Biológicamente imposible [NejixOc]

39: ¿Qué es lo que somos?

Faltaba solo una semana para que llegara el día donde se celebraría el cumpleaños de Hideo. Para aclarar unos últimos asuntos respecto a la organización, ese día domingo se reunió con su hermana en su casa: Hajime fue gustoso con tal de encontrárse con su prima, pero Neji rechazó coordialmente la invitación bajo la excusa de que estaba cansado, aunque tenía muy claro que eso era una gran mentira y no iba para no tener problemas con Kana. Arata no tuvo inconvenientes en ir solo con su pequeño, así que le dejó quedárse a descansar e incluso le permitió tomar una siesta en su propia cama.

Le había ayudado bastante con respecto al asunto de los invitados, y mientras su hermana garabateaba cosas sobre una hoja lo suficientemente gastada, se dio un minuto para observar a través del ventanal como Kakashi jugueteaba de aquí para allá con las dos criaturas que tenía a su cuidado. Sonrió para si mismo cuando vio a Hajime atrapándo una mariposa para mostrársela a su tío y dejó salir un largo suspiro cuando los tres se sentaron sobre el césped a observar a las aves que revoloteaban a su alrededor. Nunca sintió algo como lo que sintió en ese momento, pero por breves segundos deseó que esa casa fuera suya, que el lugar de Kakashi lo ocupara Neji y que tal vez, solo tal vez Nanami fuera reemplazada por un nuevo integrante. Quizás un perrito:
-Oye Arata, te estoy hablándo- Kana alzó la voz al notar que su hermano no la escuchaba -¡¿Arata, me escuchas?!

-¡¿Qué?! ¡¿Qué pasa?!

-Intento hablárte desde hace un buen rato y ni te inmutas en responder. ¿Acaso estás enfermo?

-No no, solo estaba... solo me perdí en mis pensamientos, eso fue todo- respondió de la manera más natural posible -lo siento.

-Aún así me parece sospechoso- su hermana mayor dejó su lápiz a un lado y puso su mano sobre su frente, corroborándo así que no tuviera fiebre -de un momento a otro tus mejillas y orejas se pusieron rojas. Supuse que te había subido la temperatura, pero tal vez solo...

-No Kana, no es nada de eso- balbuceó sin sentido, soltándose la coleta que se hizo para trabajar sin molestias -ni pienses en que yo...

Confundida ante el repentino actuar de Arata, ella solo optó por apostar a la única opción que se cruzó por su mente:
-¿Qué tu qué? ¿Acaso tendrás otro hijo?

-¡No, no es eso!

-¡Es lo único en lo que puedo pensar!

-¡¿Cómo puedes creer algo así?! Aún no he tenido un contácto más íntimo con Neji y tú ya crees que hay otro niño de por medio...

-¡¿Qué fue lo que dijiste?!- la mujer golpeó la mesa, furiosa, al tanto que se levantaba de su lugar -¡¿qué tiene que ver ese maldito de Neji contigo ahora?!

-Pensaba contárte ahora, pero...

-Kana, cielo mío- Kakashi llamó su atención de la forma más disimulada que pudo a su pareja -¿podrías hablar más bajito? Los niños están aquí y no deberían escuchárte.

Lamentablemente los niños ya la habían escuchado, siéndo sus gritos y regaños suficientes para asustarlos a ambos, en especial a Hajime:
-Lo siento, lo siento- se disculpó ella, con un notorio quiebre en su voz -¡es que no puedo creer lo estúpido que es con la edad que ya tiene!

-Oigan ustedes- Kakashi se inclinó en medio de los dos niños con tal de hacer el ambiente un poco más amigable para ellos -vayan a lavárse las manos y luego me esperan en la cocina. Los adultos tenemos cosas importantes de que hablar aquí.

-¿Todo está bien, tío?- Hajime lo jaló por la manga de su camisa -¿no le pasará nada a mi papi?

-No le pasará nada, tranquilo- Nanami lo tomó de la mano y lo guió hasta el baño del primer piso, dejándolos a ellos tres completamente a solas.