El Contrato

Tres condiciones

El sujeto del banco se marchó después de terminar sus negocios con ellos y cuando estuvieron solos Nina miro con enfado a Jasón mientras jugaba con la cucharita de su pastel. 

-eres un niño caprichoso ¿cuál es el punto de querer que use esa tarjeta?

-eres mi novia, quiero que sientas mi respaldo- explico y Nina quería lanzarle el pastel a la cara. ¿Cuál respaldo? Solo le estaba lanzando dinero como loco. 

-¿No has pensado en eso que la gente común llama trabajar en la confianza?- pregunto levantando una ceja.

-estoy segura de que te sentirás mas confiada después de gastar un par de millones- contrataco y Nina cas se ahoga con su paste ¡¿Gastar un par de millones?! Ella ni siquiera podía pensar en cómo gastar un par de miles sin que le doliera. 

-Jasón ¿puedes por favor pensar un poco en mi futuro?- pregunto- ¿Que hare si me acostumbro demasiado a todo esto? Después de un año ¿cómo podré volver a ser una persona normal?- pregunto con un tono de angustia exagerado. 

-estarás bien, tendrás mucho en especie para ese momento- respondió tranquilamente. Nina estaba simplemente indefensa a su terquedad-. Además eres muy joven. En vez de renegar de mi absoluta e increíble generosidad- alardeo- ¿por qué no te aprovechas un poco de mí?- sonrió ampliamente- tienes una fuente de ingresos ilimitados frente a ti ¿Por qué no formar tu propia fuente de ingresos?- pregunto con una sonrisa y Nina extrañamente no se ofendió. 

La chica parpadeo un par de veces y bajo la cabeza pensativa. En realidad… no era una mala idea. Ella tenía tanto miedo de perder a su bebe, porque sabía que frente a Jasón lo que ella podía ofrecer era nada… pero ¿por qué tenía que seguir siendo la última en la cadena alimenticia? Quizá no podía llegar a ser un magnate del calibre de Jasón en un año…pero al menos podría ser una madre confiable…quizá… Nina observo a Jasón discretamente mientras este tomaba su café. Quizá incluso llevar a ser capaz de pararse a su lado con la frente en alto.

-lo pensare…- murmuro. Si ella podía o no forjar un patrimonio propio y podía pagar la inversión que tomaría de Jasón solo dependía de lo duro que trabajara, así que la idea no le parecía tan aberrante como solo extender la mano y tomar su dinero. Jasón sonrió al ver que realmente contemplaba la idea. 

-hazlo- le aconsejo, Nina quizá jamás pudiese sentirse segura a su lado si no tenía un suelo solido en el que pararse bajo sus pies. Lo que sea que ella decidiera hacer, él lo respaldaría. 

Se despidieron después de comer, Jasón tenía un compromiso y Nina tenía un mar de cosas que hacer. Jasón le pidió un taxi y cuando la despidió se encargó de dejar un beso largo e íntimo en sus labios. Lo suficientemente sensual para dejar a Nina alterada todo el camino de regreso a casa. 

Jasón sabía que su forma de acercarse a Nina era extraña. Él estaba presionando una cantidad considerable de beneficios monetarios sobre ella, pero sin exponer directamente su corazón, él sabía que quizá era confuso pero tampoco encontraba otra forma de actuar. Él quería que Nina se sintiera amada, pero no quería presionarla con palabras demasiado serias.

Había liberado a Nina de la presión de volver con él con un contrato, echando inmediatamente toda la culpa y responsabilidades sobre su propia cabeza. Él no podía renunciar a ella, no ahora que la había vuelto a encontrar, pero al mismo tiempo temía asustarla si exponía todo lo que había en su corazón. Ya había visto su reacción cuando había mencionado que él se habría casado con ella, simplemente había parecido aún más enfadada y ofendida. Ella seguramente creía que solo intentaba engañarla con dulces palabras y eso era obviamente producto del mal comienzo que habían tenido hacia 5 años.