Capitulo 2

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Aaron Moore Wilson

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Aaron Moore Wilson

Hoy si llegue temprano es mas llegue diez minutos antes de mi hora, saludo a Samantha la recepcionista, y subo a mi oficina esta tranquilo, todos hablando y riendo siento que hoy será mejor mucho mejor.

-¡Pis! Oye nueva- me llama alguien.

-¿Qué pasa?- pregunto ansiosa porque la chica se ve agitada.

-Ven tienes que estar acá afuera antes de que lleguen, digamos que es una tradición – me explica y entiendo es por respeto, dejo mis cosas y acompaño a la chica.

Vamos al pasillo y están todos los empelados tanto del lado derecho como izquierdo formados parecen soldaditos.

-Ya casi, llegan no hagas ningún movimiento hasta que pasen y digan buenos días, entendido- toma mi mano y me pone del lado derecho y ella del izquierdo y quedamos enfrente una de la otra.

-Entendido- se lo digo en un susurro, ya que el elevador se abrió.

Vaya todos son guapos aquí o me equivoco al señor Moore lo vi en revistas, periódicos y algunas veces en televisión y se ve exactamente igual siento que veo a mi ídolo y quiero pedirle su autógrafo, parece que camina en cámara lenta y todos nosotros estamos como robots sin mover un musculo, atrás de él viene la chica vanidosa y su hijo, trae lentes de sol no lo distingo muy bien, pero siento que lo he visto en algún lugar o solo son cosas mías.

-Buenos días, empleados les deseo una bonita semana- dice el señor Moore, todos en un unisonó decimos gracias, sonríe y se retira a su oficina.

-Vaya, me sentí demasiado nerviosa- le digo a la chica que me ayudo en todo esto.

-Lo sé a mi me paso el primer día pero después te acostumbras- sonríe y me soba el hombro comprendiéndome- eres la administradora de Aaron ¿no es así?.

-Sí, pero hasta hoy lo conoceré- me viene de nuevo a la mente mi nuevo jefe y enserio siento que ya lo he visto en otro lado.

-Suerte, yo estaba en tu puesto ahora soy la administradora de su padre- dice con alivio.

-Espero y me vaya bien, nos vemos- me despido no puedo seguir demorándome se despide igual y nos adentramos a pasillos diferentes.

Estoy en mi oficina agarro una libreta y una pluma ahora si ya no se me olvidara nada todo lo apuntare.

-Catrina- me llama vanidosa, rodeo los ojos.

-Sera mejor mi día- inhalo, exhalo.

Salgo y voy a su oficina.

Toco y espero el adelante.

-Tenemos junta en este momento, vamos- ni tuvo tiempo de decir buenos días me empuja de nuevo afuera y dice que la siga.

-Córrele, tenemos que estar antes que ellos- me ordena y me va aplaudiendo.

Llegamos al fin a la sala de juntas y la señorita Peterson y yo empezamos acomodar los folder en cada uno de los lugares, ponemos la pantalla con el logo de la empresa y las galletas en medio de la mesa.

-Bien ya no tardan en llegar, siéntate ahí, cuando diga tu nombre te paras y vienes hacia mi- a todo le dije un "si señorita" pero por dentro quiero estrangularla.

Empezaron a entrar los inversionistas y hasta el ultimo el jefe y su hijo, mi cabeza la tenia gacha no podía ni ver, estaba muy emocionada tenía que controlarme ser profesional.

-Buenos días colegas- dice el señor Moore. –Hoy revisaremos las inversiones que tenemos con el Palace dicen que quieren aumentar el turismo a un 10% más.

Así siguió la junta proponiendo propuestas y estrategias algunas son muy buenas y otras no tanto.

-Bueno señores, les presentare a Catrina Maslow- esa es mi señal aunque mi nombre lo diga mal. –Sera la nueva administradora de los negocios de mi prometido- lo señala.

No puede ser, simplemente no puede ser, es el tipo del bar del fin de semana, y será mi jefe, si él tiene esa cara no quiero ni imaginar la mía sigue hablando vanidosa pero yo sigo viéndolo no puede ser posible, empiezan aplaudir y eso hace que los dos volvamos a la realidad.

-Ya siéntate- me dice vanidosa ni siquiera se su nombre.

Lo que quedo de la junta sentía la mirada de Aaron-bueno ya se su nombre- yo intentaba mirar a otro lado pero aun sentía su maldita mirada en mi me pone muy nerviosa.

-A finalizado la junta, si tienen alguna duda pasan a mi oficina- dice el señor Moore y todos empiezan a pararse de sus asientos, yo soy la primera en salir.

Voy a mi oficina, me encierro y tomo aire mis pulmones se sentía sin oxigeno ahí dentro.

Tocan mi puerta, adelante.

-Hola, la llama el señor Aaron.- me dice una señorita, mierda y mas mierda me van a despedir si, adiós sueño dorado.

-De acuerdo, ya iré-asiente y me deja sola.

Estoy en su puerta y no puedo tocar, paso saliva y apenas pasa por mi tráquea se siente rasposa, quiate este miedo que te come ya toca.

Pasan dos toques y ya me iba a retirar hasta que dice "adelante"

Abro la puerta y siento que me voy a desmayar mis piernas flaquean.

-¿Necesita algo señor Aaron?-pregunto apaniqueada.

-Catrina , cierto-voltea su silla y me gustaba más cuando me daba toda la espalda.

-No es Katherine, señor-juego con mis dedos.

-Bien Katherine, siéntate tenemos que hablar- ya me va a despedir, si es obvio.

-Si me va a despedir dígamelo ya y nos ahorramos las condolencias- digo precisa y segura.

-No para nada- ríe- he visto su historial y eres muy buena, solo tienes que firmar un contrato de cooficialidad.

-Si el que me dijo su PROMETIDA- la ultima palabra la digo casi gritando, agacha la cabeza y me mira de nuevo con una amplia sonrisa.

-Si ese- suspiro- además, también...-pasa saliva, soy yo o hace calor, ¡rayos, es claro que es sobre  esa noche!- mira si quieres seguir aquí solo tienes que firmar un contrato en el que aceptas no decir   nada absolutamente nada, de lo que paso entre nosotros.

-Y yo que gano con eso- me cruzo de brazos.

-¿Qué deseas?- pregunta.

No es difícil lo que quiero de hecho...

-Es con todo respeto lo que diré- paso saliva- pero no habrá forma de cambiarme de oficina no quiero estar enfrente de su prometida con todo respeto - ríe y niega la cabeza.

-De acuerdo mañana estarás en la que está a lado de la mía, pero recuerda no dirás nada.

-De acuerdo señor ¿tenemos un trato?.

-Tenemos un trato.

PODEROSO MAGNATE [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora