21.

1.1K 150 39
                                        

Y O O N J I.

Creo que había pasado un día, si no me equivocaba. Hoseok me había dado de comer solo un sándwich y no había rastro de Jungkook.

Cerré mis ojos nuevamente pensando en lo idiota que era mi hermano. ¿Volverse a liar con su ex? Idiota, idiota. El rey de los idiotas.

Volví abrir mis ojos para observar mis manos atadas con una soga. No estaba tan apretadas, Yoongi me había enseñado como salir de una situación así. Pero primero tendría que distraer a Hoseok.

Ahora entendí porque me enseñaste, idiota.

¿Cómo distraer a Hoseok sin que sospeche? Estaba seguro que también era tan inteligente como mi hermano. Un poco menos, quizás.

Miré a mi alrededor, frunciendo un poco el ceño mientras observaba aquella pistola que estaba encima de una pequeña mesa de madera. Hoseok se encontraba a su lado, sentado en un cojín, mientras observaba su móvil.

¿En qué mierda estaba pensando Yoongi al juntarse con alguien así?

Aunque, ¿en serio me lo preguntaba? Sí ya sabía que mi hermano no era ningún cuerdo. Y lo sabía. Yo tampoco era cuerda. Era su maldita hermana, llevaba su sangre y la de mi padre. Claro que yo no me quedaba atrás. Podía parecer bastante normal a los ojos del mundo, pero el único que sabía realmente lo que era capaz era Yoongi.

Y realmente no quería que nadie más lo supiera.

O habría guerra.

—Hoseok.—Llamé. Él alzó su mirada hacia mi, frunciendo un poco el ceño, invitándome a hablar.— ¿Por qué tú y mi hermano de llevan tan mal?—Pregunté. Claramente ya sabía el porque, pero necesitaba que él me tuviera de «inocente», que yo no sabía ninguno de sus planes y menos los de Yoongi, aunque el del último era verdad. No sabía en qué se había metido mi hermano.

—Así que Yoongi no te lo ha contado del todo, ¿eh? ¿Y así eres su preciada gemela? Cuando te oculta las cosas.—Rió secamente, haciendo que yo me tensara por su tono de superioridad. ¿Acaso estaba queriendo que me pusiera en contra de mi hermano? 

Claro que Yoongi me ocultaba las cosas, hasta yo misma le ocultaba cosas. Éramos hermano, sí, era mi mejor amigo, era mi gemelo. Pero había cosas que él no sabía de mí y había cosas que yo no sabía de él. Aunque sabía que había más de su parte que mía. Por ejemplo, seguro él no sabía que yo sabía donde se encontraba mi padre. Y sabía que debía decírselo, debía hablarle de él y contarle que lo tenía vigilado. 

Pero sabía que ahora mismo su mente se basaba en Hoseok, Jungkook y Jimin. Y quería que siguiera así. Si había una forma de que él se olvidará de mi padre, lo iba a hacer. Ese señor desaparecería por mí, yo misma le pondré fin y Yoongi podrá estar en paz. Es todo lo que quiero, es todo lo que deseo. Que mi hermano pueda vivir su vida sin tener que preocuparse más. 

Ya no más.

—La historia corta—continuó Hoseok.— es que primero manipulé a Yugyeom para que crea que lo suyo con Yoongi solo era una equivocación. Luego hice un trío con Taehyung y Jungkook, haciendo que su precioso novio le pusiera los cuernos. Me acosté con el único chico que iba a tener el corazón de tú hermano, sacándole ese derecho. ¿Qué más? Oh, sí. Me olvidaba la mejor parte. Hice que su hermoso novio se enamorara de mí. ¿Genial, eh? 

Quería arrancarle los ojos. Quería que sufriera. ¿Por qué? ¿Por qué, Yoongi? ¿Qué mierda te ha hecho mi hermano para no querer que sea feliz? ¿Quién te ha hecho daño para no querer que nadie más sea feliz? 

Fifty Shades » BangtanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora