Suspiré irritada mientras leía el libro de química que tenía que estudiar para la universidad. Mi pie chocaba con el suelo una y otra vez. Mi vista miraba de reojo el celular, ya que esperaba que mi hermano me llamara.
Hace dos días que no aparecía por el departamento y eso me ponía de los nervios. Cuando se desaparecía me ponía furiosa y peor, vivía preocupada y sin poder hacer nada, ya que mi mente se concentraba solo en él y en su bienestar.
Me apoyé en la silla y masajeé mis sienes, evitando sentir dolor de cabeza. Quizás tendría que probar a llamar a alguno de sus... «amigos». Aunque, sabía claramente que Yoongi no los consideraba como tal. Solo había seis chicos que habían logrado que Yoongi sea una persona completamente nueva para mejor. Pero también, esos seis chicos habían logrado que fuera para peor.
Y sí. Yo sabía su historia. Ya que Yoongi me contaba todo. No había secretos.
Tomé mi móvil y lo giré en mis dedos pensando. ¿A quién de sus «amigos» podría llamar? Todos me caían mal, sinceramente. Ninguno era tan divertido como los seis. Con ellos hasta yo misma me sentí incluída. Y, si. Los extrañaba. Por más que nunca se lo diría a mi hermano, ya que evitaba hablar de ellos a toda costa.
Llamé al que me caía un poco mejor que los demás.
—¿Sí?—Kihyun atendió al tercer tono.
—Soy Yoonji.—Dije mientras suspiraba.
—No sé nada sobre Yoon.—Respondió, como si ya lo supiera. Y es que probablemente lo hacía.— Si llega a comunicarse conmigo, eres la primera a la que llamaré.
—Gracias.—Contesté aliviada, sabiendo que al menos uno de sus amigos me tenía en cuenta.
La mayoría me odiaba ya que cuidaba "demás" a Yoongi. Pero es que no entendían, no entendían mi miedo de no verlo nunca más. A veces él podría irse y me dejaba, me abandonaba. Se había cerrado bastante en los últimos dos años y ya no era aquel muchacho que hacia bromas o reía constantemente. Lo echaba de menos. Extrañaba de menos a aquel hermano que podía pasarse horas con ella, viendo una película o saliendo a las tiendas.
Pero Yoongi ya no era ese.
Y me dolía saber que era porque no tenía en su vida a las únicas seis personas—aparte de mi—que habían hecho que él fuera una persona mejor. Y es que lo entendía y lo sabía, Yoongi los necesitaba. Él era nada sin ellos, por más que lo negara. La demostración estaba.
Corté la llamada con Kihyun y volví a retomar mi lectura de química. Al menos, me sentía un poco más aliviada al saber que Kihyun me avisaría si tiene noticias de mi tonto hermano.
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El timbre me quitó de mi concentración. Hice una mueca y me levanté de la silla de mi escritorio, buscando mis llaves por mi mochila. Abrí la puerta para salir al pasillo y suspiré, tocando para abrir la puerta.
El departamento lo estábamos alquilando hace dos años. No podía creer que estaba viviendo sola. Al principio había sido bastante difícil pero finalmente lo habíamos logrado.
Escuché unos pequeños toques en la puerta principal, así que me dirigí a abrir. Quizás sería el encargado o algún vecino. Por lo general siempre venían para ver cómo estábamos o si necesitábamos algo. Yoongi los odiaba pero a mí me caían bien. Así que era yo la que asistía a las reuniones del edificio.
Abrí la puerta observando a un chico de cabello rojo oscuro, hoyuelos y sonrisa. Su mirada marrón oscura no salía de la mía. Y me costó reconocerlo, fue difícil ya que no lo veía hace bastante. Pero ahí estaba.
Hoseok.
—Wow.—Dijo mientras reía.—Sigues igual de hermosa de como te recuerdo, Yoonji.
Intenté cerrar la puerta pero él lo impidió.
Y supe que ni Yoongi llegaría a tiempo.
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» Hay días que me quedó horas escribiendo un capítulo. Y otras que lo escribo en minutos. Este caso, es el segundo. Lo escribí en diez minutos cuando lo iba a escribir mañana y todo porque me inspiré a último segundo.
» Capítulo dedicado a Nicolás por más que no lo leerá. Pelotudo, sos el mejor amigo del mundo. Y que sepas que con las chicas que te hemos salvado de que hagas algo peor. Mañana nos lo agradeces o hay chancla. Te amo. Te amamos. Y DEJA DE PONERTE EN PEDO.
» Y cabe mencionar que, así como Yoonji describe a Yoongi con los chicos... Es tan yo. Yo me siento nada si no tengo a mis mejores amigos.
» Oh Dios, el momento emocional. Mejor la corto aquí antes de decirles el porque soy tan afortunada de tener a mis idiotas de amigos.
» Espero que tengan una linda noche. Madrugada. Día. Tarde. Lo que sea mientras lean esto.
