Capitulo 59

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Corro, lo más rápido que puedo, mis pies se sienten calientes, mi sudor á llegado hasta el puente de mi nariz casi siento que entra por mis fosas nasales, el corazón me late sin cesar, mis sentimientos se sienten en una tormenta.

-¡No vayas!- dice una señora que se para enfrente de mí, frunzo mi ceño –Dis...- y en eso los escucho, ¡pam!, ¡pam!, la gente se agacha y corre, intento pasar por la gente al igual que de los reporteros, intento ver lo que me rodeo y creo que los disparos provienen de la azotea, Aaron, ¡dios mío, mi amor!, las lagrimas amenazan con salir.

Aaron

-¡Ahg!- hago presión en mi brazo, el ardor se siente cada vez más intenso.

-¿Aaron?- dice sorprendido Liam, se acerca a mí, mira la herida y hace una mueca de disgusto, deja la pistola en el suelo y se acerca aun más para ver más a detalle mi brazo- Ya me hice cargo con Logan de los guardaespaldas de tu padre, pero a él no lo é visto, se escabullo mientras golpeábamos a eso cabrones- rasga una parte de su camisa y la empieza a enrollar en mi brazo -¿listo?- pregunta, asiento y en eso siento la presión y el dolor en mi brazo no pude evitarlo y sale un grito de mis entrañas.

-¡MIERDA!- gruño.

-Te dije que era peligroso, si lo hacías aquí- niega la cabeza.

-El daño ya está hecho, Liam- suspiro- mejor vamos a la azotea probablemente esté ahí- asiente y me ayuda a levantar.

Vamos por el pasillo y veo a los guardaespaldas en el suelo inconscientes y amarrados, puestos de espalda a espalda. Intento subir las escaleras, no puede consumirme el dolor ahorita, no en este momento.

-¡Está en la azotea!- grita alguien y se escucha que bajan deprisa, por su tono de voz se que se trata de Logan.

-Yo, subiere- toma la iniciativa Liam.

-¡No!- decimos en unisonó Logan y yo, nos vemos de reojo y al ver que yo no me explico decide tomar la palabra.

-Tu padre quiere que solo tu subas, que si lo haces que el solo se entrega a la policía.

-No, es una trampa, no subas, iré yo y punto- sabia que haría eso Liam, pero mierda el no puede opinar, no porque no quiera, si no porque no es su batalla es mía y solo mía –además no puedes subir así estas herido.

-¡Liam basta!, solo quiere hablar, y tiene el derecho de hacerme preguntas de porque lo hice, ¡así que ya déjalo!- eso ultimo lo dije en un tono serio, al parecer entendió ya que no siguió discutiendo, me abren paso lo chicos y sigo subiendo las escaleras.

-Si no sales en veinte minutos, entrare- dice Liam, sonrió y solo asiento.

Ya estoy en el ultimo escalón, mis pulmones parece que no les entra aire, no puedo creer que ya lo hice, ya todo termino, claro sabia que de esto no iba a salir sano al cien por ciento, pero lo vale todo, quiero estar con mi familia y pasar el resto de mi vida con Katherine anhelo tanto, estar al fin con ellos.

Tomo aire y abro al fin la puerta, salgo y el aire esta a todo lo que da, me adentro cada vez más y veo a mi padre viendo hacia la cuidad, cuando era niño siempre me traía aquí y decía que él y yo seriamos lo reyes del lugar, que mierda, ahora entiendo que solo fue pura estupidez y una vil mentira.

-¿Por qué Aaron?- pregunta, como supo que llegue, ni siquiera a volteado y ¿ruido?, ni he hecho -¿Acaso quieres que nuestro imperio termine?, ¿Por qué mierda lo hiciste Aaron?- ahora voltea a verme y en sus ojos se refleja la ira que lo consume poco a poco.

-Como si no supieras- río y niego la cabeza – yo no quiero tu estúpido dinero, ni esta compañía de mierda que solo es mafia- la señalo con mis ambas manos y río aun más fuerte.

-Por eso tu madre murió, por la mente tan cerrada y tonta que tú, tienes- me mira con repulgo.

-A ella ni la metas, tu eres un cabrón que la dejo morir- me acerco a él, pero me contengo ya no tarda en llegar la policía por él, se pudrirá en la cárcel como siempre tuvo que ser- ríe y niega la cabeza.

-Aaronsito, tu siempre creyéndote el héroe, desde pequeño siempre fuiste así, si molestaban a tu hermana la defendías, al igual que a los empleados de la casa, siempre tuviste eso, al principio creí que eran indicios de tu liderazgo- camina hacia una esquina de la azotea y se detiene –pero no, eres una completa decepción para mi, desde el día en el que me metí con tu madre- no pude contenerme, vio mis intensiones y en eso saca una pistola de esa esquina, me alejo poco a poco.

-¿Qué?- ríe - ¿Ya no eres muy machito, cierto?- niega la cabeza- escucho como quita el seguro y carga la pistola- paso saliva con dificultad - ¡Hay hijo¡- suspira- Esto haremos- se acerca a mí, pero los pasos que da, yo los retrocedo- diremos que todo fue obra tuya, que tenias problemas psicológicos, porque te enteraste que eras adoptado- finge una cara de tristeza, mis puños siento que van a pasar mi piel, de la fuerza que ejerzo en ellos – y decidiste vender la compañía a una mafia, porque sentías que te mentían todos- se acerca aun más- yo me despido por ti de mis pequeños nietos, que por cierto, se lo quitare a su madre- mierda, quiero romperle todos los dientes de un golpe -, ¡Hey!, calmado- ya esta tan cerca que la pistola ya toca mi pecho –bueno, adiós querido hijo- cierro mis ojos, inhalado y exhalo, te amo Katherine, cuida de nuestros hijos por mi, lo siento, la pistola viaja hacia mi frente, cierro mis ojos con fuerza, y espero el impacto.

Escucho, dos disparos uno tras otro, abro los ojos de par en par, mi padre se llena de rojo en un segundo toda la camisa.

-¡Te dije, que no vinieras¡, pero nunca me haces caso, ¿verdad?- dice Liam a mi lado, dándome un apretón en mi espalda y yo le sonrió en agradecimiento –Vamos la policía está subiendo.

-¡Aaron, esto no se quedara así!- dice mi padre con apenas aliento, no decido voltear a verlo y sigo mi camino al estar en el pasillo, veo a los policías pasar sobre mí, uno a uno, hasta llegar al último y ver a una pequeña persona atrás de ellos.

-¡Aaron!- siento como me presiona con sus brazos, todo mi torso –creí que te había pasado algo.

-Ya viste que no, Kathy estoy bien- tomo su barbilla, para mirarle esos hermosos ojos, marrones.

-Te amo, no sé qué haría sin ti- vuelve a recostar su cara en mi pecho, me quejo no quería hacerlo porque ya me había sorprendido que no se diera cuenta de la bala que traigo en mi brazo, se entiende esta en shock –Mierda, te dispararon- refunfuño.

-No pasa nada, estoy bien- la intento abrazar de nuevo pero no me deja.

-Vamos hay una ambulancia, abajo.

Dos semana después...

Katherine

Vaya ya ha pasado dos semanas, después de todo y siento que solo a pasado ni cuarenta y ocho horas, la boda de Coll se pospuso por todo lo sucedido, dice que por el estaba bien que sentía que había subido mucho de peso y que sería una terrible humillación, exagerado como él solo, por suerte ya son mañana. Al fin puedo decir que todo ya pasó, Cam bueno no falto explicárselo, solo me dijo, que le diera tiempo y que después vendría a verme, siento horrible pero no puedo mentir a mi corazón, amo Aaron y siempre será así.

A su padre le dieron treinta y cinco años de cárcel, y han salido más de cinco mafias -por el comento-, con las que tenía negocios su padre alrededor del mundo, la señora Moore y su hija se fueron a otro país con fondos secretos de la empresa, al parecer la señora también estaba metida en eso, pero ella en trata de blancas.

-¡Amor!- me grita Aaron - ¡Corre, no se cómo poner el pañal de Aisha!- río y voy corriendo a la habitación, mi vida será mejor mucho mejor. 

PODEROSO MAGNATE [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora