Bajo el mismo cielo.

EPÍLOGO

                  5 años más tarde...

EIDEN

Miré mi reloj y me quedé boquiabierto. Mierda, eran casi las diez y media.

—Francesca, ¡Tengo que irme! Mi novia se va graduar y debo estar ahí. —grité a través de la otra habitación.

—Usted es el jefe puede irse cuando quiera. —gritó de vuelta.

—Es que no quería dejar mi trabajo a media. Pero gracias, Francesca, hasta pronto. Llámame cualquier cosa —dije mientras corría fuera del edificio y me metía en el coche.

Me gradué hace poco y aún no puedo creer que sea el jefe de una de las empresas Moretti. Anastasia, Isabella y Alessia se han adueñado de las empresas de Alonzo. Vendieron todas y se quedaron con dos. En una me dejaron trabajando a mí, por más que me negué me dejaron siendo jefe. Theo y Jace trabajan conmigo mientras que las dueñas junto con Natalia y Aurora trabajan en la otra.

Me apresuré a la universidad, preso del pánico, y corrí tan rápido como pude alrededor de la parte trasera hasta el campo. Me deslicé entre la agente, buscándolos. Vi a Chiara de inmediato, estaba en su silla, explorando la multitud. Señaló cuando me vio y no pude evitar sonreír. Chiara tiene cuatro años, es la hija de Isabella y Jace, habían tardado mucho en no hacer hijo si en todas partes estaban follando.

Comencé a caminar hacia ellos. Me abrí paso entre la multitud y me senté al final de la fila. Chiara se zambulló inmediatamente en mi regazo.

—Hey, nena. ¿Te estás portando bien? —pregunté, haciéndole cosquillas, consiguiendo que se riera y retorciese.

—Todavía no ha empezado. —dice Jace, sonriendo.

Hice una mueca y asentí. —Dios, tío, estoy tan emocionado.

Se echó a reir y sacudió la cabeza. Su novia, Isabella, se aproximó.

—Estás sudando como una puta. —dijo, rodando los ojos. Isabella era increíble, nunca cambia. Natalia que está a su lado no deja de reírse.

Saludé a mi madre, quien estaba sonriendo con orgullo, como siempre charlando con un extraño cualquiera junto a ellos. Sonreí, mi madre podría seriamente iniciar una conversación con un mudo.

—Hola, Eiden. —Saludó Bianca mientras se apretujaba por el pasillo para abrazarme.

—Hola, Bianca. ¿Qué tal? Su hija se gradúa hoy. —dije, abrazándola de vuelta fuertemente. No la habia visto desde que se casó con Valerio y tuvieron cuatro meses fuera de Italia por su luna de miel. Que luna de miel más larga.

—Estoy emocionada. Valerio no pudo venir a ver ni siquiera su hijo, está trabajando en algo importante. Ya sabes. Está tan molesto por perdérselo. —contestó, frunciendo el ceño.

Sonreí. — Asegúrate de hace muchas fotos para él.

Chiara saltó de mi regazo y corrió de vuelta hacia su madre. Le sonreí a Isabella cuando la regañó por correr, porque según podía caerse. Que exagerada.

Natalia y Luciano comenzaron a andar. Tomándonos por sorpresa a todos, pues siempre creímos que se ligaría con Theo ya que eran lo más cercano, pero se ligó con el que menos esperábamos, todos estábamos feliz por ellos. Theo sigue soltero, sigue siendo un mujeriego y está "probando terreno", como él le gusta decir. Aurora comenzó a salir con un tío de la escuela de medicina después de cinco años, después de Evan, por fin se atrevió a salir con alguien. Estábamos todos felices por ella.