la azabache seguía con sus reclamos sin importar las palabras de su novio y haciendo la vista gorda por las últimas mencionadas por el mismo-Ya salimos a vacaciones de verano...se supone que tendríamos que estar en el Campamento y...-noto como el rubio seguía sin prestar atención, el solo se veía interesado en la estructura interna de la preparatoria de San Francisco- ¡Augustus!

-Te escucho Percie- el rubio paso un brazo por los hombros encogidos de la azabache que portaba un leve ceño fruncido y sin más, dejo un suave roce en sus labios- Es solo que en ocasiones tu no lo notas.

-Eso no es cierto- protestó la joven sin soltarse del agarre que le proporcionaba el portador de ojos grises. Estaba cómoda pero no le daría el placer a su terco novio de que la escuchara.

-Sabes que es la verdad- se jacto el rubio.

-No del todo- murmuro sin dejar de observar el rostro del joven que robaba la mayor parte de su tiempo en el día. Ella sacudió levemente su cabeza para apartar esos pensamientos de niñas de quince años con una cantidad de hormonas gravemente alborotadas.

-Eres obstinada- comento de la nada para luego depositar un casto beso en la cabellera de la azabache. Esta vez sí dejo su inútil "ley del hielo", sabía que no funcionaría ante esos magníficos y perfectos ojos que contenían tormentas a punto de ser desatadas. Malditos ojos grises.

-Así me amas- ella saco su lengua de manera infantil para que el procediera a rodar los ojos divertido ante la actitud de su jovial novia. Y, como en la mayoría de aquellas situaciones, sus labios terminaron buscándose por si solos para fundirse como un metal prohibido en las más calientes fraguas del dios herrero para desatar toneladas de sentimientos, entre ellos el más destacado, el amor.

One Shots: Percy JacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora