Joyas y Pasteles

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Alexei llevo el pastel a la cocina y lo metió en el refrigerador antes de suspirar y mirar a lo que se enfrentaba. Vio todo a su alrededor y aunque aventurarse a ciegas parecía divertido opto por sacar su celular y buscar la mejor forma de preparar café.

Encontró que una proporción de 1: 15 de café por agua era el ideal y arqueo las cejas. Jamás pensó que el cálculo debería ser tan preciso. Su asistente hacia más de lo que creía. Comenzó a buscar entre las puertas de la cocina integral la alacena hasta que la encontró y entonces tuvo que buscar cual era el café...

Alexei estaba en pleno reconocimiento de su nuevo terreno cuando un niño entro y se paralizo al verlo.

-¿Quién es usted?- pregunto paralizado, aunque cuando el hombre se giro hacia él lo reconoció y se alivio- oh, es el amigo de mi mama- sonrió y se acerco preguntándole que hacía.

Alexei le explico con una sonrisa lo que buscaba y Yeremaya le ayudo a buscarlo. El niño solo había salido por un poco de agua, le estaba platicando eso cuando Andreas también entro a la habitación y saludo.

Alexei vio por primera vez a su nieto y no fue difícil reconocerlo. Era el vivo retrato de Jasón, con el cabello rubio y rizado de Valentina. No había mucho de Nina en el, quien había salido muy parecida a su abuela Rose.

Hablo un rato con los niños pero estos lo dejaron solo después de tomar agua y regresaron a su habitación.

Estaban ya de vuelta en la pieza de Andreas cuando Yeremaya recordó lo que había escuchado la última vez y se lo recordó a su amigo.

-Andy, recuerdas el hombre que te dije que creía que era el papa de tu mama? Es ese señor- le informo y Andreas se giro a él con expresión interesada, frunciendo ligeramente el ceño.

-¿estás seguro? - dudo.

-¡si!- El estaba muy seguro, su mama había hablado muchísimo tiempo con ese hombre, lo recordaba perfectamente.

-mmm- Andreas se pregunto si ese sujeto de verdad seria el papa de su mama, eso lo haría su abuelo. Pero más importante...eso quería decir que el sí que sabia buscar-. Vamos a hablar con él- Andreas regreso sobre sus pasos y Yeremaya lo siguió enseguida.

-¿qué quieres hacer?- pregunto curioso.

-el ha estado buscando a una hija, el debe saber buscar...- pero solo servía si sabia buscar bien. Deberían preguntarle...

-no creo que solo puedas ir y preguntarle- Yeremaya renegó cuando estaban en la puerta de la cocina.

-claro que si, está ahí, puedo preguntar- argumento y camino hasta estar frente a Alexei que ya había logrado poner a funcionar la cafetera.

-¿preguntarme qué?- Alexei, pregunto, bastante orgulloso de su capacidad mental para calcular a golpe de vista la cantidad de café ideal para su preparación.

-¿Señor, usted es el papa de mi mama?- Andreas pregunto directamente y Yeremaya se escondió inútilmente tras Andreas mirando a otro lado. El no había hecho nada, no había dicho nada y nadie lo iba a sacar de ahí.

-¿por qué piensas eso?- Alexei pregunto tras mirar unos segundos a Yeremaya.

-mi amigo está buscando a su papa, si usted es el papa de mi mama debió buscarla ¿verdad? ¿Sabe como buscar gente?- pregunto.

Alexei se rio divertido, a ese niño le importaba un comino si era su abuelo, solo quería ayuda para apoyar a su amigo.

-hablemos de lo primero después- propuso como si nada-. En cuanto a lo otro- miro directamente a Yeremaya- yo podría decirte como encontrar a tu papa, pero sería mejor que hables con tu mama, ella merece saber cómo te sientes. Si se lo pides estoy seguro que lo llamara para ti- aconsejo y Yeremaya frunció el ceño.

El ContratoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora