Biológicamente imposible [NejixOc]

32: Lazos familiares.

~Tiempo después~

Era sábado por la tarde y sus padres junto a su hermano menor le hicieron una visita en su departamento. Su hermana mayor no estaba presente tal y como estuvo ocurriéndo las últimas semanas. Tal vez seguía resentida con el tal Itachi y no quería verlo de nuevo si es que se presentaba de repente junto a Neji, pero dándole vueltas constantemente al asunto, Arata creía que era algo en su totalidad absurdo, más aún si ya habían pasado dos meses desde que se reencontraron:
-Oye, ¿y qué tal las cosas con tu nuevo padre?- Hideo tenía a Hajime sentado sobre su regazo para que así pudiera ver como jugaba en la pequeña pantalla de su móvil -¿Arata sigue gritándole y dándole de palos o ya lo asesinó y lo tiene trozado en el refrigerador?- susurró.

El niño rió ante la exagerada suposición de su tío:
-Todo está bien, muy bien. Papá me está enseñándo muchas cosas y con papi ahora son buenos amigos, supongo- respondió mientras observaba hipnotizado el minijuego infantil que mantenía entretenido a su tío -¿cómo está tu gato, tío fideo?

-Que no es fideo. No me llames así.

-¿Y entonces por qué dejas que el tío Kakashi te llame así? Creí que te gustaba.

-¡Pues no me gusta!- exclamó, moviéndose de un lado a otro con el móvil entre sus manos -¡voy a ganar, voy a ganar! Voy a... hemos perdido. Perdimos Hajime, ¡tendremos que empezar de nuevo!

-Ya es suficiente, Hideo. Dame ese teléfono.

-¡Pero mamá!

-Pero nada- Narumi le arrebató con destreza el aparato móvil de las manos -ahora levántate derecho y vamos a la mesa. Vinimos a ver a tu hermano, no a completar niveles difíciles.

Aunque estaba cerca de cumplir dieciocho años, Hideo solía actuar como un niño en situaciones como esa: a espaldas de su madre comenzó a hacer muecas burlonas sin darse cuenta de que su sobrino ya estaba sentado a la mesa y que además se había dado cuenta de sus malas costumbres:
-Abuelita, oye abuelita...

-Deja que haga todas las burlas que quiera, veremos si sigue burlándose después de que lo obligue a borrar ese ridículo jueguito del teléfono.

-¡Mamá no, cualquier cosa menos eso!

-Entonces siéntate y convive con nosotros como cualquier chico de tu edad haría- sugirió Hitoshi, indicándole que tomara asiento a su lado -vamos hijo, no es tan difícil.

Desganado, aburrido e irritado ocupó el lugar que le ofrecía su padre, no sin antes apoyar su mentón contra la mesa:
-¿Al menos el almuerzo ya va a estar listo? Ya ha tardado demasiado.

-No habrá almuerzo para ti si estás echado de esa manera- Arata llenó el vaso de su hermano con gaseosa de naranja -y aprovechándo que aún faltan unos minutos para comer, les comentaré sobre un asunto que tengo pendiente desde el martes- se aclaró la garganta antes de empezar a explicarles -Neji me ha comentado que apenas ha cruzado palabras con ustedes, a excepción de ti, padre. Claramente si ahora trabaja contigo tienes que dialogar más con él...

-¿Por qué te estás poniéndo rojo?

-Hideo, no me interrumpas porfavor.

-Pero estás igual de rojo que un tomate.

-¡Las ventanas están cerradas y hace calor, es por eso!

-¡Mentiroso cara de oso! Es por...

-¡Basta! Toma y sigue jugándo- Narumi le regresó el teléfono a su hijo menor para que guardara silencio y no volviera a molestárles -porfavor Arata, continúa. Ahora no te interrumpirá.

El recién mencionado sonrió hacia su madre en agradecimiento antes de retomar el hilo de la conversación:
-Me ha dicho que su padre nos conoce a todos nosotros, no completamente pero que al menos sabe quien es quien. El asunto es que Neji me contó que el resto de su familia quiere conocérnos también. A nivel personal realmente me da lo mismo, pero creemos que es importante para Hajime conocer a las familias de ambos.