Biológicamente imposible [NejixOc]

27: Nuevo camino.

Después de cenar, sus padres le llamaron a hablar en privado con ellos en la cocina. Hideo estaba terminándo sus deberes en su habitación, así que no interferiría si empezaban a discutir fervientemente entre los tres:
-Y bien- Arata se cubrió la boca para bostezar ya que era pasada la medianoche y estaba notoriamente cánsado -¿qué quieren decirme ahora?

Su madre, apoyada contra el refrigerador y de brazos cruzados, fue la primera en hablar:
-Tu padre tiene una sugerencia que hacer. Escúchalo bien Arata, no dejes que tus impulsos te nublen la mente.

Como reacción a las palabras de su esposa, Hitoshi alzó la vista, haciéndole frente al duro semblante que su hijo llevaba encima desde que lo vio regresar del trabajo:
-Mis hermanos fueron a hacérme una simpática e inesperada visita el día de hoy. Como te comenté hace unos días los tres me regañaron tal como si fuera un mocoso...

-Vé al grano, porfavor- interrumpió la mujer a su lado -estoy segura que a este niño no le interesa nada sobre esa reprimenda. De hecho a mi tampoco me importa lo que te hayan dicho tus hermanos, quizá hasta te lo merecías.

El mayor cerró los ojos, exasperado. No podía creer como todo se había vuelto en su contra en apenas unos días:
-Uno de tus tíos me sugirió llevárte a pasar unos días con él. Argumentó que si estás en medio de este ambiente tenso solo te harás daño y de paso le harás daño al bebé. Irás dos semanas y después de eso veremos si quieres regresar...

-Te está mintiéndo- casi de inmediato Narumi interrumpió el relato de su marido -ese tío tuyo quiere llevárte a vivir con él hasta que tengas a tu hijo contigo. Concuerdo en que te hará pésimo estar en medio de un ambiente tenso como el que ultimamente hay en casa y supongo que una pérdida espontánea no está dentro de tus planes. Además es una buenísima oportunidad para que... digamos, te libres de nosotros por un tiempo.

No entendía nada, absolutamente nada, eso sin contar que ya no sabía ni a cual de sus dos padres creerle:
-¿Pero de qué están hablándo? ¿Acaso quieren deshacérse de mi?- concluyó Arata por su cuenta -¿y de cuál de todos mis tíos están hablándo? Todos son idénticos así que es difícil deducir solo con ayuda de esa palabra.

-Nadie se quiere deshacer de ti Arata- respondió la mujer -solo estamos pensándo en tu bien y en el de la criatura.

-¡Pero estaré solo! Yo no sé como se vive con un bebé dentro, ni como se hace para que nazca y tampoco como se les trata cuando nacen. Mamá, yo confíe en que tú me ayudarías con eso.

Narumi le evadió la mirada, avergonzada:
-Lo siento muchísimo Arata, pero yo no soy la indicada para ayudárte en esta circunstancia.

Estuvo a nada de abrir la boca e insultárla de la misma manera en que hizo con su padre en el hospital, pero por suerte este último pudo interrumpirle en el momento preciso:
-Satoshi se ofreció voluntariamente a cuidarte y a guiarte durante uno o dos años. Hay cosas que nosotros no podremos explicárte aunque queramos y en lugar de inventar burradas y hacérte mal preferimos que él se haga cargo de ti ya que conoce a la perfección lo que estás pasándo. Además- hizo una pausa ya que pareció que se le quebraba la voz -sé que te prometí que cambiaría por ti, pero no puedo hacérlo aunque lo intente con todas mis fuerzas.

-¡No pueden venirme con eso ahora, no ahora!- Arata se llevó los dedos a la sienes, tratándo de calmárse -esto es increíble: primero me ocultas este terrible secreto familiar, esperas a que todo se vaya al mismísimo demonio y ahora no encuentras mejor opción que abandonárme para no manchar tu imagen. ¿No crees que para no tener estos problemas habría sido más fácil darme en adopción?

-Arata, te estás pasándo- Hitoshi dejó de hablar tranquilo para alzar la voz, amenazánte como siempre hacía -no vuelvas a decir algo como eso.