Oneshots 1 [Chris Evans]

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We're glowing in the dark

We started from a spark

We're lights that never go out

Like we've never been down

Es viernes y lo único que tengo pensado hacer es quedarme en casa viendo alguna buena serie de todas las que me han recomendado. Mis planes incluyen una pizza que pediré más tarde y helado de limón que tengo en el refrigerador. ¡Viva la dieta!

Mientras busco una pequeña libreta donde mantengo el nombre de esas series, un mensaje llega a mi teléfono, donde mis amigas me invitan a ir a un club. Mi primera opción es negarme, pero después de un rato, termino aceptando. ¿Qué puedo perder?

Inmediatamente suspendo lo que hacía y corro a darme un baño, para después comenzar a prepararme para cuando mis amigas pasen por mí. Opto por un corto vestido negro y zapatos del mismo color.

Un par de horas más tarde, la música nos rodea y las luces de muchos colores iluminan la oscuridad del lugar. Varias personas bailan en la pista y otros en sus lugares; algunas otras personas se limitan a beber en silencio o con amigos, como en mi caso.

Ellas insisten en que bailemos y de manera inmediata me niego. Ellas no vuelven a pedirlo y se alejan un poco para comenzar a bailar, de un momento a otro, me llevan con ellas de un solo jalón. Al estar de pie y escucharlas reír y bromear, opto por unirme a su intento de baile.

Nos movemos y reímos tratando de crear pasos de acuerdo con la canción, me hacen girar y es cuando mis ojos lo ven. Se ha dejado la barba y su cabello parece más largo, está vestido todo de negro y su mirada se nota cansada.

─Chris...─susurro, aunque nadie me escucha debido a la música.

─¡Mira esto! ─exclama una de mis amigas mostrándome un nuevo paso, me giro hacia ella y río, aunque en el fondo me siento curiosa por la presencia de Chris.

Las siguientes cuatro canciones nos mantienen entretenidas y bailando, a lo lejos lo veo pasar a varios metros de distancia y su mirada hace contacto con la mía. Sonríe.

Los minutos pasan y con ello mi ansiedad por tenerlo aquí, puede que sea sólo una mala jugada de mi imaginación, pero me reprendo cuando lo vuelvo a ver y esta vez emprende camino hacia un pasillo que conduce a los baños.

─Ahora vuelvo ─les digo a mis amigas levantándome con mi pequeña bolsa y camino hacia los baños.

Mi mirada lo busca, intento encontrarlo entre tantas personas que caminan a mi alrededor, hasta que alguien sujeta mi brazo con firmeza.

─Hey ─susurra acorralándome entre su cuerpo y la pared del pasillo.

─¿Qué haces aquí? ─cuestiono mirándolo con sorpresa.

─Ese no es el recibimiento que esperaba ─murmura acercando su rostro al mío, pero me giro para evitarlo.

─No tienes derecho a aparecerte como si nada, no después de tanto tiempo ─reclamo.

─Tuve mis razones para hacerlo, sólo necesito tiempo para expresarlas.

─¿Y crees que te lo voy a dar? Chris, ahora eres sólo un recuerdo de mi vida, un fantasma del pasado que viene a atormentarme cuando he dado vuelta a la página ─explico en un susurro, como si fuese un secreto entre ambos.

─Tu no puedes haberme olvidado. No después de toda la historia que tenemos ─exclama mirándome con desesperación.

─¿Qué historia? Mientras me veías salías con otras chicas, eso no es una historia.

─Era parte de mi trabajo salir con ellas ─se excusa.

─¿Y cuándo te sentaste conmigo a explicármelo? ¿Entonces por qué dejaste que me hiciera esa imagen errónea de ti si eras inocente? No intentes enmendar el daño que hiciste. Simplemente vete.

─¿Eso es lo que quieres? ─dice tomando mi rostro entre sus manos para evitar que me mueva, mis brazos se mantienes caídos.

─Sí, es lo que quiero ─digo con la mayor seguridad que puedo.

Suelta una pequeña risa llena de amargura. Trato de alejarme colocando mis manos sobre su pecho y poder empujarlo, pero no lo consigo.

─No te creo ─murmura luego de unos segundos ─. Tu no puedes alejarme de tu vida ─pide en un tono que parece de súplica.

─Tú lo hiciste, Chris, por tres años. No pidas algo de esa magnitud, pensé que tenías una vida, todo lo que deseaste está a tu alcance ─afirmo.

─No todo, me haces falta en mi vida. Tú eres el complemento que necesito para que todo esto sea perfecto.

─No puedes tener todo en la vida. No me puedes tener a mí, ya no ─le confieso con toda la fuerza que me permite tener su cercanía.

Es entonces cuando sus ojos se encuentran con la sortija que reposa en mi dedo anular, un precioso anillo señal de que me he comprometido. Nada de eso ha sido por despecho, mi corazón no logró olvidarlo por varios meses, hasta que él llegó. Poco a poco fue ganando un lugar en mi corazón e iluminó la oscuridad que había dejado Chris dentro de mi alma.

─Esto no puede ser verdad ─suplica, ahora con lágrimas en los ojos.

*multimedia*

─El tiempo ha pasado, Chris. Necesitas continuar como yo lo hice. No te niego que eres una persona importante para mí, fue una etapa maravillosa que recordaré con alegría, pero sólo serás eso, un bello recuerdo ─mientras hablo, su agarre se hace más débil hasta que sus manos sólo dejan suaves caricias en mis mejillas.

Lo veo negar varias veces totalmente incrédulo. Su rostro es indescriptible, me duele pensar en lo que puede estar sufriendo, pero al mismo tiempo recuerdo lo que yo sentí en aquella etapa oscura. No es una venganza, pero he avanzado en mi vida y estoy feliz con ella, sólo que creí necesario hablar con él para dar por terminado todo eso.

─Esa era nuestra canción, ¿lo recuerdas ─cuestiona con la voz cortada.

Me permito escuchar con atención. Recuerdo todas esas veces bailando por todo el departamento, las ocasiones que en el auto cantamos a gritos cada verso y los besos robados durante cada estrofa.

─Siempre será de mis favoritas ─afirmo con una sonrisa melancólica.

Lo veo sonreír de la misma forma. Es hasta entonces que sus hermosos ojos azules hacen contacto con los míos, está triste. Me armo de valor y acaricio su mejilla, él cierra sus ojos ante mi tacto.

─Siempre te voy a amar ─murmura.

Me dejo llevar por el impulso y lo abrazo. Es como una despedida. Es el momento de ponerle punto final a todo esto y continuar con mayor seguridad el camino que estoy emprendiendo.

Cuando nos separamos, sus labios se unen a los míos en un casto y corto beso de despedida. Ya no siento esa chispa, sin embargo, me deja satisfecha tener un último contacto con él.

─Te deseo lo mejor, lo mereces ─afirma besando mi frente y comenzando a caminar hacia la salida. 

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@DarlyAlfaro espero te guste, tal vez no sea lo que esperabas, pero me inspiró la temática del vídeo (un poco) y luego simplemente la historia llegó. No podía desaprovecharla. :D 

En general, espero les guste a todas. Ya quería un oneshot así de melancólico.